En el año 1938, el francés Antonin Artaud, conocido director de teatro, poeta, dramaturgo, autor y ensayista, escribió una obra llamada “El teatro y su doble”, en ella describe una realidad ficticia fundamentada en fantasmas de objetos, personas e imágenes, la cual denominó “la réalité virtuelle”. Este término fue desapareciendo con el tiempo sin causar un mayor furor en el mundo.
Fue retomado por Stanley G Weinbaum, quien habló sobre las gafas de Pigmalión, una técnica de realidad virtual que consistía en transmitir grabaciones holográficas con características únicas que le permitiría vivir nuevas experiencias y sensaciones a la audiencia.
Años más tarde, Morton Heilig fue conocido como el padre de la realidad virtual, todo esto por haber realizado un escrito para una de sus obras, donde destacó las sensaciones y se apoyó en la teoría, para construir un prototipo llamado Sensorama, el cual consistía en una pantalla que transmitía cinco pequeñas películas con efectos sensoriales, lamentablemente la falta fondos lo obligó a suspender el proyecto.
Su próximo invento fue patentado en el año 1960, y fue conocido como la máscara teleférica, un artefacto que poseía las mismas características del Sensorama, sólo se diferenciaba en que esta permitía tener una experiencia personal mediante sensaciones e imágenes de tres dimensiones (3D), y que en algunos casos fueron a color. Otro de sus aportes fue el casco de realidad virtual, el cual se colocaba en la cabeza y tenía una pantalla con dispositivos de sonido, pero resultó ser un punto desfavorable, por lo cual las personas preferían el sensorama; el casco no proporcionaba la experiencia completa con sensaciones, sólo con imágenes en 3D y sonidos; a pesar de que se trató de un prototipo, su visión sobre este proyecto fue bastante clara.
Lo que para muchos sólo se trataba de fantasías, pronto comenzó a materializarse, así fue como en el año 2000, la NASA y Google comenzaron a trabajar con la realidad virtual que hoy en día conocemos. Por poner un ejemplo tenemos esa vez cuando la NASA empleó un sistema que contribuyó con la exploración en el planeta Marte mediante la conducción con realidad virtual, el cual causó un revuelo en la sociedad que quedó maravillada con todos los avances tecnológicos que se estaban obteniendo.
Por otra parte, Google presentó a sus usuarios el programa Google Street View, disponible en la página web, para quienes deseen tener una visión más amplia del mundo. Ingresando a esta página se obtienen imágenes panorámicas con una visibilidad horizontal de 360° y vertical de 290°.
Hoy en día el mercado de la realidad virtual va en ascenso, por lo que cada vez más empresas y personas invierten en este avance tecnológico debido a que motiva a la digitalización de ideas, además su costo con el tiempo se ha hecho más accesible para usuarios comunes.
Un ejemplo son las empresas de turismo, las cuales utilizan la realidad virtual en su proceso de captación de empleados. Algunos inversionistas incluso han puesto su dinero en la creación de zoológicos con animales virtuales que permiten a chicos y adultos conocerlos y acercarse sin el riesgo de ser agredidos. Los sectores automovilísticos, de medicina y el del entretenimiento también han desarrollado la realidad virtual para mejorar sus funciones, entre los que merece la pena mencionar la montaña rusa ubicada en el parque de Warner, en la que los diseñadores de interiores han percibido que las personas obtienen respuestas positivas si observan el diseño de forma digital con una vista de 360°.