Concurso de Cuentos 13-14

Cuentos participantes en el Concurso

2013-14

Se llamaba Paula, parecía una chica normal, una chica cualquiera, pero nadie sabía lo que ella pensaba, lo increíble que era su forma de ver la vida, de expresarla, de entenderla. Nunca nadie se había parado a conocerla. Ella creía y pensaba que las personas la veían como alguien normal, pero ella sabía que no lo era. Su pasado y presente había sido algo… duro, pero aun así ella no dejaba de estar feliz, porque sabía que la felicidad y creer en todo, era la clave de una vida feliz. Y bueno… en eso del amor no iba nada bien, puesto que los antiguos chicos con los que había estado, no la llegaron a valorar suficientemente, ellos pensaban que era muy rara y una chica muy complicada de entender, pero bueno… ella ya no pensaba mucho en eso, ahora solo leía libros, salía con sus amigas, escuchaba música sin parar, y lo hacía para despejar su mente del amor y de su duro pasado. Estaba en su cuarto, navegando por Internet, como solía hacer cuando no le quedaban libros para leer y bueno, la verdad es que en la calle soplaba el viento bastante fuerte, entonces no quería salir. Mientras, navegaba por Internet y leía mensajes de un par de grupos que tenía en su móvil.

Saltó un mensaje que decía “hola, me llamo Hugo, soy de un grupo de Internet…. ¿Me podrías decir tu nombre y tu edad?, para guardarte en mis contactos”. Paula reaccionó un poco…. rara, puesto que no siempre le enviaban un mensaje de este modo. Entonces contestó: “hola, mi nombre es Paula, y tengo 13 años “. Este chico llamado Hugo, contestó “encantado, yo tengo 15 años y como ya te he dicho mi nombre es Hugo”. Entonces a Paula ese chico le pareció buena persona, estaba interesada en hacer nuevos amigos y conocer nuevas personas, decidió comenzar la conversación: “y… ¿Qué tipo de música escuchas?” Paula estaba algo nerviosa, no sabía si le parecería un poco pesada… tal vez él no quería seguir hablando con ella, pero Paula soltó un suspiro cuando vio: “pues… me gusta el rap rock, aunque a veces escucho algo de pop… y tú ¿Qué tipo de música te gusta y escuchas?” contestó Hugo amablemente. Paula, al ver con la simpatía con la cual le escribió, contestó: “pues la verdad es que no hay mucha diferencia, suelo escuchar pop y rap pero algunas veces rock”.

A Hugo le parecía algo extraño que una chica escuchara rap y rock….. Pero le interesaría saber más de ella puesto que continuò: “me parece raro y a la vez genial el tipo de música que escuchas… y bueno, ¿de dónde eres?” Paula se sintió agusto hablando con aquel chico que apareció de la nada . Entonces le escribió: “pues soy de España, Cádiz ¿y tú de dónde eres?”. Hugo algo extrañado e intrigado por saber algo más de Paula le dijo: “estamos algo lejos… , yo soy de un pueblo cerca de Sevilla”.

Hugo se sentía muy cómodo hablando y conociendo a esta chica llamada Paula, que vivía a cientos de kilómetros de él y le escribía con esta simpatía. Al cabo de cuatro meses, se conocían bastante bien, y la verdad es que eran como uña y carne. Paula no dejaba de pensar en este chico, del cual sabìa su pasado y presente.

Desde hacía, como dos meses, sentía algo muy especial por él, esperaba impaciente, un mensaje suyo, miraba su última conexión cada cinco minutos, y cada vez que recibía un mensaje, le latía el corazón más rápido de lo normal.

Un día viò un mensaje de Hugo que le decía: “hola Paula, no sé cómo decirte esto…… como sabes eres muy especial para mí y desde que te conocí he sido más feliz de lo normal, y la verdad, creo que estoy enamorado de ti, lo veras una locura, puesto que no nos conocemos en persona, pero eres tan increíble, me haces sentir cosas tan grandes, sin siquiera rozarme, que nunca había sentido esto….creo que me estoy enamorando de ti”.

