Para el Ministerio de Educación Nacional la formación integral es un proceso educativo orientado hacia el desarrollo del ser, que reconoce las dimensiones corporal, socio‑afectiva, cognitiva, ética‑moral, estética, espiritual, política y lingüística‑comunicativa, en escenarios que potencian los conocimientos, actitudes y capacidades para hacer frente a los retos del siglo XXI.

Dicho enfoque busca superar una visión fragmentada del aprendizaje para promover una educación que sea humanista, incluyente, antirracista e intercultural, adaptada a diversos contextos territoriales y poblaciones. Asimismo, la formación integral se implementa mediante estrategias como los centros de interés, que integran áreas como arte, cultura, deporte, ciencia, tecnología, ciudadanía y la educación CRESE (ciudadana, reconciliación, socioemocional, antirracista y cambio climático), para generar entornos de aprendizaje significativos, pertinentes e inclusivos.