Las etapas hasta León fueron muy tranquilas, llevaba días sin que nadie le vigilara o le persiguiera. El agente lo tenía claro, el ataque en el albergue aquella noche fue de un mero ladrón y el peregrino que le perseguía, un pobre loco. El agente empezó a sentirse aliviado.
Sobre las 13 h el agente entró en la Plaza del Obispo y justo en la esquina, un hombre muy mayor se dirigió a él.
-Eh tú, ¿qué tal estás?. No pretenderás seguir buscando esas páginas. Si las descubres todas, el mal se apoderará de la humanidad. Mi Orden no lo permitirá, tenlo claro. Lo mejor que puedes hacer es darnos las páginas, hay que destruirlas.
El agente, asustado, empezó a andar muy rápido para librarse de ese malvado anciano.
-No huyas, no puedes escapar de nosotros. Ten mucho cuidado, no sea que algún día no te puedas levantar de la cama -le gritó y amenazó el miembro de la “Orden Negra”.
El agente se dirigió raudo al punto de encuentro con la “Orden de Iacobi”. Estaba claro, la “Orden Negra” existía, y él estaba en peligro
Ya en la Catedral, una mujer mayor se dirigió a él.
- ¿Qué tal?. Siéntate a mi lado. Veo que sigues adelante. Pues sigamos con las pruebas. Como sabes te encuentras en la Catedral de León, también denominada Pulchra Leonina, este monumento tan representativo y emblemático de la ciudad, es también uno de los templos góticos más importantes del mundo, que no podría entenderse sin sus vidrieras. Pues son sencillamente espectaculares, y resultan ser de las más importantes del mundo.
Es por ello que hemos decidido, que la prueba en esta ciudad, esté basada en ellas, así pues, comencemos.
Esta página constaba de dos retos, basados como bien se dice en las vidrieras de la Catedral, comenzando por el Rosetón de la fachada occidental (por donde se pone el Sol), realizado en el siglo XIII d. C.
Tras explicarle a los alumnos y alumnas qué era un rosetón (elemento arquitectónico creado a partir de una ventana circular, que se adorna con distintos elementos geométricos), el objetivo de esta prueba consistió en analizar los elementos geométricos principales del mismo:
Identificando los elementos geométricos que pudiesen ver en este rosetón, indicando las relaciones entre los mismos (posiciones relativas, semejanzas, traslaciones, giros, tangencias,..etc..).
Precisando e indicando los ejes de simetría, así como si existía geometría de giro o de ángulo.
Localizando el elemento generador, previamente se les explicó que era un elemento generador en un rosetón.
Y, por último, la primera parte finalizó con una actividad de consolidación del aprendizaje, donde aparecería la influencia del arte y la creatividad, invitando al alumnado a realizar su propio rosetón, a partir de un elemento generador, utilizando para ello figuras geométricas, así como las transformaciones geométricas isométricas, que ya habían sido analizadas con anterioridad.
Como evidencia se les entregó 3 fotocopias en las que aparecía el Rosetón de la fachada occidental, en ellas debían definir cada uno de los aspectos pedidos en forma y definición, así como la definición de ejes y del elemento generador. Y, por último, se les entregó una fotocopia con una esfera dibujada, para que pudiesen crear su propio rosetón.
La siguiente y última parte, consistió en el reto conocido como “Las vidrieras en cifras”, donde se planteó un problema de ecuaciones de primer grado (una actividad de consolidación, pues el alumnado estaba viendo esta parte en clase de matemáticas).
El reto comienzó introduciendo al alumnado en la superficie total de vidrieras con las que cuenta la Catedral de León, nada más y nada menos que 1800 metros cuadrados, algo menos que una tercera parte de un campo de fútbol. Una de ellas, en concreto la conocida como la Vidriera de la Cacería se ha comenzado a deteriorar, y debe ser reemplazada por una nueva.
Sabiendo que la misma tenía una forma rectangular, y que era 200 cm más larga que ancha, y su perímetro era de 1560 cm. El alumnado debía calcular las dimensiones de la misma (ancho y alto), para poder encargarla al cristalero y experto en vidrieras.