Chamanismo y ondas cerebrales

El Chamanismoy las ondas cerebralesEn la tradición shamanística, el sonido se ve como un camino para entrar en otros mundos y realidades. En el pasado, el acceso a esta otra realidad era un secreto excepcionalmente guardado y sólo podía ser comprobado después de un largo período de estudios, meditaciones y ceremonias especiales.Es conocida la función de la música desde hace años como herramienta de sanación, y de hecho la tradición ya marcaba una influencia directa o indirecta de las vibraciones acústicas sobre el organismo, pero no había prueba científica. Los curanderos primitivos, los chamanes y los sanadores del mundo entero sanaban con sus instrumentos y sus cánticos en una frecuencia que hacia revivir a las células de su ostracismo.Son tan reconocidos hoy, como instrumental de Musicoterapia, hasta elpunto que en ciertas clínicas de estados Unidos recomiendan el sonido de estos instrumentos para reequilibrar el sistema inmunológico.La medición de las ondas del cerebro electromagnéticas ha demostrado que hay un número de longitudes de onda claramente reconocibles, cada una conectada a un estado de conciencia diferente. Sabemos que el estado normal del cerebro produce ondas Beta. Las ondas Alfa están presentes en el cerebro en un estado de meditación y de conciencia en calma. Las ondas Zeta se producen en un estado de "medio sueño" y las ondas Delta se activan solamente mientras se duerme profundamente.Estos sonidos inspiran un sentimiento de profunda relajación y de "apertura del espacio interior". La información del cerebro se transmite a través de las "neuronas", células nerviosas con largas prolongaciones ramificadas que se conectan para transmitir impulsos nerviosos.

"Por contacto directo entre la música y la persona que la recibe, puede restablecerse la unidad de la consciencia por desbloqueo de los trabas emocionales y de lo que se podrían llamar nudos vibratorios del parasimpático.

Por resonancia con la Música Multidimensional se puede observar un efecto disipado del fenómeno que se comunica de célula en célula, entre sistemas conexos. Se llega de este modo al reequilibrio de los potenciales eléctricos a lo largo de los meridianos de acupuntura. el efecto puede ser físico, psíquico y holistico.

El fenómeno que se origina en la percepción celular de las vibraciones se traduce de alguna manera en sensaciones cada vez mas precisas que corresponden a una “toma de consciencia global de uno mismo."

"El profesor R Dutheil, prosigue, explicando que hay en principio un efecto de "auto-diagnostico", seguido del "efecto terapéutico", ya que ponen en evidencia los traumatismos y correcciones que la consciencia produce.

Por Alex Vicq.La Vie Naturelle. Marzo 1994

El tambor chamánico El tambor asume un papel de primer orden en las ceremonias chamánicas. Su simbolismo es complejo; múltiples sus funciones mágicas. Es indispensable para el desarrollo de la sesión, ya conduzca al chamán al "Centro del Mundo", ya le consienta volar por los aires, ya convoque y "aprisione" a los espíritus, o ya, por último, que el tamborileo permita al chamán concentrarse y volver a establecer un contacto con el mundo espiritual que se dispone a recorrer. Se recuerda que muchos sueños iniciáticos de los futuros chamanes llevan aparejado un viaje místico al "Centro del Mundo", a la residencia del Árbol Cósmico y del Señor Universal. Con una de las ramas de este Árbol, que el Señor deja caer para ello, el chamán fabrica la caja de su tambor. La significación de este simbolismo nos parece que surge con bastante claridad del conjunto del cual es parte: la comunicación entre el Cielo y la Tierra por medio del Árbol del Mundo, esto es, por el Eje que se halla en "Centro del Mundo". Por el hecho de que la caja de su tambor está sacada de la propia madera del Arbol Cósmico, el chamán, al tañerlo, es proyectado mágicamente cerca de ese Árbol: es proyectado al "Centro del Mundo", y, por el mismo impulso, puede ascender a los Cielos. Desde este punto de vista, el tambor puede ser identificado con el árbol chamánico de múltiples peldaños por el cual el chamán sube simbólicamente al Cielo. Trepando por el álamo, el chamán se aproxima al Árbol del Mundo y después sube efectivamente a él. Los chamanes siberianos tienen también sus árboles personales que no son sino representantes del Arbol Cósmico; algunos utilizan asimismo "árboles invertidos", esto es, clavados por sus raíces en el aire, y que, como se sabe, son uno de los símbolos más arcaicos del Arbol del Mundo. Todo este conjunto, unido a las relaciones ya notadas entre el chamán y los álamos de las ceremonias, muestra la solidaridad entre el Árbol Cósmico, el tambor chamánico y la ascensión celeste. La misma elección de la madera con la que se hará la caja del tambor depende únicamente de los "espíritus" o de una voluntad trans-humana. El chamán ostiaco-samoyedo coge su hacha y, cerrando los ojos, entra en un bosque y toca un árbol a la ventura; de éste sacarán sus compañeros la madera para la caja, al siguiente día. ...También se procede a la "animación del tambor" rociando su caja con alcohol. Entre los Yakutes se recomienda escoger un árbol herido por el rayo. Todas estas costumbres y precauciones rituales muestran claramente que el árbol concreto ha sido transfigurado por la revelación sobrehumana y que en realidad ha dejado de ser un árbol profano y simboliza al propio Arbol del Mundo. La ceremonia de "animación del tambor" es sumamente interesante. Cuando el chamán altaico lo rocía con cerveza, el aro se "anima" y, por conducto del chamán, cuenta cómo el árbol del cual formaba parte creció en el bosque, cómo fue talado, traído al pueblo, etc. Después el chamán rocía la piel del tambor y ésta "animándose", cuenta también su pasado. Por medio de la voz del chamán, el animal habla de su nacimiento, de sus padres, de su infancia y de toda su vida hasta que el cazador lo mató. Termina asegurándole al chamán que le prestara muchos servicios. ...Todas las imágenes de los tambores están dominadas por el simbolismo del viaje extático, esto es, por los viajes que suponen una ruptura de nivel y, por tanto, un "Centro del Mundo". El redoble inicial de la sesión, destinado a evocar los espíritus "encerrarlos" en el tambor del chaman, constituye el momento preliminar del viaje extático. Por este motivo se dice que el tambor es el "caballo del chamán". ...La idea del viaje extático se encuentra también el nombre que dan a su tambor los chamanes de los Yurak de la tundra: arco o arco cantante. Según Lehtisalo y Harva, el tambor chamánico servía originariamente para echar a los malos espíritus, cosa que se podía hacer también valiéndose de un arco. Es totalmente exacto que el tambor se utiliza a veces para expulsar los malos espíritus, pero en semejantes casos su empleo particular se ha olvidado y se acude a la "magia del ruido" con la que se expulsa a los demonios. Tales ejemplos de modificación de función son bastante frecuentes en la historia de las religiones. Pero no creemos que la función originaria del tambor haya sido la de expulsar espíritus. El tambor chamánico se distingue precisamente de los demás instrumentos de la "magia del ruido", porque hace posible una experiencia extática. Que ésta, en sus orígenes, fueron preparada por el encanto de los sonidos del tambor, encanto que era valorado como "voz de los espíritus", o que se haya llegado a una experiencia extática después de la extrema concentración suscitada por un redoble prolongado, es un problema que no afrontamos de momento. Pero hay un hecho cierto; es la magia musical la que ha decidido la función chamánica del tambor, y no la antidemoníaca magia del ruido. (*)

(*) Fuente: Mircea Eliade, El chamanismo y las técnicas arcaicas del éxtasis, Ed. Fondo de Cultura Económica, México.