El segundo modelo económico que tuvo México en su historia fue el de Sustitución Importaciones, consistió en sustituir las importaciones mexicanas por bienes hechos en el país.
Este modelo económico nace al terminar el periodo presidencial de Lázaro Cárdenas, no sin dejar de mencionar el panorama internacional de aquella época, ya que se estaba viviendo la Segunda Guerra Mundial. Como consecuencia durante esta guerra, se debilitó el mercado europeo provocando con ello que se acentuara nuestra dependencia del mercado con los Estados Unidos, ya que el proceso de industrialización mexicano dependía de las importaciones norteamericanas. Europa, sumergido en las luchas armadas deja de producir bienes y es Estados Unidos el que le provee bienes y servicios. Nuestro país entonces comienza a proveer a los norteamericanos materias primas para poder satisfacer la demanda europea, la producción agrícola en este periodo se abrió hacia el vecino del norte.
A este modelo también se le conoce como crecimiento hacia dentro, y consistía en la fabricación de aquellos artículos que se manufacturan en el país, es decir no se adquieren en el extranjero, con la finalidad de aprovechar el capital nuestro mediante una política económica de estímulos y creación de empresas de bienes de consumo. Continuando con la política cardenista de una economía mixta, el estado atendía el sector público y ampliación de infraestructura y el sector privado atendía la industria.
En este modelo fueron presidentes de la república Manuel Ávila Camacho y Miguel Alemán Valdés que aplicaron las siguientes políticas que a continuación se explican:
1. Manuel Ávila Camacho (1940-1946).
En este sexenio nacen algunos organismos públicos como: Instituto Mexicano del Seguro Social (1942), Altos Hornos de México (1942), entre otros. Ávila Camacho se propone consolidar la paz social llegando a acuerdos con empresas, con el clero, con los servidores públicos etc.
En este periodo se puso especial énfasis en el fomento a la industria privada y la consolidación de la banca privada, proporcionando créditos a empresarios, se amplió la infraestructura de comunicaciones y transportes.
Para buscar que los inversionistas mexicanos invirtieran en el país, estableció políticas de bajos impuestos y exenciones fiscales y aplicó una política proteccionista que buscaba impulsar la producción, distribución y circulación de bienes hechos en nuestro territorio.
2. Miguel Alemán Valdés (1946-1952).
A este presidente le interesaba que se crearan empresas en el país, pero no solo con inversión nacional, sino extranjera.
Su sexenio se caracterizó por otorgar facilidades a la inversión privada, se crearon algunos organismos para impulsar la economía como: Banco Nacional Monte de Piedad (1946), Industria Petroquímica Nacional (1949), Constructora Nacional de Carros de Ferrocarril (1952), entre otras; se destacó en la construcción de caminos y puentes.
Las empresas públicas tuvieron un rol muy importante en la industrialización sustitutiva de importaciones, apoyando la rentabilidad de las empresas privadas; sin embargo, el crecimiento se detuvo en este periodo pues se tuvieron algunos tropiezos económicos, entre los que podemos mencionar los siguientes:
● El gasto público del gobierno provocó inflación, ya que se gastaba más de lo que se recauda por concepto de impuestos.
● Se aplicó una política fiscal que afectaba a la clase trabajadora que eran los que pagaban más impuestos.
● En este sexenio estuvieron presente la devaluación del peso frente al dólar, por ejemplo, el tipo de cambio pasó de 4.85 pesos por dólar en 1947 a 8.65 en 1952, representando una devaluación del 87.34%.
● En este periodo regreso el neo latifundismo al país. Con el propósito de fomentar el crecimiento agrícola se reformó el artículo 27 de la constitución federal, con la finalidad de apoyar al agricultor capitalista dedicado al comercio de exportación, perjudicando a los campesinos y permitiendo la inversión extranjera en el campo.
● Dependencia tecnológica del exterior.
Lo anterior provocó, hacia finales de la década de los cincuentas, que la inversión en industria de paralizara, era importante del desarrollo tecnológico para la obtención productos como acero, aluminio, autos ensamblados, etc. Contrario a esto, la economía del país se complicó, el gobierno dejó de brindar incentivos económicos locales y de garantizar la protección de productos nacionales. El país empezó a tener una inflación muy elevada, la inversión privada nacional no aumentó por lo que el proceso de industrialización basado en la sustitución de importaciones estaba llegando a su fin. (Vermon, 1975).
En este periodo, con la aplicación del modelo en mención, aunque se hicieron esfuerzos por aplicar el crecimiento desde adentro, la industria nacional no respondió de manera suficiente. La sustitución de importaciones no se planificó con objetivos claros en cada una de las etapas y como consecuencia el país entró en crisis. Esto permitió que surgiera una nueva forma de acumulación que buscaba urgentemente un cambio en la relación entre el estado (políticas económicas), el capital (inversión) nacional y la inversión extranjera que se centró en la producción de bienes de consumo A este nuevo modelo económico se le llamó Desarrollo Estabilizador, del cual hablaremos a continuación.
EL MILAGRO MEXICANO
Periodo comprendido entre 1958 y 1970 en el que hubo un elevado crecimiento del PIB de 6.4% anual. Una estabilidad de precios de 4.22% y tipo de cambio.