Son unos vasos caracterizados por una baja presión, por lo que su número supera al de las arterias y su diametro luminal es mayor, de modo que albergan alrededor del 70% del volumen sanguíneo total.
La sangre de los lechos capilares pasa a las venulas, desde las que se conduce hacia venas de calibre cada vez mayor hasta desembocar en las aurículas del corazón.
Su estructura es poco firme, aunque se refuerza con fibras elasticas y de colageno derivadas de la túnica íntima.
Se comprimen con la superficie luminal de la pared del vaso a medida que la sangre fluye hacia el corazón.
. Las venas y las arterias suelen encontrarse próximas, si bien las paredes de las venas aparecen aplanadas debido a su menor espesor, elasticidad y contenido en tejido muscular.
Las venas se distribuyen en tres grupos: venulas, venas medianas y pequeñas, y venas grandes.