Por el RH Juan Luis Herrera Miranda PVM de la RLS Concordia Universal N° 14 del Vall del Callao
Índice
Introducción.........................................................................................................................3
Nacimiento, Vida y Muerte ...............................................................................................3
Periodista .............................................................................................................................. 4
Cronista y Corrector de Pruebas ...................................................................................... 4
Corresponsal ....................................................................................................................... 4
Director y Fundador...........................................................................................................4
Sus Obras en la Prensa .......................................................................................................5
Periodista Político............................................................................................................. 5
Varios ...................................................................................................................................5
Bibliotecario........................................................................................................................5
Contador y Miembro del Cuerpo Político de la Marina de Guerra .........................6
Marino y Combatiente...................................................................................................... 6
Masón ...................................................................................................................................7
El Entorno Marítimo y Anticlerical.................................................................................7
La Trayectoria Masónica...................................................................................................8
Político ................................................................................................................................10
El Complot contra Castilla ...............................................................................................10
El Exilio en Chile................................................................................................................. 10
El Retorno, la Revolución y el Senado.............................................................................11
Palma y la Guerra del Pacífico.......................................................................................... 11
Víctima Alturada.................................................................................................................11
Ricardo Palma Soriano, Miguel Grau Seminario y Lizardo Montero Flores..........12
Resonancia Literaria en el Extranjero ........................ 14
Francia................................................................................14
España.................................................................................15
Argentina ........................................................................... 15
Estados Unidos...................................................................15
Palma en inglés...................................................................15
Estudios sobre su obra .....................................................16
Reconocimientos................................................................ 17
Epílogo..................................................................................17
Bibliografía......................................................................... 18
Introducción
No hay personaje, unido a la historia y a la Masonería del Perú, que más actividades disímiles desarrolló − muchas al mismo tiempo − que don Manuel Ricardo Palma Soriano. Por ello es difícil encasillarlo en tal o cual esfera de la vida, así como ordenar la presentación de sus quehaceres de acuerdo a un solo criterio. Además, incursionó en campos insospechados y su obra tuvo alcances desconocidos para la mayoría de los peruanos.
Él es muy conocido por sus Tradiciones peruanas género que él creó (y en las que la exclusión social de los grupos marginales está muy presente, según Primavera Cuder); pero a nosotros nos toca destacar en este artículo aquellas actividades y repercusiones menos conocidas de nuestro patriarca, como su origen humilde; sus estudios superiores informales; su gran prole; su incursión en el mundo periodístico, no desligado de la política, en el país y el extranjero; los pormenores de sus ingresos y salidas de la Biblioteca Nacional; su carrera como contador y miembro del cuerpo político de la Armada; su participación como marino y combatiente; su trayectoria masónica y su carácter anticlerical; su apasionada intervención en la política peruana; su intervención en la guerra del Pacífico; su acendrada amistad y hermandad con don Miguel Grau Seminario, Caballero de los Mares y Peruano del Milenio; así como la enorme resonancia que tuvo su obra en el exterior.
Debemos pedir disculpas a los autores cuyas obras hemos consultado, por no citarlos en cada una de las partes que les corresponde en esta biografía, pues no hemos querido hacerla de corte académico, sino más amical. Para su desagravio, citamos sus nombres y obras en la bibliografía de la misma.
Agregamos al final varias notas sobre la biografía de los autores que estuvieron cerca de don Manuel Ricardo Palma Soriano y nota aclaratoria sobre término masónico utilizado en el acta de su iniciación.
Nacimiento, Vida y Muerte
Nace en Lima el siete de febrero de 1833 y cuatro días después es bautizado y recibe el nombre de Manuel en la parroquia del Sagrario de la Catedral. Hijo natural de Pedro Palma, de Cajabamba (Cajamarca), y Dominga Soriano, de Cañete (Lima), de origen negro. Sin embargo, en su partida de bautismo fue inscrito como Manuel Ricardo Palma Carrillo; el apellido “Carrillo” era el de su abuela materna, debiendo haberle correspondido el apellido “Soriano” de su madre. El matrimonio Palma-Soriano fracasó prontamente por las diferencias raciales, generacionales y culturales, y el pequeño Ricardo, que tenía 9 años, permaneció en la casa paterna.
Fue alumno de la escuelita de barrio del dómine Pascual Guerrero (1838-1841), alumno distinguido del colegio particular de Clemente Noel (1842-1846), alumno distinguido del colegio particular del italiano Antonio Orengo (1846-1849). Estudió como alumno no matriculado en el Colegio de San Carlos, dirigido por el sacerdote e ideólogo conservador Bartolomé Herrera (1846-1849).
En el año 1872 nace su primer hijo Clemente Palma Ramírez, escritor modernista y crítico literario, y en 1875 su segundo hijo Félix Vital Palma Román. En el año siguiente contrajo matrimonio, a los 46 años, con doña Cristina Román Olivier, madre del segundo de los 4 nombrados y de otros cinco más: María Angélica Palma Román, escritora y periodista, una de las fundadoras del movimiento feminista en el Perú; Ricardo Palma Román, ilustre médico; Peregrina Augusta Palma Román; Cristina Palma Román; y Renée Cristina Palma Román, nacidos entre 1878 y 1892.
Ricardo Palma falleció en la madrugada del 6 de octubre de 1919, a los 86 años, en el número 3 de la calle General Suárez de Miraflores. Se le hacen exequias de ministro de Estado. Es enterrado en el Cementerio General de Lima.
Periodista
En el campo del periodismo, a Palma le tocó ser cronista y corrector de pruebas, corresponsal, director y fundador y periodista político, en muchos periódicos del país y del extranjero. Algunos de estos publican sus obras y son medio de expresión de su creatividad.
Cronista y Corrector de Pruebas
En 1851, él, de sólo dieciocho años, y el poeta Trinidad Fernández eran cronistas y correctores de pruebas en El Correo de Lima, diario que había reemplazado a El Correo Peruano, con el “pingüe” sueldo de treinta pesos al mes.
Corresponsal
Escribe desde Chile para el periódico La América, “periódico político, consagrado a la defensa de la autonomía de las naciones americanas”, que en Lima publicaron, desde abril de 1862, junto con Francisco de Paula González Vigili , Francisco Javier Mariáteguiii , José Gregorioiii y Mariano Felipe Paz Soldániv , Santiago Távarav , ggnacio Noboavi . Al parecer, también estuvieron inmersos en esta lucha desde Lima, Manuel Nicolás Corpanchovii, José Casimiro Ulloaviii y el chileno Manuel Bilbaoix, quienes habían escrito Bases de la Sociedad de Educación Americana en 1857.
Es corresponsal de El Comercio de Lima en las gslas Chincha en 1854 y en España en 1892; así como de La Revista de Lima, El Mercurio de Lima y El Comercio, y La Revista de Buenos Aires en Europa en 1864.
En 1880 es corresponsal en Lima de La Raza Latina de Nueva York, El Siglo XgX de México, El Tiempo de Montevideo y La Prensa de Buenos Aires.
Entre 1881y 1883, es corresponsal en Lima del semanario El Canal, bajo el pseudónimo de Hiram (vocablo masónico). Este seminario era publicado en Panamá, por Federico Larrañaga. Un diario peruano que, fuera de nuestro territorio, defendía ante los ojos de una América inexplicablemente silenciosa, los intereses del maltratado y ocupado Perú por las tropas de Chile. Escribía contra Francisco García Calderón y Lizardo Montero, y a favor de Nicolás de Piérola. En su despacho fechado el 11 de enero de 1882, se expresa con frases muy duras del general Andrés A. Cáceres, imputándole la comisión de una traición a Piérola, quien, según él, lo había ascendido a la clase de general.
Director y Fundador
En 1881, siendo director de “El Havre”, funda “El Correo del Perú” con Manuel A. Segura.
Sus Obras en la Prensa
La más antigua huella palmina de orientación periodística descubierta en la prensa limeña, es su poesía “A la memoria de la Sra. D.ª Petronila Romero”, aparecida en El Comercio del 31 de agosto de 1848, o sea un año y veinte días antes de la fundación de su Logia madre, Concordia Universal N° 2 del Callao.
Fueron las prensas de El Correo las que publicaron un primer impreso palmino a fines de 1851: Rodil, drama en tres actos y prólogo.
