Colocamos a remojo las habas durante 24 horas.
El segundo día las colocamos dentro de un taper envueltas en papel humedecido.
A los 6 días nos las encontramos ya germinadas.
El séptimo día procedimos a plantarlas en el bancal con el resto de habas.
Habas germinadas
Las colocamos con mucho cuidado.
Las cubrimos con compost y hojas.
Las regamos para que sigan creciendo.