Paula se quedó muy sorprendida, ella nunca había sentido esta sensación, sentía que este chico sí la quería y la trataba como se merecía. Entonces contestó: “menos mal que te has lanzado tú, yo no sabía cómo explicarte lo que siento, gracias por hacer todo lo que haces sin rozarme, yo también me estoy enamorando de ti”.

Cuando Hugo vio el mensaje, sintió la necesidad de abrazarla y de decirle lo mucho que la empezaba a amar.

Después de dos meses, se conocieron en persona, pasaron una tarde increíble juntos, no pararon de decirse lo mucho que se necesitaban para ser felices, no escatimaron en regalarse abrazos y risas.

Dos semanas después, Paula, recibió un mensaje de Hugo que decía así: “Paula,…. Mi padre ayer me comentó que me iré a vivir a Francia con toda mi familia…”. Paula sorprendida, con un par de lágrimas asomando a sus ojos, le contesto: “¡PERO QUÉ!, ¡¿Por qué?!......”

Hugo sabía que Paula no reaccionaría debidamente y, conectándose, le comentó: “Paula, la cuestión es que mi padre encontró un trabajo, en el que le pagan mejor que aquí… Aquí le pagan bien, pero en Francia se vive mejor económicamente…”. Al leer esto, Paula notó cómo se le formaba un duro y gigante nudo en la garganta, a lo que contestó: “pero…, Hugo, ¿y nosotros?, tú me amas, ¿verdad?” Hugo notó cómo dos lágrimas rozaban la comisura de su labio superior, también notó un gran golpe en su alma, se lamió los labios, se secó las lágrimas y contesto: “sí, claro que sí, te amo de tal manera, que sería imposible intentar decírtelo, solo te lo puedo demostrar, Paula, créeme, cuando digo que quiero que seas mi esposa y madre de mis hijos, solo TÚ, y nadie más que TÚ”. Paula sintió una mezcla de sentimientos imposibles de describir, el nudo en la garganta creció, las lágrimas de sus ojos se hicieron más abundantes en sus mejillas y con una sonrisa en sus labios contesto: “¿y los kilómetros?, ¿y la distancia?” Hugo, sintiendo desaparecer el enorme nudo en su garganta, le dice: “nada Paula, nunca podremos conocernos, hazte a la idea de una vida juntos, puesto que así será.” Paula, más segura y poco a poco tranquilizándose le responde de nuevo: “¿siempre juntos?”. Hugo, más seguro, y entusiasmado, en un futuro junto a Paula, le contesta de nuevo: “siempre Paula, quiero demostrar a todos, que algo sí puede durar para siempre, quiero que demostremos a todos que dos personas sí se pueden amar eternamente”. Paula sonrió a la pantalla de su móvil como una idiota y le contestó: “siéntete especial, eres la única persona que ha logrado que le sonría a una pantalla de un móvil como una idiota”.

Trascurridos diez años, Hugo no podía soportar más la distancia, pidió matrimonio a Paula en Paris, ciudad de la luz y del amor, frente a la majestuosa y hermosa torre Eiffel.

Hugo y Paula, alcanzaron todas sus metas en la vida, se convirtieron en matrimonio, tuvieron unos preciosos bebés, y cada uno de ellos decidió su profesión. Estaban felices, estaban orgullosos de haber creído el uno en el otro desde el primer momento y siempre lo estarán, ya que alcanzaran el fin de sus vidas juntos y felices.

Erase una vez un granjero que ayudaba a la gente pobre, dándoles parte de sus tierras para que las cultivaran y tuvieran qué comer . Todo el mundo lo quería por ser tan buena persona.

El granjero tenía dos hijos, el mayor siempre estaba pendiente de la granja y ayudaba mucho a su padre. En cambio, el menor no le importaba lo que le sucediera a la granja y a su padre. Pero el destino le tenía preparado una sorpresa que le haría cambiar su forma de comportarse y de pensar...

Un día, su padre cayó enfermo y mandó reunir a sus dos hijos para decirles que había un tesoro escondido en sus tierras. El mayor ya sabía lo que era, pero el menor, que era muy avaricioso, pensó que se trataban de joyas, dinero, etc.

Entre los dos empezaron a remover tierras de cultivo y no encontraron nada.