Periodista Político
Participó en El Diablo, ”periódico infernal” que circuló semanalmente durante el año 1848; órgano de ”la bohemia literaria”. En esa misma dirección, escribe en el año 1854 en el Heraldo de Lima, con Manuel Nicolás Corpancho, José Arnaldo Márquezxi , Carlos Augusto Salaverryxii , Trinidad Fernándezxiii , Juan de los Herosxiv , y el venezolano Juan Vicente Camacho xv . Corpancho se aparta de ese diario en razón de su tendencia progobiernista, al defender a Echenique.
En 1852 escribe para El gntérprete del Pueblo, en cercana colaboración con el gobierno constitucional del general José Rufino Pompeyo Echenique Benavente.
Como periodista liberal de oposición a Manuel ggnacio Prado Ochoa, escribe en el año1866 para El Constitucional, con el poeta Carlos Augusto Salaverry. Fue deportado a Ecuador (Guayaquil) por su apoyo a José Balta en dichos escritos. De la misma manera en 1867 para La Campana, bajo el seudónimo de “Un Campanero”; en 1872 para La Patria; en 1858 para El Constitucional, junto con Francisco de Paula González Vigil, Francisco Javier Mariátegui, Benito Lasoxvi y José Gálvez Egúsquizaxvii; en 1859 para La Zamacueca Política; y, en 1860 para El Diablo, siendo su mentor José Gálvez Egúsquiza, con el cual se embarcó en la aventura revolucionaria que el 23 de noviembre de 1860 quiso deponer al presidente Castilla mediante un acto de fuerza tramado para atentar contra su misma persona, por lo cual fue deportado a Chile.
Varios
En el año 1852 escribe sobre estética romántica en El Mensajero y sátiras en el periódico El Burro. Estando en el exilio en Chile durante el año 1862, escribe en la Revista del Pacífico, en la Revista de Sud-América y en el Heraldo Masónico.
Bibliotecario
El 2 de noviembre de 1883 logra que el presidente de la República, general Miguel gglesias, y el ministro de Justicia, gnstrucción, Culto y Beneficencia, Manuel Antonio Barinaga, lo nombren director de la Biblioteca y Archivo Nacional, destruida por causa de la guerra del Pacífico. Esta labor lo obligó, entre otras funciones y roles, a denunciar insistentemente el abuso chileno frente al patrimonio bibliográfico peruano.
Además, solicitó a personalidades de diversas partes del mundo, la donación de libros, ganándose el apelativo de “El Bibliotecario Mendigo”; y, por amistad, obtuvo del presidente de Chile, Domingo Santa María González (masón en la oscuridad según el periodista chileno Carlos Tromben, y públicamente liberal y laicista acérrimo), la devolución de 10,000 libros.
El 28 de julio de 1884 inaugura la biblioteca, que dirige hasta febrero de 1912, cuando renuncia por discrepancias con el gobierno de Augusto Leguía, que, en reemplazo, nombra a su enemigo, Manuel González Prada. El 11 de marzo de ese año recibe en el Teatro Municipal un caluroso homenaje de amigos y opositores al régimen. Traslada su residencia a Miraflores. El 31 de julio el Centro Universitario le manifiesta su admiración.
Verdad es que el escritor tendrá su desagravio: el nuevo gobierno del coronel Óscar R. Benavides lo nombrará director honorario de la Biblioteca en 1914. González Prada será destituido y su puesto lo ocupará el candidato de Palma, Luis Ulloa. Esto, sin embargo, no durará mucho: en febrero de 1916 González Prada recupera el cargo y el famoso escritor renuncia a su nombramiento honorario.
Contador y Miembro del Cuerpo Político de la Marina de Guerra
Su trayectoria como tal comienza en la goleta de guerra Libertad, desde septiembre de 1853. En el año1854 se le ordena embarcarse en el bergantín Guisse. El 6 de enero de 1855 (cuatro meses y 29 días antes de su iniciación como masón), es nombrado contador del vapor de guerra «Rímac». En tal carácter, conoce y frecuenta Guayaquil. El 1.º de marzo naufraga en la punta de San Juan, cerca de Acarí (Arequipa); su responsable conducta le gana una recomendación.
Y ocupa el mismo cargo en el Loa desde febrero de 1856. Este cargo, o mejor diríamos, canonjía y admirable escape le fue proporcionado por el doctor Miguel del Carpio, magistrado, estadista y literato, que era el mecenas de la bohemia.
En noviembre de 1856, a bordo de dicho buque, al ancla en el puerto de gslay, se adhiere con otros marinos a la revolución conservadora del general Manuel ggnacio de Vivanco. El Gobierno de Castilla da de baja a todos los rebeldes. Y en marzo de 1857, en el puerto de San José, los buques Loa y Tumbes son capturados por marinos ingleses y conducidos al Callao. En junio de 1857en el Callao, a bordo del vapor de guerra Tumbes, depone su actitud rebelde en un grupo de marinos.
En 1858 es nombrado secretario de la Mayoría de Órdenes del Departamento de Marina y en 1859 es ascendido a oficial 2.º del Cuerpo Político de la Armada.
Marino y Combatiente
Como marino tomó parte en el desembarco de Guayaquil en 1859, en la guerra con Ecuador, desembarco en el que también tomó parte, su amigo y hermano masón Manuel Nicolás Corpancho, así como Andrés A. Cáceres, también masón y de su misma Logia.
Funge de asistente de José Gálvez y comisario de guerra destacado en la oficina del telégrafo, en el combate del 2 de mayo de 1866 contra la escuadra española. En dicho combate salva de morir al ir a cumplir una misión encomendada por Gálvez, dejando el torreón donde instantes después éste moriría tras explotar el polvorín. Por su experiencia y conocimientos en el campo de las armas y del mar, entre agosto y octubre del mismo año lo encontramos como profesor de Historia Militar y de Derecho Marítimo en el Colegio Militar.
Masón
El Entorno Marítimo y Anticlerical
El acercamiento de don Manuel Ricardo Palma Soriano a la Masonería chalaca lo podemos encontrar, de alguna manera, en su desempeño como contador en diferentes naves de la Armada peruana. A su regreso al puerto del Callao alrededor de 1857, en donde estaba anclado el Loa, Palma seguirá con sus habituales labores contables, pero al término de las mismas asistirá con cierta frecuencia a las reuniones nocturnas de la Logia masónica Concordia Universal que funcionada en dicho puerto. La Masonería peruana a la que pertenecerán no pocos de sus compañeros y guías – Corpancho, Sánchez Silva y O’Loghlin, entre otros –, debió de captar su voluntad por sus ideales humanitarios y filantrópicos, pero también por su beligerancia anticatólica y heterodoxa. Lo cierto es que se unió a ella con entrega y convicción, haciéndose uno más de los asistentes a sus nocturnas reuniones secretas desarrolladas a la frágil luz de ritos puntuales como enigmáticos. Así, en cada arribo al Callao, después de sus interminables viajes, él y don Miguel Grau Seminario, iban juntos a trabajar con su venerable Maestro en la Logia Cruz Austral en el Templo de la calle Teatro; en cuya ceremonia de consagración en 1877 debió estar presente.
Palma logró acercarse a la Logia masónica, a pesar de que esta no era bien vista por el pueblo, de la misma manera que la orden jesuita. Un diario de la época, expresó una opinión sobre los masones: “… si a los masones que son tenidos (entre el vulgo) por herejes y por ateos… si estos hombres que pasan por perniciosos al cristianismo, ya en el día celebran sus conciliábulos públicamente y enseñan sus emblemas y no ocultan sus grados ni sus trabajos…” No obstante, a medida que asistía con frecuencia a las reuniones de la Logia, la actitud anticlerical de Palma se acentuó cada vez más, llegando a adoptar “tonos aún más severos para condenar al clero, al papado, a la curia romana, a ciertas manifestaciones de la religiosidad popular…”.
Por cierto, esta actitud anticlerical de Palma pudo también deberse a la influencia de Francisco de Paula González Vigil y a la fuerte propaganda liberal en Lima del emigrado chileno Francisco Bilbaoxviii , quien a través de su folleto El Gobierno de la Libertad (publicado en febrero de 1855) y sus artículos periodísticos, encendió los ánimos anticlericales de la juventud. Por otro lado, la labor de Palma a bordo del vapor de guerra Loa fue bastante más recargada que en la goleta Libertad, el bergantín Almirante Guisse y en el transporte Rímac, pues por su buen estado, rapidez y poderío, el gobierno solía encargarle numerosas misiones a su servicio. Como oficial de este buque, Palma llegó a viajar en 1856 a distintos puertos del sur como gslay, Arica, gquique, Coquimbo y Valparaíso y el puerto norteño de Paita, lugar en el cual conoció a Manuelita Sáenz, la otrora pareja sentimental de Bolívar, y al político ecuatoriano Gabriel García Moreno con quien trabó cordial amistad.
