UD 9. LAS FUENTES DE ENERGÍA Y EL ESPACIO INDUSTRIAL
El despegue de la industria española se inició en el siglo XIX, pero su consolidación no se produjo hasta mediados del XX. En este largo proceso se pueden diferenciar varias etapas.
1ª ETAPA: Los orígenes de la revolución industrial (1855-1900). Despegue industrial.
Pese a la existencia de condiciones favorables, el proceso industrializador se inició en España con retraso respecto a otros países de Europa occidental. La tardía incorporación de nuestro país a la revolución industrial se debió, fundamentalmente, a la escasez de recursos energéticos, humanos y tecnológicos, y también a la inestabilidad sociopolítica.
Hasta el último cuarto del siglo XIX la producción industrial española no experimentó un crecimiento continuo, apoyado, sobre todo, en el desarrollo de la siderurgia y la industria textil. La expansión de estas actividades se produjo en torno a unos focos muy localizados: Andalucía, Asturias, País Vasco y Cataluña, cuya localización estaba condicionada por las materias primas y la proximidad a los principales puertos. Tardíamente, en comparación con esos territorios, y debido a la expansión de la red ferroviaria y la necesidad de abastecer a una población creciente, Madrid se convirtió en un importante núcleo industrial, especializado en bienes de consumo. En el resto del país, los intentos de crear industrias modernas tuvieron un carácter aislado.
En el proceso industrializador tuvo un papel relevante el ferrocarril, que favoreció la constitución de un mercado nacional y, además, contribuyó de forma directa al desarrollo de la industria, en concreto de la siderúrgica. El Estado también influyó en el desarrollo de la industria, al imponer medidas proteccionistas para favorecer la producción nacional; así, se potenció la creación de grandes monopolios, como, por ejemplo, Unión de Explosivos, Altos Hornos, Papelera Española, etc.
2ª ETAPA: Impulso de la actividad industrial (1900-1936)
A lo largo del primer tercio del siglo XX (1900-1936) una serie de coyunturas favorables van a propiciar un intenso impulso de la actividad fabril:
· La neutralidad en la 1ª Guerra Mundial: (España abastece a los contendientes en la guerra lo que repercutió en una capitalización muy provechosa para la industria).
· Crecimiento del consumo interno.
· Inversiones en infraestructuras durante la Dictadura de Primo de Rivera.
· Proteccionismo industrial, que elimina la competencia exterior.
· Incorporación de los avances de la segunda revolución industrial.
La estructura industrial se caracteriza:
a) por el afianzamiento de la industria básica (siderurgia que se extendió por la franja cantábrica y creación en la zona mediterránea de los primeros Altos Hornos).
b) Crecimiento de industrias de consumo y bienes de equipo.
Localización: Hegemonía de Cataluña, País Vasco, Asturias, Valencia y Madrid. El foco andaluz entra en decadencia y crisis.
3ª ETAPA: Circunstancias desfavorables (1936-1959)
Nos encontramos una serie de circunstancias desfavorables:
· La Gran Depresión mundial.
· La Guerra Civil española.
Las causas del retroceso industrial entre 1936 y 1959 fueron las destrucciones de la guerra y la política autárquica de la posguerra. La política del Estado en este periodo viene definida por el nacionalismo económico. Al proteccionismo exacerbado se añaden los controles y la intervención del sector público en la actividad económica:
- Intervención del Estado, con la creación del INI (Instituto Nacional de Industria con dos grandes empresas HUNOSA, Ensidesa) en 1941. Holding estatal. El INI actuaba como un sustituto de la empresa privada en actividades poco rentables o que requerían fuertes inversiones.
- La explotación de los recursos propios, aunque no fuesen rentables y resultasen costosos.
- Restricciones a la inversión extranjera y a las importaciones. Con estas medidas se fomentó la industria española por falta de competencia, pero por otra parte se frenó su expansión por la escasez de capitales, materias primas y fuentes de energía y maquinaria provenientes del exterior.