Ambos fueron a ver a su padre y el hijo menor dijo: -¿Papá, no dijiste que había un tesoro oculto? Y el padre le contestó:- Sí, hijo. El tesoro son mis tierras, que son para vosotros...¿aún no te has dado cuenta?

El hijo menor se sintió decepcionado con la respuesta de su padre y se enfadó.

Al cabo de unos meses, el padre se puso cada más enfermo y como el hospital quedaba lejos del pueblo, decidió quedarse en casa al cuidado de sus hijos.

El hijo menor fue cada vez preocupándose más por la salud de sus padre.

Llegó el día de la muerte del padre y el hijo menor se sintió muy triste, recapacitando sobre su comportamiento pasado y nunca más volvió a ser egoísta.

Y entre los dos hermanos continuaron con la labor de su padre ayudando a la gente que lo necesitaba.

FIN

Había una vez un diablo bueno que vivía con una familia mala aunque un día le dieron de comer. Cuando pasó dos semanas le echaron de casa.

Él buscaba a alguien para que lo cuidara. Al día siguiente encontró a alguien que quiso cuidarlo, era un diablo grande, bueno y que le llevaba a todos los sitios. Le daba de comer todos los días, hasta que una tarde, lo abandonó.

Le dijo: ¿Por qué no quieres estar conmigo?

-Porque me rompes cosas.

El diablo bueno se fue a una fiesta muy lejos, bailó, bailó y cuando acabó la fiesta se fue a una casa desconocida, entró en una casa, cerró la puerta, subió las escaleras y al ver una calavera que se movía, se asustó. Durmió un poco y al día siguiente, se fue con la otra familia, la que era mala y caminó hasta que llegó a la casa. El padre le abrió la puerta y le dijo; Entra, pero si rompes cosas te echaremos para siempre.

-Está bien, procuraré tener mucho cuidado.

Y vivieron felices y comieron perdices.

Erase una vez una reina muy malvada, esa reina tenía mucho pero mucho dinero. Un día esa reina se fue a pasear. Veía a personas tiradas por el suelo sin ropa ni nada, esa reina se burlaba de esas personas, las personas le decían:

-Por favor, dame algo de ropa.

-No te doy nada-le contestó.

Un día esa reina se quedó embarazada de un rey muy malvado. Se fueron a vivir juntos. Ese día volvió a ir a dar un paseo, volvieron a ver a las personas y no le hacían caso. Pero un día la reina tuvo a la niña. La niña se hizo mayor. Un día la madre se sintió como las personas pobres, llegó un hombre y le dijo:

-Ven, yo te cuidaré.

-La reina le contestó -No, yo he tratado y injustamente a personas iguales.

Después llegó otro hombre y le dijo:

-Ven, yo te daré un hogar porque te quiero y quiero que seas feliz.

-Si me voy, es por el bien de mi hija-Le contestó

Se fueron para la casa se casaron y la niña lo consideró como su padre se convirtieron en unos reyes justos y generosos.

Fueron felices y comieron perdices.

Erase una casa donde vivían una familia de 4 personas.

Pasó mucho tiempo y murieron todos. La iban a vender pero entraron y había zombie y muertos vivientes y arañas.

Al chico le daba miedo pero a la chica no. El padre era muy valiente porque superó todas las pruebas de la casa que eran muy difíciles, hasta volando intentó llevarse a su mujer para irse con ella. Pero le salió mal y lo tiraron por la ventana y no supo qué hacer.

Al final una mujer le ayudó a subir porque las ventanas estaban cerradas y lo consiguió porque se subió en su coche y escaparon.

Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

Había un niño nuevo que se apuntó a ese colegio que se llamaba San José de Palmete y se llevó un tren .

Su abuela le dijo que no , que se llevara a su mascota, que era un pájaro .

Al final , se llevó el pájaro y se lo puso en el brazo en vez de llevarlo en su jaula . Como lo qu llevaba en el brazo, se le perdió .

Juan se puso a llorar y a llorar y su abuela le riñó porque no le había hrcho caso.

Al final lo encontró y se puso muy contento . El pájaro también se puso muy contento y se dio cuenta que tendría que haberle hecho caso a su abuela, porque los mayores son más sabios y hay que aprender a seguir sus consejos.

Y este cuento se ha acabado.