Su anticlericalismo se manifiesta, por ejemplo, cuando en 1886, él y Christian Dam, otro masón de su Logia, fueron parte de los organizadores de una campaña nacional contra los jesuitas, en la que intervinieron Manuel González Prada (su opositor), la prensa liberal y radical, la Gran Logia del Perú, debido a la publicación de un texto escolar de historia, escrito por el jesuita P. Ricardo Cappa (ex-marino español que participó en el combate naval del dos de mayo), que hacía apología de la herencia española. El resultado 8 de esta campaña fue la segunda expulsión de la Compañía de Jesús de nuestro país ese mismo año.
No está demás decir que, en las últimas décadas del siglo XgX, tres connotados hermanos de la Logia Concordia Universal del Callao, Ricardo Palma, Guillermo R. Grace y Christian Dam, junto a Alejandro Deustua (hijo) y hermanos de otras logias (P.J. Mariátegui y J.M. Químper), fueron políticos e intelectuales liberales que participaron activamente en las controversias secularizadoras de esa época.
La Trayectoria Masónica
Pero, veamos cuál fue su trayectoria masónica. Muchos estudiosos de diferentes nacionalidades han llenado miles de páginas analizando la obra de Ricardo Palma que ha dejado una huella indeleble en el espectro literario peruano, que ha trascendido en el tiempo por constituir la matriz a partir del cual se ha formado una significativa parte del imaginario histórico peruano; sin embargo existe escasa información sobre su vida masónica por la discreción con que Palma mantuvo su afiliación masónica no obstante haber sido consagrado en la más alta jerarquía de la Orden, y porque en los aciagos días de la ocupación chilena desparecieron importantes documentos de las logias de esa época y de años anteriores.
Lo que sí sabemos, es que un miércoles 4 de julio de 1855, Ricardo Palma ingresa a la Masonería Peruana con tan solo 22 años. Estando trabajando en la Marina de Guerra como contador, se inicia en la Logia Concordia Universal Nº 2, bajo la jurisdicción del Gran Oriente Peruano; siendo Venerable Maestro José María Sánchez, como se puede apreciar en el trazado que consta de la página 38 de la revista “Cien años de historia de una Logia”.
Un fragmento del Acta de gniciación de Ricardo Palma Soriano reza así:
“Preguntó el V:. Mtre. si había trabajos pendientes, y contestó el Sec. que pendía la iniciación del Prof. Ricardo Palma, que estaba en el Cuarto de Reflexiones, por haber estado acordada su iniciación en tenidas anteriores.
Se le remitió el interrogatorio por escrito y lo absolvió a satisfacción, asegurando bajo su firma no pertenecer a la detestable secta de San Fedistas .
Ordenó el V:. Mtre. darle entrada y prosiguió la iniciación en toda forma hasta perfeccionarla con el juramento el gr:., dándole en seguida la luz, sig., tocamiento, palabra y abrazo fraternal; habiendo en seguida pronunciado el orador una pieza de Arquitectura instructiva al nuevo h:., lo que fue aplaudido, lo mismo que la iniciación, contestando el aplauso y los agradecimientos.
Acordó el V:. la palabra en bien general y en particular del…”
Palma se afilió a Virtud y Unión N° 3 en el año 1856, donde alcanzó el grado de Maestro Masón y llegó a ocupar el cargo de Secretario. Por aclamación Palma fue elegido Gran Guarda Templo gnterior de la Gran Logia Nacional del Perú, creada en el Callao en el año1858 con la participación de Manuel Cipriano Dulanto Valenzuela, fundador de la Logia Concordia Universal N° 2. En el año 1860 fue Gran Secretario de la gran Cámara Simbólica.
A inicios de 1862, Palma se encontraba deportado en Valparaíso y fue invitado a participar de los trabajos del Capítulo Masónico Grado 18 bajo los auspicios del Gran Oriente de Francia; ante la escasa asistencia, ocupó el puesto de Orador. En esa Tenida se debatió sobre la separación de la obediencia. En su conclusión Palma opinó que ante la grave cuestión debía aplazarse todo acuerdo hasta que en próxima tenida se reuniera el número de Hermanos que la importancia del asunto requería; demostrando así que guiaba siempre sus actos hacia la concordia, como compete a todo masón que sabe practicar sus principios. Su opinión no fue escuchada y los escasos concurrentes tomaron la decisión de permanecer leales al Gran Oriente de Francia. Pero las logias Unión Fraternal, Aurora de Chile y Orden y Libertad continuaron con el proceso de separación y crearon en esa ciudad la Gran Logia de Chile el 24 de mayo de 1862,
En el mes de abril del mismo año, un grupo de ciudadanos de Valparaíso, para hacer frente a Francia y España que, a su juicio, pretendían reconquistar nuestro continente, se concertaron y crearon la Unión Americana, con el objetivo de “trabajar por la unificación del sentimiento americano y por la conservación de las ideas republicanas de América”. La institución se fundó el 17 de abril, siendo uno de sus fundadores Ricardo Palma. El 22 de abril, la Unión Americana fue instalada solemnemente, con la asistencia de más de 500 personas, además de 200 que no pudieron entrar al lugar del encuentro. Palma fue elegido como uno de los secretarios. También se nombró una Comisión Permanente, en la que Palma fue también uno de sus secretarios. Varios de los miembros de esta Unión eran masones.
Ya en el Perú, en 1871 es elegido Venerable Maestro de la Logia Orden y Reforma N° 7. En 1874 junto a los Hermanos Flores Guerra (Grado 33) y Martín Miangolarra (Grado 32 y miembro de Concordia Universal), instala al Querido Hermano Miguel Ramírez como Venerable Maestro de la Logia Concordia Universal. En 1877 lo encontramos como miembro del Capítulo Rosacruz Grado 18° Alianza Peruana N° 3.
En su condición de Director de la Biblioteca Nacional, el 27 de enero de 1884 remite una carta a la Logia gndependencia del Callao, solicitando el obsequio de libros o una corta suma de dinero para costear la encuadernación siquiera de cien o doscientos volúmenes. En iguales términos se dirigió a su Madre Logia Concordia Universal N° 2, como consta del extracto del correspondiente trazado en la que se dio cuenta del pedido.
Es elegido Venerable Maestro de Estrella Polar N° 10 para el periodo masónico 1886- 1887, cuando ostentaba el Grado 31.
En la Revista Masónica del año 1889, se publica la “Relación de los Miembros del Soberano Capítulo Estrella Boreal Nº 74 por Orden de Antigüedad”, fundado en el Callao en el año 1853. Entre un maremágnum de nombres, Palma figura con el numero cuarenta de los miembros activos. También pertenecieron a este Capítulo, los hermanos 10 de Concordia Universal Manuel Cipriano Dulanto Valenzuela y Juan Bautista Casanave Contreras.
En el Supremo Consejo Confederado Grado XXXggg del Rito Escocés Antiguo y Aceptado fue consagrado en Grado 33º como Soberano gnspector General de las Logias.
Político
El Complot contra Castilla
Como ya mencionamos, el 23 de diciembre de 1860, formó parte, junto a otros hermanos allegados a la “bohemia” literaria, del grupo encabezado por José Gálvez Egúsquiza (miembro de la Logia Orden y Libertad N° 2). La frecuencia de los ritos masónicos, enlazaron aún más la relación de Gálvez con Palma, y el secreto de la Logia, sedujeron al futuro tradicionista en su mocedad de veintisiete años hasta el fanatismo. En el local masónico se conspiraba en ambiente de misterio. Todo era allí reservado, esotérico y oculto. El misterioso poder del secreto litúrgico aplicado a la política tiene fuerza incalculable. Respirando ese aire cargado de magia y de motín alimentaba el verbo alucinado de José Gálvez. Cayó como hipnotizado el joven Ricardo Palma, que asaltó la casa del presidente Ramón Castilla para derrocarlo; complot que fracasó y él fue desterrado a Chile.