Localización de la industria:
Los sectores básicos impulsados por el INI (siderurgia, refinerías, petroquímicas y construcción naval) continuaron concentradas en las Costas Cantábricas Asturias, País Vasco) Cataluña, Valencia. Madrid reforzó igualmente su posición industrial gracias a la política centralista de Franco.
4ª ETAPA: De la expansión a la crisis (1959-1975): El desarrollismo
Los años 60 se caracterizan por la apertura de fronteras que trajo como consecuencias la integración de la economía en el sistema internacional, lo que incentivó la cantidad, la calidad y la diversidad, tanto de la producción como del consumo interior, así como la exportación de nuestros productos al extranjero.
Causas del desarrollo de la industria:
- Los ingresos en divisas que aportaba el turismo.
- Los envíos de nuestros trabajadores emigrantes.
- Fuertes inversiones realizadas por las multinacionales que ahora se instalan en España.
- El interés del Estado, que fomentó la industria a través de los Planes de Desarrollo y de la concesión de incentivos para la creación de empresas, con el objetivo de favorecer el crecimiento industrial en zonas del interior no industrializadas y eliminar los desequilibrios territoriales en la distribución de la industria y el desarrollo durante al época franquista.
Acciones que llevaron a cabo:
-Polos de Promoción y desarrollo: Se seleccionó ciertas áreas urbanas en regiones atrasadas y se creó en ellas las condiciones para que se desencadenase un proceso de concentración industrial similar al que de manera espontánea se había dado en regiones más desarrolladas, posteriormente (se suponía) estas industrias atraerían a otras y actuarían como motores del desarrollo del entorno.
-Polos de desarrollo industrial: se plantearon en ciudades que ya contaban con cierta base industrial (A Coruña, Vigo, Sevilla, Valladolid, Zaragoza, Granada, Córdoba, Oviedo, Logroño) RESULTADOS: Los resultados fueron inferiores a los previstos u su efecto dinamizador sobre el entorno fue escaso. En algunos casos se alcanzó un éxito relativo (Valladolid, Vigo, Sevilla, A Coruña), pero apenas se obtuvieron logros en las áreas más deprimidas que no contaban con un clima industrial previo.
5ª ETAPA: De la crisis a la reconversión industrial (1975-1985)
La crisis industrial, que afectó a todos los países industrializados a partir de 1975, incidió duramente sobre la estructura industrial del desarrollismo.
1) Causas externas de la crisis:
-Encarecimiento de la energía por la subida de los precios del petróleo, que incrementó los costes de producción.
-La mundialización de la economía y la competencia de los NPI (Nuevos países industrializados). La mundialización ha acentuado la división internacional del trabajo.
Los NPI (casi todos asiáticos) son muy competitivos por la mano de obra tan barata que ofrecen, por lo que gran parte de la industria tradicional (siderurgia, construcción naval, textil, calzado) y sectores de montaje se han establecido en estas zonas.
2) Causas internas:
-Las deficiencias estructurales de la industria española: desfavorable especialización en sectores maduros o tradicionales, que necesitaban grandes cantidades de fuentes de energía y que fueron muy afectados por la crisis.
-La coyuntura histórica (muerte de Franco) generó incertidumbre, redujo inversión y retrasó las políticas para hacer frente a la crisis.
6ªETAPA: La actual política industrial: Reestructuración industrial.
Para solucionar la crisis los países de la OCDE (Organización de Cooperación y Desarrollo Económico) adoptaron desde 1975 políticas de reestructuración industrial, que en España se retrasaron hasta la siguiente década por las circunstancias políticas.
La reestructuración industrial tiene dos vertientes:
a) La reconversión industrial pretendía realizar las reformas necesarias para asegurar la viabilidad a medio plazo de las industrias en crisis.
Las actuaciones serán: ajustar la oferta y la demanda, eliminado el exceso de producción; regulación de plantillas; saneamiento financiero de las empresas; la especialización en productos con mayor demanda.
La reconversión afectó sobre todo a sectores llamados maduros (ramas metalmecánica, construcción naval, línea blanca de electrodomésticos, equipo eléctrico, electrónico, textil y calzado).
