Los valores en el básquet son tan importantes como las habilidades técnicas y tácticas, ya que forman la base del comportamiento dentro y fuera de la cancha. El respeto por los compañeros, los rivales, los árbitros y el entrenador fomenta un ambiente de juego sano y constructivo. La responsabilidad y el compromiso permiten asumir el esfuerzo diario de los entrenamientos y cumplir con el equipo en todo momento. La solidaridad y el trabajo en equipo son esenciales en un deporte colectivo como el básquet, donde el logro individual solo tiene sentido si aporta al objetivo común. Además, la perseverancia y la honestidad ayudan a enfrentar los desafíos, aprender de los errores y crecer como personas. En definitiva, los valores no solo forman mejores jugadores, sino también mejores seres humanos.