FIN

Erase una vez una princesa que se llamaba Mireya que estaba encerrada en un castillo muy oscuro. Un día llegó Ainara, la mejor amiga de la princesa Mireya y le preguntó:

- ¿Cómo estás?

- No estoy bien . Una bruja me ha encerrado en este castillo.

Y de repente salió un príncipe de un arbusto y como la torre era tan alta que no llegaba cogió una cuerda y trepó, trepó hasta que al fin la rescató.

Cuando se encontró de nuevo con su mejor amiga, la princesa Ainara, le dijo:

El príncipe ya me ha rescatado y es guapísimo.

Qué guay!!! Te deseo que seas muy feliz.

Y todos vivieron felices para siempre. Fueron felices y comieron perdices y a mí no me dieron porque no quisieron.

FIN

Erase una vez una princesa encantada, llamada Alicia. La madre..... pero bueno, mejor os voy a refrescar la memoria. La madre, era su madrastra y la metió en una torre muy muy larga y grande. En el pueblo había un príncipe que la buscaba, pero nunca daba con ella, por eso pensó que la habían raptado y que la tendría que rescatar... Y la rescató.

Fue a donde vivía la madre, descubrió que la madre era una bruja y se fue a otro sito lejos de su madrastra. Cogió unas pócimas para dárselas a la madrastra para que envejeciera, pero cuando vino ésta, le dijo:

Pero, ¿Como te atreves, niña? ¿Y por qué no estás metida en la torre? ¿Cómo te atreves a hacerme esto?

Y de tanto gritar se hinchó e hinchó tanto, que se fue volando como un globo y el Príncipe y la bella Princesa Alicia se casaron y fueron felices para siempre . Y colorín colorado este cuento se ha acabado.

Y FIN

ESPERO QUE OS HAYA GUSTADO

Una vez en invierno los niños jugaban a las bolas de nieve. Una niña pensó hacer un muñeca de nieve y le dijo a todo el mundo, que la ayudan. Cuando terminaron, los niños pensaron que ojalá la muñeca de nieve se moviera y hablara.

Un día un hada con su varita mágica hizo que el muñeca de nieve se moviera y hablara. Los niños se asustaron cuando el muñeca de nieve les saludó a la mañana siguiente.

Y todos los día jugaban con la muñeca de nieve. La muñeca de nieve era muy feliz .

Cuando llegó el verano la muñeca de nieve se convirtió en agua y los niños se pusieron tristes y nunca la olvidaron.

FIN

Érase una vez una casa encantada. Allí, vivía un fantasma que echó un hechizo para que nadie se acercara a ésta.

Un día, un hombre entró en la casa y el fantasma lo volvió loco. Entonces, el hombre salió corriendo, huyendo de aquel hechizo maléfico y trajo un aspirador para atrapar a aquel ser tan malvado. Y el fantasma se protegió pero no pudo hacerlo por mucho rato y entonces el fantasma se puso a volar y el hombre cazó al fantasma. Y ya no hubo más fantasma.

Fin

Personajes: Tres leones, una familia compuesta por un hombre , una mujer, un niño y una niña. También hay cinco lobos, dos perros y diez tigres.

Lugar. En un bosque

Cuándo. Un fin de semana.

Cuento.

Había una vez un bosque misterioso que tenía miles de criaturas.

Un fin de semana los niños de Elisa querían ir al bosque misterioso para jugar a la pelota con su padre. Ya estaban allí y no había nadie porque como era un ¡bosque misterioso!...

No había nadie, pero a los niños le daba igual, ¡como eran tan pequeños!... Se creían que habían llegado los primeros, pero los padres no estaban de acuerdo. Entraron y escucharon unos ruidos de lobos. Después vieron, o creían que eran diez tigres o dos perros y a lo último vieron que eran tres leones y se asustaron mucho y como se asustaron, se fueron a su casa y los padres jugaron con sus hijos a pintar, a bailar, al pilla pilla, a las casitas, también a las cocinitas y al escondite y así acaba el cuento del ¡bosque misterioso!...