Los resultados fueron reducción del empleo en las ramas metalmecánica, calzado, confección, superando incluso las previsiones.
b) La reindustrialización en las zonas más afectada por la reconversión se realizó en dos vertientes:
c) Modernización tecnológica de los sectores que, sometidos a reconversión, presentan viabilidad.
d) Creación de nuevas actividades de futuro que diversificase la industria de zonas hasta entonces muy especializadas y generasen empleo capaz de absorber los excedentes laborales para ello se crearon las ZUR y ZID.
e) Las ZUR (Zonas de urgente Reindustrialización). Las zonas elegidas fueron: Galicia, Asturias, zona del Nervión, Barcelona, Madrid y Cádiz.
f) Podían solicitar su inclusión en una ZUR aquellas empresas que se instalasen en estas áreas, que generasen empleos y fuesen viables. A cambio recibirían incentivos fiscales y financieros, así como subvenciones por contratar a trabajadores parados por el efecto de la reconversión.
Las ZID (Zonas industrializadas en Declive) sustituyeron a las ZUR al aprobarse la Ley de incentivos regionales. Se incluye en las ZID todas las áreas afectadas por la crisis y el ajuste industrial. La promoción se basa en subvenciones.
Resultados: No fueron del todo suficientes, generó menos empleo del previsto, las ayudas beneficiaron sobre todo a las grandes empresas y se acentuaron los desequilibrios regionales.
El proceso de mundialización o globalización de la economía actualmente en curso tiene una fuerte incidencia sobre el sector secundario:
• Se está produciendo una amplia concentración empresarial para abastecer un mercado mundial y ofrecer los productos al mejor precio.
• Muchas de estas empresas son transnacionales, altamente competitivas y con un poder económico semejante al de algunos Estados en algunos casos.
• Se ha generalizado la deslocalización industrial gracias a la facilidad e inmediatez de las comunicaciones y el abaratamiento de los transportes. La deslocalización consiste en que los procesos de producción no tienen por qué concentrarse en un mismo lugar, ni siquiera en un mismo país, sino que resulta más rentable dispersar la producción en función de las facilidades que se obtengan en cada Estado.
9.2.1. Materias primas
Son los recursos a partir de los cuales se obtienen productos elaborados o semielaborados. Pueden clasificarse en:
- De origen orgánico = proceden de la actividad agraria, forestal o ganadera. Van a parar fundamentalmente a las industrias agroalimentarias.
- Minerales = se extraen de los yacimientos y pueden ser:
• Minerales metálicos: se encuentran en zonas del zócalo herciniano o en sus rebordes. Se destina a la industria básica o de transformación (el hierro).
•Minerales no metálicos: se encuentran en formaciones paleozoicas y cuencas terciarias. Se destina a la construcción o a la industria química como el cuarzo.
•Rocas Industriales: se encuentra de forma heterogénea y se emplea en la construcción como el yeso o el mármol.
La producción nacional de mineral es insuficiente lo que obliga a recurrir al comercio exterior. La política minera española corresponde a la de la Unión Europea con la que comparte una serie de objetivos.
9.2.2. Fuentes de energía
Las fuentes de energía son los recursos que proporcionan energía útil para diversas aplicaciones, como la industria.
Principales fuentes de energía:
- Carbón: Es una roca combustible de color negro formada por la descomposición de restos vegetales a lo largo de millones de años.
o Producción: zona asturiana, leonesa y palentina.
o Destino: electricidad en centrales térmicas o hidroeléctricas.
o Desventaja: la contaminación y se necesita importar.
- Petróleo: Es un aceite mineral formado por la descomposición de organismos marinos, vegetales y minerales a lo largo de millones de años.
o Producción: escasa, y se da en la costa mediterránea y en enclaves del interior.
o Aplicación: transporte e industria.
o Desventaja: necesita importar.
- Gas Natural: Es una mezcla de hidrocarburos gaseosos encontrados en yacimientos subterráneos.
o Producción: País Vasco y Huelva.
o Aplicaciones: industria, doméstica y electricidad.
o Ventaja: su bajo precio y es menos contaminante.