El Exilio en Chile
El encargado de los asuntos chilenos en el Perú, Francisco Solano Astaburuaga, se encargó personalmente de la atención del joven rebelde, a quien ya conocía y había tratado en los ambientes de la Biblioteca Nacional. Palma permaneció en la legación chilena desde el 16 al 20 de diciembre, gozando de la hospitalidad de Astaburuaga y su esposa, quienes se encargaron de proporcionarle diversas cartas de presentación que le servirían de mucho en su estancia en el país sureño. El día 20 de diciembre de 1860, Palma fue conducido por Astaburuaga hasta el puerto del Callao, en donde se embarcó en el vapor inglés Lima con destino a Valparaíso.
En su estadía en Valparaíso, Palma terminó por vincularse a diversos círculos intelectuales, así como también a la Logia masónica Lautaro de esa ciudad. Se establece allí −salvo una estancia en La Serena entre diciembre de 1861 y febrero de 1862− donde desarrolla intensa labor periodística y literaria. Como ya se dijo, publica poesía, narrativa, historia y crítica literaria en la Revista de Sud-América y en la Revista del Pacífico. Participa decididamente en el movimiento americanista opuesto a las pretensiones de las potencias europeas.
Castilla le estaba agradecido a Palma por la defensa que hizo de él −a pesar de haber sido desterrado por éste− en un teatro de Santiago de Chile cuando fue censurado y tildado de tirano por un orador político: el discurso provocó aplausos y comentarios; sus ecos llegaron al Perú y, por supuesto, hasta los oídos de Castilla –escribe Angélica Palma, la hija del tradicionista. Y agrega–: Buen muchacho…, buen muchacho ese Palmita– dijo don Ramón, con su peculiar manera de cortar y repetir las frases que hasta ahora imitan los peruanos, aunque ya casi no quede sobre la tierra quien alcanzara a oírlo–. Tiene talento… y es patriota…, sí…, muy patriota… Yo lo quiero…, pero él no me quiere a mí…, no me quiere”. Aún más, al leer las Tradiciones peruanas y La Bohemia de mi Tiempo en las que Palma menciona recurrentemente a don Ramón Castilla, apreciamos que aquel, 11 en términos generales, se refiere siempre a este con respeto y con cariño, y muy especial fervor peruanista.
El Retorno, la Revolución y el Senado
El presidente mariscal San Román, sucesor de Castilla y en cuyo gobierno como Gran Maestro del Gran Oriente Peruano nació Concordia Universal N° 2, promulga en 1862 la ley de amnistía política para los desterrados por su predecesor; sin embargo, el tradicionista recién hará el tornaviaje a la patria en 1863.
En 1865 arriba al Brasil, pero no llega a ejercer el consulado en Pará, al que había sido nombrado. Retorna al Perú vía Nueva York y Panamá, y se une a la revolución nacionalista contra el presidente Pezet. Es dado de baja de la Marina (el 6 de julio). Al triunfar la revolución, como oficial 1.º es nombrado jefe de sección del Ministerio de Guerra (el 5 de octubre). Se desempeña como senador por la provincia de Loreto en el periodo 1868-1872.
En 1867 es secretario personal de José Balta y Montero en su revolución contra del gobierno de Mariano ggnacio Prado.
Palma y la Guerra del Pacífico
Víctima Alturada
Durante la contienda en la defensa de Lima, Palma fue víctima de las tropas chilenas cuando éstas ocuparon la capital; su casa – como todas – fue vilmente saqueada y su biblioteca, impunemente quemada. Tratándose de un personaje público, los oficiales invasores dispusieron guardia permanente y ordenaron que su correspondencia fuera sometida a revisión continua. Son años duros (1881-1883) en que nuestro escritor subsiste básicamente de las colaboraciones literarias que hace al diario La Prensa, de Buenos Aires. Escritores y políticos de la zona del Río de la Plata (como Juana Manuela Gorriti, Roque Sáenz Peña, José Mármol, Hilario Ascásubi, Bartolomé Mitre, entre otros) más de una vez le prodigaron al tradicionista peruano oportuno apoyo material o moral, en los aciagos días de 1881-1883.
Pero, para Palma recordar en sus tradiciones sobre la guerra (“Francisco Bolognesi”, “Un montonero” y “La cajetilla de cigarros”), es negarse al olvido. Se recuerda no por rencor sino para valorar a la nación como ente real y vivo. Ricardo Palma, con la honda pena e indignación que le causara el salvaje agravio a la cultura cuando la Biblioteca de Lima fue destinada a alojamiento de un batallón, y sus libros, considerados como botín de guerra, trasladados en parte a Chile y en parte entregados a la soldadesca para que los vendiera en las bodegas como papel para envolver mercaderías, escribió una enérgica y violenta protesta al jefe de la plaza. La autoridad chilena procedió inmediatamente a apresar al autor de esta protesta; iba a ser deportado a Chile, pero por ser una celebridad, no lo fue.
De los múltiples temas y asuntos que comenta nuestro tradicionista en sus cartas y crónicas al presidente Nicolás de Piérola, escritas entre 1880 y 1913, resaltan cuatro asuntos capitales como son: 1) El patriotismo del pueblo limeño; 2) El saqueo de la Biblioteca Nacional; 3) La denostación de la población indígena; y 4) El nacionalismo de 12 Andrés Avelino Cáceres (contrariamente a lo expresado en sus artículos publicados en El Canal de Panamá).
Ricardo Palma Soriano, Miguel Grau Seminario y Lizardo Montero Flores
Aunque en el imaginario popular pocas veces se relaciona la figura de Ricardo Palma con la de Miguel Grau, quizá porque lo más saltante de sus vidas se da en campos diferentes: uno en la literatura, el otro en la marina profesional: la verdad es que entre ellos existen varios puntos en común que no pueden dejarse de advertir.
Hablando de edades, sólo hay una diferencia de casi año y medio de vida entre ambos. Don Ricardo Palma nació en Lima el 7 de febrero de 1833. Miguel Grau nació en San Miguel de Piura el 27 de julio de 1834. Sus tempranas infancias transcurrieron en sus respectivas ciudades natales. En su niñez, sin embargo, ambos disfrutaron más del afecto paterno que del materno.
Con el pasar de los años, más específicamente en 1854, según ha puntualizado Carlos Zúñiga Segura, encontramos a Palma y a Grau como jóvenes al servicio de la Marina de Guerra del Perú, uno como empleado civil del área administrativa y contable (Oficial 3° del Cuerpo Político de la Armada), el otro como un joven guardiamarina (esto es, se encontraba en proceso de formación necesaria antes de convertirse formalmente en Alférez de Fragata). En los dos casos, la Marina de Guerra se constituyó en la institución castrense que los acogió en su seno como parte de una gran familia.
Como miembros de la Armada, participaron ambos, al igual que Lizardo Montero Floresxx, en la revolución vivanquista contra Ramón Castilla, acaecida en el año 1856, que ya hemos mencionado:
“El 16, en aguas de Arica, el teniente 2° Lizardo Montero encabezó la sublevación de la fragata ‘Apurímac’, la más poderosa unidad de la escuadra; el Alférez de Fragata Miguel Grau fue el segundo cabecilla del motín. La ‘Apurímac’ se trasladó a Ilo y, de inmediato, a Islay, en cuya bahía el ‘Loa’ estaba al ancla…”“[En el Loa]…se plegaron al movimiento los Tenientes Segundos don Mariano Melgar y don Federico Lara, el Alférez de Fragata don Enrique Pareja, los Guardias Marinas don Ezequiel Otoya y don Gregorio Evia, el 2° piloto don José Rodríguez, el contador oficial 3° don Ricardo Palma y el cirujano de segunda clase don Elías Bellido.”
Aunque los acontecimientos que se suscitaron posteriormente, parecieron darles a los revolucionarios vivanquistas un eventual triunfo (Palma inclusive fue ascendido por Vivanco a la clase superior de Oficial 2° del Cuerpo Político de la Armada), la verdad es que el presidente Ramón Castilla tomó acciones rápidas para contrarrestar a los insurrectos y, al poco tiempo retomó el poder absoluto. Y la hora del escarmiento no se dejó esperar y se les dio de baja “borrándose sus nombres del escalafón”.
Aparte de las relaciones de trabajo o profesionales que Palma y Grau pudieron compartir como miembros de la Marina de Guerra del Perú, y eventualmente como parte del mismo bando revolucionario vivanquista, existió entre ellos una estrecha relación de fraternidad que cultivaron como hermanos masones. Ya hemos dicho que después de sus interminables viajes, don Manuel Ricardo Palma y don Miguel Grau Seminario, iban juntos a trabajar con su venerable Maestro en la Logia Cruz Austral en el Templo de la calle Teatro.
