Formar arquitectos con inteligencia creativa mediante la adquisición de competencias cognitivas, procedimentales y actitudinales; con base científica, tecnológica y estética que les permitan discernir críticamente y generar alternativas de solución a los problemas socio espaciales que atañen a la arquitectura, el urbanismo, el diseño arquitectónico y la construcción; fundamentados en procedimientos de investigación científica con el fin de posibilitar modos de actuación profesional eficientes y comprometidos con la sociedad.