- Energía Nuclear: Se obtiene por fisión (separación de átomos de uranio)
o Producción: Salamanca y Badajoz
o Aplicación: electricidad
o Desventaja: conlleva ciertos riesgos y tiene residuos altamente contaminantes.
- Energías Renovables: La ventaja es que son limpias, inagotables y tienen una gran dispersión. España ofrece condiciones favorables para su producción. Se aplica para producir energía térmica, eléctrica o mecánica. Puede haber diversos tipos de fuentes:
o Hidráulica: utiliza los saltos de agua de ríos o presas para producir energía. Su producción se localiza en la mitad norte peninsular. Su aplicación es la electricidad.
o Eólica: utiliza la fuerza del viento para producir electricidad.
o La energía de Biomasa: se obtiene de residuos biológicos agrícolas, ganaderos y forestales para producir energía.
o Solar: utiliza el calor, para producir energía térmica y la luz del sol para producir electricidad.
o La energía geotérmica: usa el vapor o el agua caliente subterránea para suministrar calefacción y electricidad.
El PEN (Plan Energético Nacional) pretendía aumentar el gas, las energías renovables y disminuir ligeramente el petróleo. Mantener la producción nuclear y reducir el carbón. Todo ello con objetivos medioambientales.
9.2.3. Capital
Históricamente las industrias españolas han dependido de inversiones e iniciativas empresariales extranjeras en sectores tales como la minería o los servicios públicos. A partir de 1939 con la creación del INI (instituto nacional de industria) se promovió el proteccionismo económico y se hicieron grandes restricciones para las inversiones extranjeras. Pero en 1959 comienza una etapa de liberación que da lugar a la llegada del capital extranjero. En la actualidad con el proceso de globalización se ha producido una amplia concentración industrial que hace que el capital de las empresas sea transnacional, de forma que la fiscalización por parte de los estados sea muy complicada.
9.2.4. Factores de localización
La industria tendió a localizarse en base a los llamados factores “clásicos”:
o Según la proximidad a las materias primas y fuentes de energía.
o La presencia de mano de obra abundante
o La existencia de buenos sistemas de transporte.
o La disponibilidad del capital
o La existencia de sectores de apoyo y un mercado de consumo.
o La política industrial del Estado.
Las industrias se concentraban en grandes aglomeraciones, formando las llamadas economías de aglomeración. Desde la década de 1980 se han observado cambios en los factores de localización. Aunque se mantienen las grandes concentraciones industriales se difunde hacia espacios periféricos debido a los problemas de las aglomeraciones.
Las nuevas estrategias del capitalismo para aumentar el beneficio han hecho que se separen las funciones de dirección y gestión (terciarización de la industria), de las de producción.
La desconcentración de la industria afecta a los sectores maduros, siendo la influencia de las nuevas tecnologías fundamental como nuevo factor de localización.
Las actividades industriales se agrupan en torno a sectores que se identifican por el destino final de los bienes producidos o de acuerdo con la naturaleza u origen de las materias primas utilizadas.
Según el primer criterio, distinguimos entre industrias de base, de bienes de equipo y de bienes de uso y consumo.
Las industrias de base ocupan el primer eslabón en la cadena industrial, pues transforman las materias primas en productos semielaborados que, a su vez, son empleados como materia prima por otras industrias. Un buen ejemplo serían las industrias siderúrgica y petroquímica.
Las industrias de bienes de equipo producen bienes de equipo producen bienes, máquinas o herramientas, que son utilizadas por otras industrias en sus proceso fabriles.
Las industrias de bienes de uso y consumo transforman materias con distinto grado de elaboración o productos diversos en bienes que son usados o consumidos directamente por la población.
Asimismo, los sectores industriales pueden establecerse considerando sus características generales; de este modo, distinguimos entre los sectores industriales tradicionales o maduros, los sectores dinámicos que cuentan con una fuerte presencia de capital extranjero y los sectores de vanguardia, de alta tecnología tienen menor implantación que en otros países europeos.