Se ha dudado del carácter masónico de Grau. Sin embargo, éste ha sido confirmado, gracias a que el Respetable Hermano Nicolás Roberto Ramírez Yánez, Venerable Maestro de la Logia Concordia Universal Nº 14 del Callao, encontró que, en una de las actas del libro de actas de 1858 a 1868 de su Logia, se hace de conocimiento que:
“…en la Tenida del 16 de noviembre de 1859, en la Logia Virtud y Unión Nº 3, habían sido propuestos dos candidatos, uno de ellos con el nombre de Miguel Grau y el otro como su compañero de armas y amigo entrañable, Lizardo Montero…”.
Además, el padre del Gran Almirante del Perú, el cartagenero don Juan Manuel Grau y Berrío (quien murió en Valparaíso en 1865), al parecer, fue también masón.
Su amistad con Grau, lleva a don Manuel Ricardo a versificar y crear, después del combate de Angamos, una “Hoja de laurel” para darle cuerpo a su tristeza:
MIGUEL GRAU
“Sol de resplandor fecundo
que nuestras pupilas hiere,
fue Miguel Grau;
nunca muere
el astro–rey para el mundo.
¿A qué de duelo profundo
llanto derramar sincero,
si ya, con buril de acero,
grabó ese nombre la Fama,
y el mundo la gloria aclama
del héroe y del caballero?
Vive la vida inmortal
que conquistó su heroísmo:
No se hundirá en el abismo
del olvido nombre tal.
Del tiempo el giro fatal
dará más irradiación
a tanta espléndida acción,
y del Héroe la memoria
honra será de la historia,
gala de la tradición.”
Pero su devoción al amigo, hermano y camarada de armas, va más allá de estos versos. Finiquitada la Guerra del Pacífico con el Tratado de Ancón de 1883, el nombre y la egregia figura del comandante del Huáscar, don Miguel Grau Seminario siguió creciendo con los años en el imaginario colectivo de los peruanos y, especialmente, en el de los piuranos que recordaban a su paisano como defensor de la dignidad nacional. Y Germán Leguía y Martínez, prefecto del Departamento de Piura (1905–1908), tomó noticia de la casa en donde la tradición oral de los viejos piuranos aseguraba había nacido el Héroe de Angamos, pues en ese inmueble había vivido permanentemente su propietaria doña Luisa Seminario del Castillo, madre de don Miguel Grau. Con ese propósito, dio los primeros pasos para crear conciencia de la importancia que guardaba dicho inmueble para la historia de Piura, sin embargo, ese afecto se debía concretar en una 14 manifestación visible a los ojos de todos: una placa de mármol consideró era lo ideal. Esta idea quiso compartirla con una persona de experiencia: don Ricardo Palma. Por ese motivo escribió al tradicionista, a quien conocía y admiraba desde años antes, cuando estudió en Lima la carrera de Jurisprudencia. En carta de respuesta que el tradicionista fechó el 20 de mayo de 1906, escribe:
“Con respecto a la consulta que usted, mi apreciado amigo, me formula, acerca de un homenaje a Miguel Grau, el más excelso de nuestros héroes nacionales, estoy plenamente de acuerdo con usted. Cualquier homenaje es poco para él. Si hubiera que aterrizar una idea, lo más aconsejable es que se haga un buen mármol conmemorativo. Así las generaciones del presente y del futuro, como en la Antigüedad clásica dieron ejemplo notable los romanos, podrán, quienes transiten por esa calle, saber el lugar exacto en el que nació el hijo más preclaro de esa tierra.”
Pensó don Germán Leguía y Martínez que el texto que se grabaría en la placa marmórea debía ser asimismo burilado por don Ricardo Palma a quien le escribió apelando a su espíritu patriótico. El padre de las Tradiciones peruanas, entonces Director de la Biblioteca Nacional, aceptó gustoso el encargo. La inscripción, muy sencilla, redactada por el tradicionista y, posteriormente, grabada sobre el albo mármol de Carrara, dice en letras negras de bajo relieve:
EL 27 DE JULgO DE 1834
NACIÓ EN ESTA CASA EL CONTRALMIRANTE
MIGUEL GRAU
QUIEN MURIÓ HEROICAMENTE
A BORDO DEL MONITOR
HUÁSCAR
EN EL COMBATE NAVAL DE ANGAMOS
EL 8 DE OCTUBRE DE 1879
SE COLOCÓ ESTE MARMOL CONMEMORATIVO
EL 28 DE JULIO DE 1906
Resonancia Literaria en el Extranjero
Ricardo Palma, ilustre tradicionalista y patriarca de las letras peruanas, fue uno de los literatos peruanos más reconocidos no solamente en el país sino también en el exterior, tanto en países de habla castellana, así como de otras lenguas.
Francia
Habiendo regresado Palma de Chile en 1862, vivió algunos meses en Lima para dirigirse luego a París en 1864, llevando consigo el manuscrito de su trabajo antológico. Allí entregó a la Editorial Rosa y Bouret los originales de la selección modificada que apareció en 1865 con el título de Lira Americana. Colección de poesías de los mejores poetas del Perú, Bolivia, y Chile, editorial que también publicó su poemario Armonías, Libro de un desterrado. La primera de las obras mencionadas había sido iniciada junto con Manuel Nicolás Corpancho, pero los azares del destino, determinarían que el proyecto conjunto no se realizara. Palma fue desterrado a Chile por Castilla. Y Corpancho fue nombrado por el mismo presidente cónsul general en México, para que ofreciera y diera la ayuda del Perú, ante la amenaza de la intervención europea; pero, una vez ocurrida ésta, fue 15 expulsado por la Junta de Regencia que debería entregar el mando al emperador Maximiliano g, y rumbo a Cuba, su nave se incendió y él murió. La parte del trabajo a cargo de Corpancho (México, Centroamérica, así como otros países, añadidos a posteriori, como Colombia, Cuba, Ecuador, Perú y Venezuela) había sido dejada, ya concluida, en manos de su amigo Vicente García Torres, quien sacó la edición póstuma de la antología con el título Flores del Nuevo Mundo, Tesoro del parnaso americano (México, 1863 ).
España
Fue miembro correspondiente de la Real Academia Española de la Lengua (1878) así como también de su filial peruana —que presidió desde su fundación en 1887 hasta su renuncia en 1918, cuando pasa a ser director honorario—, y de otras prestigiosas instituciones.
En 1892, acompañado de sus hijos Angélica y Ricardo, viaja a España, haciendo escalas en Guayaquil y otras ciudades, como uno de los delegados oficiales del Perú a los Congresos gX de Americanistas, Literario Hispanoamericano e Histórico-Geográfico celebrados con motivo del cuarto centenario del acontecimiento colombino. Visita varias ciudades españolas y reside algunos meses en Madrid, donde desarrolla intensa actividad social e intelectual. Es nombrado socio correspondiente de la Sociedad Geográfica de Madrid (octubre de 1892) y comendador ordinario de la Real Orden de gsabel la Católica (mayo de 1893). La Real Academia Española no le acepta acoger en el Diccionario algunos americanismos. En viaje de regreso, permanece algunos días en La Habana, donde estrecha amistad con importantes intelectuales cubanos.
En 1893 los editores Montaner y Simón publican en Barcelona, en cuatro volúmenes, una pulcra colección ilustrada de las ya ocho series de Tradiciones peruanas.
En 1917 favorece la reinstalación con talentos jóvenes de la Academia Peruana Correspondiente de la Real Academia Española de la Lengua.
Argentina
En el año 1912, Palma es nombrado miembro correspondiente de la Junta de Historia y Numismática Americana de Buenos Aires.
Estados Unidos
Palma en inglés
Algunas de las obras de nuestro autor han sido traducidas al inglés y publicadas en los Estados Unidos de Norteamérica. Así tenemos:
El Libro tercero de lectura de Carolina Marcial Dorado, editado por Gimm y Compañía en 1930, inserta las popularísimas tradiciones “El alacrán de fray Gómez” y “Los mosquitos de Santa Rosa”.
En la Antología de la literatura Hispanoamericana de Arturo Torres-Rioseco, publicada en 1939, también aparece la tradición “El alacrán de fray Gómez”.