FIN

Érase una vez un conejo que era muy travieso. Un día pasó por el campo un señor y se lo encontró por el camino. El conejo se le subió encima arañándole la chaqueta. El señor fue corriendo detrás del conejo y entonces lo perdió de vista. El señor se fue del campo y al siguiente día pasó por el campo una señora. Aparec EL CONEJO TRAVIESO

Érase una vez un conejo que era muy travieso. Un día pasó por el campo un señor y se lo encontró por el camino. El conejo se le subió encima arañándole la chaqueta. El señor fue corriendo detrás del conejo y entonces lo perdió de vista. El señor se fue del campo y al siguiente día pasó por el campo una señora. Apareció el conejo de detrás de un arbusto y le quitó la cesta y se fue corriendo.

Otro día pasó una niña con sus padres y el conejo volvió a aparecer para quitarle sus muñecas y se fue corriendo.

Todos los que habían sido víctimas del conejo fueron al campo y vieron al conejo con sus amigos que se fueron corriendo al ver a las personas, temiendo de que les fueran a pegar y éstas recuperaron sus cosas y colorín colorado este cuento se ha acabado.

Fin

Erase una vez una princesa que tenía seis amigas. La princesa se llamaba Rosa y sus amigas se llamaban Marina, Mireya, Gisela y Miriam. Un día estaban jugando en el jardín y vieron un príncipe que pasaba por allí. La princesa siguió jugando con sus amigas y al día siguiente el príncipe volvió al palacio de la princesa Rosa y dijo al rey y a la reina que si se podía casar con la princesa Rosa. El rey dijo que sí y al día siguiente el príncipe se casó con la princesa Rosa.

Cuando pasó mucho tiempo, la princesa supo cómo se llamaba el príncipe. El príncipe se llama David y tenía un caballo blanco. El caballo se llamaba Trueno porque corría mucho. Un día el caballo escapó del palacio y la princesa lo vio. Fue hacia él y fue a avisar al príncipe. Cuando el príncipe la vio sobre su caballo se alegró mucho y pasó un tiempo y la princesa ¡tuvo un hijo y le puso Bizquen y vivieron felices con el príncipe.

FIN

ERASE una vez, que en un jardín de una casa, había una margarita de oro mágica, que concedía deseos.. Un día, un pajarito que pasó por el jardín, le preguntó a la flor:

¡Hola, ¿cómo te llamas?

La flor de oro dijo:

Yo me llamo Deseo ¿y tú?

Y el pajarito dijo:

Yo me llamo Pico Pico. Y le preguntó a Deseo:

¿Por qué te llamas Deseo? Entonces Deseo respondió: me llamo Deseo porque concedo deseos y Pico dijo:

¿Me concedes un deseo, Deseo ?dijo:

Claro que sí. ¿Pero que deseo quieres Pico? Dijo.

Quiero ser una paloma blanca (porque Pico era una pajarita marrón y ella siempre había querido ser blanca), y se lo concedió y ya era una preciosa paloma blanca.

Muchas gracias.

Y se fue volando .Luego al rato paso una rata y le dijo la rata a la flor

¿Cómo te llamas? Respondió:

Me llamo Deseo, ¿y tu como te llamas? La rata respondió:

Yo me llamo Queso.

¿Por qué te llamas Deseo?

Porque concedo deseos. Queso dijo:

¿Me concedes un deseo,Deseo? Dijo.

Claro, sí, pero ¿qué quieres, Queso?

Quiero ser un gata. Y se lo concedió rápidamente y era una preciosa gata naranja con rayas amarillas. Ella dijo:

Me llamaré Atún. Dio las gracias y se fue.

Apareció otro animal que era un perra muy pequeña porque era un chihuahua, le dijo a la flor:

¿Cómo te llamas? y le dijo:

Yo me llamo Deseo ¿y tú?

Yo me llamo Pequeña. Y le dijo: a la flor:

¿Por qué te llamas Deseo?

Porque concedo deseos. Y Pequeña dijo:

¿Me concedes un deseo?

Claro que sí, pero ¿qué quieres?

Quiero ser una perra de las nieves. Y se lo concedió y era una preciosa perra marrón de las nieves.

Me llamaré Luna. Dio las gracias y se fue, pero la flor solo podía conceder tres deseos y cuando concedió tres ¡desapareció¡

Y FIN.