Acceso
La segregación escolar vulnera el derecho a la educación, reduce la calidad y eficacia de los sistemas educativos y su supresión forma parte de los ODS 4 y 10 de la Agenda 2030 (metas 4.5., 10.2 y 10.3). La COVID-19 ha agravado las consecuencias de la segregación escolar, como destaca el informe Alianza por la educación inclusiva y contra la segregación escolar elaborado por Save the Children en 2020. El modelo educativo inclusivo requiere una reforma sistémica, y por ello afecta al programa Bi+ a todos los niveles (UNESCO, 2005), que puede agruparse de este modo (Save the Children, Mézclate conmigo, 2018):
Medidas de oferta
Contenidos. Una finalidad principal del Bi+ es ofrecer desde la enseñanza pública una educación de calidad y una formación preuniversitaria, disponible para todo el alumnado de los centros que la integran. Es decir, aproximar la excelencia a nuestros alumnos, para que no requieran buscarla fuera, instalar la calidad educativa en nuestros contextos reales. Se sigue en esto el concepto de Centro Magnet, es decir, atraer una nueva demanda sin menoscabar la equidad ni generar una estigmatización (Les escoles magnet: Una aposta per l’excel·lència i l’equitat, 2013).
Medidas de demanda
Presencia. Afecta a la admisión, una barrera esencial para la plena inclusión. Para seleccionar estudiantes que formarán parte del Bi+ se contemplan tres grupos de méritos: académicos (media de las calificaciones obtenidas en 4º de la ESO), extraescolares (premios recibidos, titulaciones de idioma, actividades deportivas, voluntariado, etc.) y objetivables (dos pruebas voluntarias: un test de razonamiento tipo TOLT y una redacción de texto expositivo-argumentativo sobre cualquier tema). Adicionalmente, para garantizar este derecho a la admisión se requiere una política de difusión y de información proactiva que permita el acceso a la misma por parte de todas las familias.
Participación. Para la realización de proyectos de investigación se fomenta trabajar de manera colaborativa en pequeño grupo, formado por 2-3 estudiantes, y liderados por al menos 2 adultos (un profesor y un profesional de entidad colaboradora). La constitución de los grupos se basa en la conjunción de intereses y no en las afinidades personales previas.
Medidas de recursos
Estructura organizativa. La implantación de programas de investigación en bachillerato se basa en estas medidas: atender las necesidades de las familias, establecer mecanismos para obtener la opinión de los estudiantes sobre su proceso de aprendizaje, aumentar la oferta educativa disponible (para garantizar de este modo que se atiende a todos los perfiles de estudiante).
Recursos. A través de estas otras medidas: obtener recursos extra para los centros, financiar las actividades complementarias ofrecidas al alumnado (alojamiento y manutención cuando impliquen pernoctación), que además constituyen posibilidades de socialización, garantizar un servicio de transporte para la asistencia de los estudiantes a estas actividades fuera de la jornada escolar.