No parece existir otra selección de tradiciones vertidas al inglés que la publicada en 1945 por la editorial Alfred A. Knopf de Nueva York, la cual contiene treinta y ocho escogidos ejemplos de la ingente cantera palmina traducidos por Harriet de Onís bajo el título común de The Knights of the Cape (Los Caballeros de la Capa).
16 Las Lecturas Hispánicas, de Carlos García-Prada y William E. Wilson, profesores de español en la Universidad de Washington, que salió a luz en 1947 bajo el sello de la editorial D. C. Heath and Co., de Boston, recogen tres temas de las tradiciones adaptándolos al fin educativo de la obra.
En 1948, en The Golden Land, una antología del folclor latinoamericano, Harriet de Onís incluyó fragmentos de don Ricardo al lado de otros de escritores no menos célebres.
En el libro de Mario B. Rodríguez, catedrático de la Universidad de Puerto Rico, en Mayagüez, titulado The Spirit of South América, texto de lectura publicado en 1957, aparece una versión simplificada de la tradición “Una aventura del virrey poeta”, a través de la cual el compilador ha intentado retratar la sociedad colonial en su aspecto más ligero.
Una selección de catorce tradiciones originales fue publicada en 1969, con introducción y notas en inglés, por Pamela Francis para la prestigiosa casa Pergamon Press, impresa en la Gran Bretaña y editada también en los Estados Unidos.
Estudios sobre su obra
En el país del Tío Sam, también se han realizado una serie de estudios sobre la obra de nuestro insigne tradicionista:
Literary History of South America del notable hispanista Alfred Coester, publicada en 1916 y muchas veces reimpresa.
Peruvians of today, publicada en 1919 por William Belmont Parker.
“Ricardo Palma, tradicionista”, escrito por George W. Humphrey y publicado en la revista Hispania en 1924.
La tesis Estudio de los refranes de Ricardo Palma en las Tradiciones peruanas, presentada por Deodata Jiménez en 1933 para obtener una maestría en artes por la Universidad de California Meridional.
El trabajo de Ruth Sievers Thomas sobre las fuentes empleadas por don Ricardo para escribir sus relatos, materia de su disertación doctoral en la Universidad de Washington en 1938.
La tesis doctoral de E. M. Hazelwood presentada en 1941 a la Universidad de California Meridional, en la que se ocupa de las actitudes religiosas retratadas en las Tradiciones peruanas.
La Gran literatura iberoamericana de Arturo Torres-Rioseco y Las corrientes literarias en la América hispánica de Pedro Henríquez Ureña, obras clásicas que vieron la luz originalmente en inglés, con el respaldo de la Universidad de Harvard, en 1943 y 1945, respectivamente.
Historia y antología del cuento y la novela en Hispanoamérica, The literature of Spanish America y Masterpieces of Spanish American Literature, de Ángel Flores, publicadas entre 1959 y 1974.
La tesis de Shirley L. Arora presentada en 1962 a la Universidad de California en Los Ángeles, sobre las comparaciones proverbiales en las tradiciones.
La disertación La Representación del Otro en el Siglo XIX: La Diversidad en Ricardo Palma, presentada en cumplimiento parcial de los requisitos para el grado de Doctor en Filosofía en Español, por Primavera Cuder, a la Florida International University, en el año 2018.
Reconocimientos
Diversas instituciones y personalidades del gran país del Norte han reconocido la figura y obra de don Ricardo:
En 1907 la Sociedad Hispánica de América, con sede en Nueva York, y la Asociación Americana de Profesores de Español, hicieron a don Ricardo socio honorario de sus instituciones.
Dos meses antes de su muerte, recibió un saludo colectivo del presidente de EE.UU. Woodrow Wilson, el cardenal Gibbons, arzobispo de Baltimore, el Premio Nobel de la Paz Elihu Root, y los intelectuales y científicos Archer Milton Huntington, William R. Shepherd, Leo Stanton Rowe y Alex Hrdlicka, entre otros notables admiradores de su celebrado talento.
Epílogo
Como describe el RH Carlos Valle Caballero, “el 6 de octubre se conmemora el Centenario del fallecimiento de Manuel Ricardo Palma Soriano y su nombre está exento de todo olvido porque su legendaria vida ha trascendido las fronteras de la patria haciéndolo universal; bustos y monumentos han inmortalizado su figura y a la par que Grau, no existe en el Perú un pueblo que no lo haya perennizado en una calle, avenida o parque. La Logia Ricardo Palma Nº 61, el Salón Principal del Templo del Jr. Washington y muchas instituciones como universidades, institutos, colegios, clínicas, museos, fundaciones, ferias del libro, centros de investigación, clubs, círculos sociales y culturales, etc., lo tienen de epónimo. En 1985 el Banco Central de Reserva puso en circulación un billete de 10 intis con un retrato de Palma, que 1988 se convirtió en uno de 500,000, el cual dejó de circular en 1991. El 21 de agosto del 2018 mediante Resolución Viceministerial Nº 131-2018-VMPCgC-MC se declara Patrimonio Cultural de la Nación el material documental “Manuscritos de Ricardo Palma 1877-1904” y en noviembre del 2018 fueron incorporados al importante Registro de Memoria del Mundo de América Latina y el Caribe (MOWLAC) de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO)”.
Sin embargo, consideramos que el mayor homenaje que se le puede brindar a nuestro querido y respetable Don Manuel Ricardo Palma Soriano, es difundir con mayor fuerza su multifacética vida y su riquísima obra a nuestros estudiantes desde los primeros grados de primaria, hasta los últimos años de la educación superior, para perennizarlas en las futuras generaciones. Además, las autoridades gubernamentales deberían organizar concursos literarios y de investigación, producir una serie televisiva basada en sus Tradiciones peruanas, usar los medios de comunicación masivo para difundirlo, e implementar otras formas de dar a conocer, aún más, su egregia figura y obra, que dejamos a su imaginación y creatividad.
Bibliografía
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16. “Vida Masónica de Don Ricardo Palma Soriano”, Carlos Valle Caballero, Revista de la Respetable Logia Simbólica Concordia Universal N°14, El Callao, 2012. 19
Francisco de Paula González-Vigil Yáñez o simplemente, Vigil (Tacna, 13 de setiembre de 1792-Lima, 9 de junio de 1875), fue un clérigo liberal y librepensador que escribió obras muy extensas defendiendo la separación de la Iglesia del Estado. Llegó a sufrir la excomunión papal en tres ocasiones sin retractarse jamás de sus ideas, y en vida del autor seis de sus libros fueron incluidos por la Santa Sede en el Índice de Libros Prohibidos.
ii Podría tratarse de Francisco Javier Mariátegui y Tellería (Lima, 22 de noviembre de 1793-ib., 23 de diciembre de 1884) fue abogado, magistrado, político, escritor, diplomático, periodista e ideólogo liberal y masón peruano.
iii José Gregorio Paz Soldán y Ureta (Arequipa, Perú, 9 de mayo de 1808 – Lima, 18 de diciembre de 1875) fue un abogado, jurista, diplomático, periodista y político peruano. Fue Ministro de Relaciones Exteriores o Canciller del Perú por tres períodos: 1845-1848, 1853-1854 y 1862-1863, presidiendo el gabinete ministerial en el último período. Al frente de la Cancillería organizó a partir de 1846 los servicios diplomático y consular de la República, lo que convirtió al Perú en el primer país de América en realizar tal labor. Asimismo, orientó la política internacional del Perú hacia un franco y noble ideal americanista; en tal sentido convocó en Lima el primer Congreso Americano de 1847 y presidió el segundo de 1864, como respuesta a las amenazas de intromisión de las potencias europeas. Como magistrado, fue fiscal de la Corte Suprema de Justicia del Perú. Fue además rector de la Universidad de San Marcos, donde hizo una total reorganización y renovación de los estudios (1861-1863).
iv Mariano Felipe Paz Soldán y Ureta (Arequipa, 22 de agosto de 1821 - Lima, 31 de diciembre de 1886) fue un historiador y geógrafo peruano. Se le considera el fundador de la moderna historiografía peruana, siendo su aporte más valioso su monumental Historia del Perú independiente, que fue por mucho tiempo el único estudio documentado de las primeras décadas de la República peruana. Es también autor de un Atlas geográfico del Perú, el primero de su género (1865), y de la Narración histórica de la guerra de Chile contra Perú y Bolivia, la primera historia peruana de la guerra del Pacífico (1883). Como hombre de Estado fue ministro de Relaciones Exteriores (1857) y ministro de Justicia e gnstrucción (1869-1870 y 1878-1879).