9.3.1. Tradicionales o maduros
Son las ramas industriales afectadas por el descenso de la competitividad (debido al atraso de su tecnología o al menor coste de la mano de obra en otros países), por la reducción de la demanda (a causa de la aparición de nuevos materiales o productos) o por la necesidad de llevar a cabo procesos de reconversión. Estos sectores son los siguientes:
a) La metalurgia básica y de transformación metálica. Se compone de dos subsectores: la siderurgia y la industria de transformados metálicos.
•La industria siderúrgica integral obtiene acero a partir del mineral hierro en el alto horno. Tras un duro proceso de reconversión solo se mantiene en Asturias, donde, tras privatizarse y modernizarse, forma parte de un grupo multinacional que lidera la producción mundial de acero. La siderurgia no integral obtiene acero a partir de la chatarra en horno eléctrico y se localiza en empresas de menor tamaño del País Vasco, Cantabria, Navarra y Cataluña.
•La industria de transformados metálicos fabrica productos metálicos y maquinaria. Se concentra en el interior del triángulo Barcelona-País Vasco-Madrid.
b) La fabricación de electrodomésticos de línea blanca se encuentra en un proceso de reorganización de la producción (aumento de la especializaron), de la empresa (tendencia a la concentración) y del mercado (incremento y diversificación). Este hecho ha supuesto el cierre o deslocalización de algunas empresas. Las principales se localizan en Navarra, Aragón, Cantabria y País Vasco.
c) La construcción naval, ante la fuerte competencia de países más baratos, está sufriendo una dura reconversión para reducir su capacidad y su plantilla, y especializarse en otras actividades, como las reparaciones. Este sector se encuentra muy concentrado en Galicia, Cantabria, País Vasco y Andalucía.
d) La industria textil y de la confección se centra en Cataluña y la Comunidad Valenciana. La rama de fibras químicas, con fuerte componente tecnológico, se concentra en grandes empresas con importante participación de capital extranjero. La rama de confección, caracterizada por el minifundismo empresarial, la dispersión y el abundante empleo de mano de obra, sufre la competencia de países más baratos y procesos de deslocalización, que tratan de atajarse con la inversión en intangibles (diseño, marcas, moda).
9.3.2. Dinámicos
Son las ramas industriales caracterizadas por su alta productividad y especialización, y por tener la demanda asegurada (alto mercado interior y gran potencialidad exportadora). En estos sectores es muy importante la presencia de capital extranjero. Los más destacados son el del automóvil, el químico y el agroalimentario.
a) El sector del automóvil, tras superar un proceso de reconversión, recuperó su dinamismo. Las plantas industriales pertenecen a empresas multinacionales y la producción se exporta en gran parte, siendo España el tercer país exportador de Europa, tras Alemania y Francia. No obstante, el sector se encuentra amenazado por el peligro de deslocalización de las plantas de vehículos y de las industrias de componentes. Entre las fábricas principales destacan las de Palencia, Valencia, Valladolid, Zaragoza y Madrid.
b) El sector químico es una de las bases de la industria española, a pesar de que sufre problemas, como la fuerte presencia extranjera y la escasa capacidad investigadora. Comprende dos subsectores:
• La petroquímica o química, de base se organiza en grandes complejos, integrados, generalmente, con refinerías (Puertollano, Cartagena, Algeciras, Huelva, Santa Cruz de Tenerife).
• La química de transformación se estructura en pequeñas empresas que fabrican colorantes, pinturas, barnices, perfumes, material fotográfico, fertilizantes, productos farmacéuticos y papel. Se localizan en el País Vasco, el litoral catalán y Madrid.
c) El sector agroalimentario cuenta con industrias pequeñas y dispersas, aunque también tienen gran peso las multinacionales. Sus objetivos de futuro son aumentar las ventas en el mercado interior y fomentar las exportaciones, con mayor nivel de elaboración y de transformación del producto. En este sector destacan Cataluña, Andalucía y la Comunidad Valenciana.
