03. El padrón

Este Cuerpo, a través del empadronamiento de los pretendientes, funciona de la misma manera que lo hacían los antiguos padrones de nobles. Una vez el pretendiente haya presentado su expediente y este se apruebe, aquel será asentado en un padrón de infanzones donde se hará constar sus datos así como la prueba nobiliaria por la cual ha sido aceptado su expediente.

Una copia del expediente quedará en poder del Cuerpo para que la prueba nobiliaria sea clara, notoria y, pueda consultarse en cualquier momento.

El canciller del Cuerpo librará, de forma gratuita, un diploma patente donde se reconocerá la calidad de cada miembro empadronado como infanzón.

Puede acceder a este padrón cualquier persona interesada que cumpla con los requisitos establecidos y realice el pertinente donativo que irá destinado en su integridad a fines sociales.

El acceso al padrón no significa ser asociado de este Cuerpo con todos los derechos y deberes que implica. Estar empadronado como infanzón significa que este Cuerpo legitima al empadronado como noble de la Corona de Aragón, pudiendo para ello hacer ostentación del diploma patente y de la insignia del Cuerpo, que así lo confirma, tras un minucioso examen de su expediente por parte de expertos en derecho y nobiliaria.