v Santiago Távara Andrade (Piura, 22 de febrero de 1790-1874) bachiller en medicina, político, escritor y comerciante peruano. Fue presidente de la Convención Nacional o Congreso Constituyente de 1833.
vi Pedro ggnacio Noboa Benavides, fue un hombre público, financista y literato peruano, diputado al congreso por muchos años, codificador, ministro de estado y diplomático. Nació en Arequipa en 1813. Muy joven fue enviado por sus padres a Europa donde permaneció nueve años; estuvo en el colegio de Francia, donde fue discípulo de Sav y de Rossi. Curso literatura y Derecho bajo la dirección de Silvela, Sicilia y Pinheriro Ferreira. Ha escrito mucho en los periódicos y numerosos opúsculos particularmente sobre economía política, ciencia de su predilección, muchas poesías suyas han sido recibidas con favor por el público. Noboa nació en Arequipa en 1811 y murió en Valparaíso en 1875. Sus producciones están publicadas en “El pabellón Nacional”, “La Revista de Lima” y El correo del Perú.
vii Manuel Nicolás Corpancho Alarcón (Lima, 05/12/1830-Mar Caribe, 13/09/1863), médico, cultivó varios tipos de poesía e integró la llamada “bohemia” literaria, grupo del que formaban parte Ricardo Palma (a los 15 años), Carlos Augusto Salaverry, José Arnaldo Márquez, Clemente Althaus, Luis Benjamín Cisneros, Juan de Arona, entre otros. Palma y algunos de los allegados al grupo, serían luego férreos opositores de Castilla y complotarían contra él. Contrariamente, Corpancho, quien también era masón (se había iniciado en 1856 con una alocución titulada Libertad y Religión, canto en treinta y cuatro octavas, en el cual trata de hacer compatibles el cristianismo, la Masonería y el liberalismo democrático), era seguidor del Mariscal y fue nombrado por su gobierno, cónsul general en México (21/11/1861), para que ofreciera y llevara la ayuda del Perú, ante la amenaza de la intervención europea. Efectuada ésta, la Junta de Regencia que debería entregar el mando al emperador Maximiliano g, le obligó a salir del país, por su activa defensa de la independencia mexicana. Viajó a La Habana, con la intención de unirse al gobierno de Benito Juárez en el exilio, pero su nave se incendió y él murió. gba a cumplir 32 años de edad.
viii José Casimiro Ulloa Bucelo (Lima, 4 de marzo de 1829 - Arequipa, 5 de agosto de 1891), fue un médico, docente, escritor, periodista y político peruano. Es una de las figuras más importantes de la medicina peruana, siendo el primero en su país en ocuparse de la atención profesional a los pacientes psiquiátricos. Fue también uno de los fundadores de la Cruz Roja Peruana y el organizador de la sanidad militar, de la 20 cual ha sido nombrado patrono. En su memoria, un hospital de emergencias de Lima lleva su nombre. Su obra en la prensa, por cierto, no se agota en las publicaciones médicas, ya había fundado antes, junto con Palma La Revista de Lima y en el ámbito de la Universidad de San Marcos, le corresponde la creación de los Anales Universitarios.
ix Manuel Bilbao Barquín (Santiago de Chile, marzo de 1827–Buenos Aires, 14 de agosto de 1895) fue un abogado, escritor e intelectual chileno. Es considerado uno de los fundadores de la novela histórica chilena con sus libros El inquisidor mayor (1852), Los dos hermanos (1853) y El pirata del Guayas (1855), estando caracterizada su literatura por una función política y moral que, como tal, podía influir en la vida y el desarrollo de las sociedades sudamericanas. Fue redactor de diversos medios y fundó periódicos en Lima y Buenos Aires, ciudades en las que residió largos años de su vida, tras ser exiliado e invitado a dejar suelo chileno en más de una ocasión, ya sea por salir en defensa de su hermano Francisco Bilbao o por no apoyar ciegamente la demanda chilena en los conflictos limítrofes con Argentina.
x Manuel Ascencio Segura y Cordero (Lima, 23 de junio de 1805 - Lima, 18 de octubre de 1871) fue un escritor y dramaturgo peruano, representante importante del costumbrismo en los inicios de la literatura republicana. Es considerado como el creador del teatro nacional peruano, junto con Felipe Pardo y Aliaga (1806-1868), con quien a menudo polemizó. Destacó con sus comedias y sainetes costumbristas, que enriqueció con voces y giros populares. Mientras Felipe Pardo era un hombre de ideas aristocráticas y defensor de la colonia española, Segura representó los valores democráticos de la nueva sociedad peruana, lo que se refleja en el sabor criollo de sus comedias. Mestizo de clase media pobre, tenía una gran afinidad con lo popular y los nuevos grupos sociales que emergían en un país recientemente emancipado. En su honor, el Teatro Principal de Lima fue rebautizado con su nombre en 1929 (Teatro Segura).
xi José Arnaldo Márquez, (Lima, Perú, 12 de enero de 1832 – Lima, 5 de diciembre de 1903) fue un poeta, dramaturgo, ensayista, maestro, periodista, traductor, diplomático, militar y viajero peruano. También se le recuerda como inventor de una máquina para componer matrices tipográficas, precursora de la linotipia. Representante de la poesía romántica peruana en su vertiente filosófica y social, junto con Luis Benjamín Cisneros. Supo armonizar el sentimiento individualista romántico con las inquietudes humanitarias de su tiempo y una adhesión a los ideales socialistas, siendo el primer poeta peruano con preocupación social. Tratado injusta y despectivamente por el crítico peruano José de la Riva-Agüero y Osma, su vida y obra fue olvidada y actualmente su nombre solo se evoca en ciertas calles y avenidas de algunos distritos de Lima, como el de Jesús María.
xii Carlos Augusto Salaverry Ramírez (distrito de Lancones, Piura, 4 de diciembre de 1830-París, 9 de abril de 1891) fue un poeta y dramaturgo peruano, considerado, en el panorama de la literatura de su país, como el más destacado exponente del romanticismo, junto con Ricardo Palma. Es muy celebrado por sus composiciones de carácter íntimo y amatorio, entre las que resalta el poema titulado “¡Acuérdate de mí!”.
xiii La ciudad de Arequipa es la cuna de este poeta, que nació en 1830, siendo su padre el veterano de la gndependencia don José Cruz Fernández. Desde muy niño se consagro a la carrera de las armas, embarcándose a la edad de los 12 años en un navío de la armada peruana. Sirvió en ella hasta el año 1844, en que, a consecuencias de los sucesos ocurridos en Arica y la ruptura con gnglaterra, paso al ejército de tierra en calidad de Subteniente. En 1854 y después de la batalla de la Palma en que termino la administración del general Echenique, se retiró después de haber alcanzado el grado de Capitán. gncorporado en la planta de empleados del Ministro de Relaciones Exteriores, se le mando a organizar su expediente de cesantía, a consecuencia de la publicación de ciertos artículos contra la administración del general Castilla. Nuestro poeta vino a hacer, por la primera vez, estudios serios en 1851 bajo la dirección del literato español don Fernando Velarde. Sus producciones no pasaban hasta en época de ligeras coplas, escritas en los momentos de ocio del cuartel, para complacer a sus compañeros de armas. A partir de 1852, Fernández ha colaborado en “'La glustración", "La Revista", “'El gris", “'Eg Cosmos", "La Revista Lima". “Eg Progreso Católico" y otras varias publicaciones. Acompañado con D. Juan Sánchez Silva fundó los periódicos “gndependiente"; con el Sr. D. P. Pereira Gamba “Eg Perú"; con el Dr. Químper “El Tiempo”; con Don Nicolás de Piérola "El Argos"; y con el Sr. Larriva "La Maroma". En 1867 publicó un volumen de poesías con el título de "Violetas Silvestres". Luego pasó a desempeñar el cargo de Secretario de la Prefectura del Callao. Trinidad Fernández murió en el Callao el año de 1873, víctima de la tisis.