9.3.3. Vanguardia
Son las ramas industriales que cuentan con una elevada intensidad tecnológica, fuerte diferenciación de los productos y alta demanda. Los sectores más destacados son material eléctrico y electrónico, ordenadores, instrumentos ópticos y de precisión, etc.
· En España, estos sectores se han implantado con retraso y tienen menor desarrollo que en otros países europeos, debido a la dependencia del exterior en investigación y en tecnología, al predominio de pymes de competitividad escasa y a la falta de adaptación de la mano de obra y del sistema educativo a las demandas empresariales.
· La localización de los sectores de la alta tecnología tiende a concentrarse en parques tecnológicos o científicos. Se ubican en el entorno de metrópolis y ciudades medias, situándose en espacios que combinan elevada calidad ambiental y buena accesibilidad. En ellos suelen existir incubadoras de empresas, edificios destinados a alojar a empresas innovadoras durante los primeros años de su desarrollo, mientras se decide si son o no viables.
· El objetivo de los parques es que sus industrias innovadoras actúen como locomotoras para el desarrollo local, mediante la atracción de otras empresas y la difusión de las innovaciones al entorno a través de sus relaciones con otras empresas, con los proveedores y con los clientes.
· Los resultados han sido la concentración de la mayoría de los parques y de las empresas innovadoras en el entorno de las grandes ciudades y en los ejes industriales más dinámicos, (Madrid, Cataluña, País Vasco, Valencia y Andalucía). Además, su éxito ha dependido casi siempre de su capacidad para atraer a empresas multinacionales, muy avanzadas en tecnología, que no suelen difundir las innovaciones a su entorno, dado que realizan sus investigaciones en su país de origen y no mantienen demasiadas relaciones con el entorno empresarial.
En España, la localización industrial mantiene en la actualidad fuertes desequilibrios territoriales, agravados por la tendencia de los sectores más dinámicos a localizarse en las regiones más avanzadas.
Las desigualdades en la distribución espacial de la industria son a su vez fuente de otros desequilibrios territoriales en el reparto de la población; en la riqueza; en la dotación de infraestructuras, equipamientos y servicios; y en el peso político, que han afectado negativamente a las regiones españolas menos industrializadas. Por eso, el fomento de la industria ha sido una de las actuaciones básicas en las políticas para el desarrollo regional.
La localización industrial permite diferenciar áreas industrializadas con distinto dinamismo (desarrolladas, en expansión y en declive) y áreas de industrialización inducida y escasa.
9.4.1. Áreas industriales desarrolladas
Son los espacios centrales de las áreas metropolitanas de Madrid y Barcelona, que son los centros principales de la industria española.
Su evolución reciente ha estado marcada por el hundimiento o reconversión de sectores industriales maduros y por una revitalización industrial, debida a la implantación de los sectores de alta tecnología y de las sedes sociales de las grandes empresas nacionales y multinacionales, atraídas por las ventajas de su centralidad.
Todo ello ha favorecido una creciente terciarización de su industria, manifestada en la aparición de parques industriales y empresariales, en los que las tareas de oficina superan a las propiamente fabriles.
9.4.2. Áreas y ejes industriales en expansión
Son zonas que están recibiendo implantaciones industriales como resultado de las tendencias difusoras de la industria o del desarrollo de la industrialización endógena. Cuentan con una red de autopistas que las vertebran y conectan a las áreas desarrolladas (Madrid, Barcelona), así como a otras áreas centrales de antigua industrialización (País Vasco y Valencia), y generan un tejido industrial en todo su recorrido. Se localizan en el cuadrante noreste de la Península y entran en el área de influencia sur mediterránea europea.
