La serie Spider-Man de 1967 marcó el debut animado del héroe, con historias sencillas y un estilo visual psicodélico que reflejaba la cultura pop de los 60. Aunque las animaciones eran limitadas, capturó el humor y la valentía de Peter Parker enfrentando a villanos clásicos y originales, destacándose por su icónica canción de apertura. En los 70, Spider-Woman (1979) expandió el universo arácnido con Jessica Drew como protagonista, abordando el auge de personajes femeninos en la animación. Spider-Man tuvo una aparición especial, fortaleciendo la conexión con el universo Marvel y aprovechando el contexto de la igualdad de género y la evolución de los superhéroes en esa década.En los 80, Spider-Man (1981) y su spin-off Spider-Man and His Amazing Friends modernizaron al personaje, mostrándolo más confiado y colaborativo. En la primera, Peter enfrenta a enemigos clásicos en historias más dinámicas, mientras que en la segunda lidera un equipo junto a Iceman y Firestar, fomentando el espíritu de camaradería típico de la época. Estas series reflejaron el optimismo juvenil de la década y popularizaron los crossovers, consolidando a Spider-Man como un ícono cultural en la televisión animada.
Contenido
-Álbum
-145 figuritas autoadhesivas