xiv El Dr. Juan de los Heros Castañeda, magistrado, catedrático y diputado, ingresó a sus 60 años como 3er Jefe del 2º Regimiento de Artillería de la Reserva, con el grado de Sargento Mayor. Contaba con experiencia 21 militar, pues en 1855 participó en la batalla de La Palma, a las órdenes del General Ramón Castilla. Para 1881, hacía poco más de un año que había perdido a su hijo Carlos, Teniente Segundo de la Marina, caído en el combate de Antofagasta, el 28 de Agosto de 1879.
xv Juan Vicente Camacho Clemente, nace en Caracas el 8.7.1829 y muere en París el 4.8.1872. Diplomático y poeta venezolano. Fueron sus padres Gabriel Camacho y de Valentina Clemente Bolívar; además era sobrino-nieto de Simón Bolívar y hermano de Simón Camacho. Recibió su educación en el colegio gndependencia de Caracas y comenzó estudios superiores en la Universidad Central de Venezuela, los cuales tuvo que interrumpir por los sucesos políticos del 24 de enero de 1848, relacionados con el asalto al Congreso Nacional. En consecuencia, durante este tiempo se dedicó entonces a ejercer actividades comerciales en La Guaira y en el valle del río Choroní. En 1853, viajó al Perú como secretario de la Legación de Venezuela. En la capital peruana fundó junto con Hilarión Nadal, el periódico El Heraldo. En 1857 fue ascendido a cónsul de Venezuela en Lima. Además de esto, trabajó en 1860 como intérprete en la Cancillería peruana y en 1863, fue nombrado secretario de las conferencias celebradas entre el gobierno peruano y el ministro plenipotenciario de Estados Unidos para reanudar las relaciones diplomáticas entre ambos países. Tras el bombardeo de El Callao (2.5.1866) por parte de la armada española, Camacho fue nombrado agente secreto del Perú ante el gobierno venezolano para tratar problemas relacionados con la guerra contra España, celebrando en esa oportunidad varias entrevistas con el presidente Juan Crisóstomo Falcón. Regresó al Perú en 1867, viajando luego a Europa como comisionado del gobierno peruano en negociaciones de índole comercial. En 1871, fue nombrado miembro correspondiente extranjero de la Real Academia Española de la Lengua. En sus escritos usó los seudónimos de «Terepaima» y «Alí Bey». En 1972 fue publicada en París una recopilación de sus poesías.
xvi José Benedicto Laso de la Vega y González-Quijano, más conocido como Benito Laso (Arequipa, 20 de mayo de 1783 - Lima, 13 de enero de 1862), fue un magistrado, periodista, poeta y político peruano. Fundador de la gndependencia del Perú y representante del liberalismo autoritario. Profesó una rendida admiración hacia el Libertador Bolívar. Fue diputado constituyente (1833-1834); ministro de Gobierno y Relaciones Exteriores (1838 y 1839); ministro de gnstrucción y Negocios Eclesiásticos (1842-1843); vocal de la Corte Suprema de Justicia (1839-1860) y presidente de la misma en 1850 y 1854. Sus ideas liberales se traslucen en todas sus actividades públicas y en polémicas que sostuvo con el clérigo conservador Bartolomé Herrera. Criticó a la gglesia y al Ejército, pero a la vez colaboró con caudillos autoritarios y conservadores, como el general Agustín Gamarra. Ya en sus años de ancianidad, radicalizó su liberalismo. Rígido y tenaz en defender sus principios, se autodenominó el «Robespierre peruano».
xvii José Gabriel Gálvez Egúsquiza (Cajamarca, 17 de marzo de 1819 - Callao, 2 de mayo de 1866) fue un abogado, catedrático y político liberal peruano. Gran orador, desde la tribuna parlamentaria abogó por reformas de cuño liberal, como la abolición de la esclavitud y del tributo indígena. Presidió en dos ocasiones la Convención Nacional de 1855-1857, congreso constituyente que dio la Constitución Liberal de 1856. Durante el gobierno presidencial de Mariano ggnacio Prado fue secretario (ministro) de Guerra y Marina (1865). Fue uno de los héroes del combate del Dos de Mayo del Callao, donde falleció combatiendo a la escuadra española, convirtiéndose así en símbolo de la independencia de América.
xviii Francisco Bilbao Barquín (Santiago de Chile, 9 de enero de 1823-Buenos Aires, 19 de febrero de 1865) fue un escritor, filósofo y político chileno de ascendencia vasca. Fue durante uno de sus exilios, Venerable Maestro de la Logia "Unión La Plata" de Buenos Aires, entre los años 1860 y 1863. Políticamente fue un revolucionario liberal y un gran impulsor del laicismo en su país. Su libro "Sociabilidad Chilena" de corte anticlerical, por la defensa de la laicidad del estado chileno, la ganó el odio de la conservadora iglesia católica mapochina y por esa razón tuvo que salir de su país. Vivió también exiliado en el Perú y apoyó como combatiente el levantamiento del General Ramón Castilla.
xix El sanfedismo (de Santa Fede, ““Santa Fe”“ en italiano) fue un movimiento popular anti-jacobino, organizado por el cardenal Fabrizio Ruffo, que movilizó un ejército en el Reino de Nápoles contra la República Partenopea pro francesa en 1799 (república semiautónoma apoyada por la Primera República Francesa, surgida durante las Guerras Revolucionarias Francesas, con participación de masones). Este ejército estaba compuesto no sólo por plebeyos liderados por caballeros, curas y frailes, quienes, al ver a un purpurado al mando, decidieron participar en esa guerra desordenada y caótica, sino también por soldados fugitivos o desmovilizados, malhechores y criminales escapados de la prisión aprovechando los disturbios. Sus objetivos culminaron, después de terribles masacres, crímenes y devastaciones, en la restauración de la Monarquía bajo Fernando g de las Dos Sicilias. Los sanfedistas no tenían piedad de los supervivientes, matando a mujeres, niños y ancianos e incluso profanando un convento de vírgenes. Tras 22 la toma de Nápoles, también en Roma hubo devastaciones, asesinatos y robos. Hubo actos de grave violencia hacia la población en varios lugares de gtalia. La comunidad hebrea fue sistemáticamente despojada de sus bienes; muchos judíos fueron asesinados, otros heridos, mientras que los supervivientes huyeron. Su nombre completo era el Ejército de la Santa Fe en nuestro Señor Jesucristo (italiano: Armata della Santa Fede in nostro Signore Gesù Cristo), y sus miembros se llamaban Sanfedisti. Los términos ““Sanfedismo”“ y ““Sanfedisti”“ a veces se usan de manera más general para referirse a cualquier ejército campesino improvisado y motivado religiosamente que surgió en la península italiana para resistir a las recién creadas repúblicas cliente francesas. En sí, el término “sanfedista” fue creado por los jacobinos para referirse a sus opositores, pero acabó por arraigar y ser el término más empleado por la historiografía, prevaleciendo sobre “contrarrevolucionarios”. Estos, por su parte, se hacían llamar a sí mismos “legitimistas” o “leales”.
xx Juan Lizardo Montero Flores, (Ayabaca, Piura, 27 de mayo de 1832 - Lima, 5 de febrero de 1905) fue un militar y político peruano que ocupó la Presidencia provisoria del Perú de 1881 a 1883, reemplazando al presidente Francisco García Calderón Landa, durante la ocupación chilena, cona la complacencia del general Patricio Lynch. Fue también Alcalde de Lima durante un breve período, en 1879. Amigo y compañero de armas de Miguel Grau Seminario, Manuel Ferreyros y Aurelio García y García, todos ellos fueron conocidos como los Cuatro Ases de la Marina de Guerra del Perú. Secundó la revolución del coronel Mariano ggnacio Prado, quien lo nombró comandante general de la Escuadra, interviniendo en el combate del Callao de 1866. Luego desempeñó actividades políticas como senador por Piura, y fue uno de los fundadores del Partido Civil. Durante el gobierno de Manuel Pardo fue ascendido a la alta clase de Contralmirante. Al estallar la guerra del Pacífico fue designado Jefe militar de los departamentos del Sur con sede en Tacna. Tras la derrota del ejército aliado peruano-boliviano en la batalla del Alto de la Alianza en 1880, pasó a Lima para intervenir en la defensa de la ciudad, luchando en las batallas de San Juan y Miraflores, en 1881. Con el cargo de Jefe militar de los departamentos del Norte se trasladó a Huaraz y, ostentando el cargo de vicepresidente de la República, se hizo cargo del Poder Ejecutivo cuando el presidente Francisco García Calderón Landa fue apresado y confinado a Chile. Estableció la sede del Congreso en Arequipa