Se pueden distinguir dos ejes que, a su vez, están conectados: el valle del Ebro y la fachada mediterránea:
-Valle del Ebro. La existencia de una excelente vía de comunicación que coincide con la depresión del Ebro y que enlaza con los focos industriales más importantes del país (Cataluña, País Vasco y Madrid), genera un corredor industrial que se asemeja a una «y griega abierta» cuyo vértice central es Zaragoza. La aglomeración industrial del País Vasco atrae, a través de Vitoria, a los complejos industriales de Burgos (Miranda de Ebro), La Rioja (Logroño, Calahorra, Nájera y Alfaro) y Navarra (Estella, Tudela, Fitero). En estas áreas predomina la industria agroalimentaria (conservera) y manufacturas metálicas, incluidos automóviles. Zaragoza concéntrala mayor parte de la capacidad industrial de Aragón y es sede de la importante multinacional automovilística General Motors (Figueruelas). Es un nodo principal de comunicación entre el norte, el este y el centro peninsular.
-La fachada mediterránea. Comprende el eje que va desde Girona a Cartagena (Cataluña, Comunidad Valenciana, Región de Murcia e Islas Baleares). Se caracteriza por una variada gama de producciones, en industrias con capital nacional y multinacional. Existe un predominio de desarrollo industrial endógeno. En la Comunidad Valenciana destacan las tradicionales industrias del calzado (valle del Vinalopó), madera y muebles (Vall d'Uxó), cerámica industrial (Castellón), alimentación (Jijona), juguetes (Ibi), textil y papelera (Alcoy) y automoción (Almussafes), y cuenta también con el Parque Tecnológico de Paterna (Valencia). En Islas Baleares sobresalen la industria de calzado (Inca) y bisutería (Manacor), y en la Región de Murcia predominan las industrias agroalimentarias conserveras (valle del Segura), y las químicas y petroquímicas en la costa de Cartagena.
Al ser ejes de expansión con gran diversificación sectorial han respondido a las medidas de reestructuración aplicadas con la reconversión industrial (siderurgia de Sagunto y cementeras en Valencia), aunque en otros casos la crisis les ha afectado duramente (astilleros de la Empresa Nacional Bazán en Cartagena).
9.4.3. Áreas y ejes industriales en declive
Son zonas caracterizadas por su declive industrial, localizadas en la cornisa cantábrica y en algunos emplazamientos concretos (Ferrol, Bahía de Cádiz, Puertollano y Ponferrada).
Las causas del declive son su especialización en sectores maduros, caracterizados por el predominio de la gran fábrica y pymes muy dependientes de estas, que en muchos casos han sufrido una dura reconversión. A esto se suman las dificultades para la reindustrialización, motivadas por la existencia de un mercado laboral poco cualificado, con fuerte conflictividad laboral; un grave deterioro medioambiental, por el predominio de industrias muy contaminantes o de solares y naves abandonadas, y un crecimiento urbano desorganizado y de baja calidad.
Las consecuencias de esta situación han sido la desindustrialización, el declive demográfico por emigración y la pérdida de competitividad respecto a otras áreas industriales.
No obstante, algunas zonas han protagonizado ejemplos de revitalización industrial, como el País Vasco a partir de 1995, que reflejan la diferente incidencia de la crisis y de las medidas adoptadas para afrontarla.
9.4.4. Áreas de industrialización inducida y escasa
Se trata de enclaves distribuidos por el resto del territorio nacional que fueron objeto en los años sesenta de la planificación industrial promovida desde los Planes de Desarrollo. Presentan características heterogéneas.
En Castilla y León destaca el eje formado por las capitales de Valladolid-Palencia-Burgos-Miranda de Ebro, que enlazan con el eje del valle del Ebro.
En Castilla-La Mancha los focos se concentran en la periferia madrileña, que han actuado como polígonos de descongestión de la capital (Azuqueca en Guadalajara, Toledo y Talavera de la Reina), o en el área de influencia levantina (Almansa y Albacete).
En Andalucía destacan Sevilla y Málaga, que actúan como ejes de expansión industrial a escala regional, sobre las capitales de Córdoba, Cádiz y Huelva con industrias tradicionales, dispersas y pequeñas que aprovechan los recursos del entorno (textil, vitivinícola, conservera, del mueble).
Las áreas de industrialización escasa son Castilla-La Mancha, Extremadura, Baleares y Canarias, debido a su localización poco competitiva.