Un niño/a con un desarrollo afectivo y emocional adecuado se convertirá en una persona segura de sí misma, facilitando la construcción de una buena autoestima, la capacidad de manejar el estrés y la ansiedad, y la formación de relaciones sólidas; además de potenciar el resto de sus capacidades.
Aquí podéis descargaros el tradicional Juego de la Oca pero adaptado para trabajar las emociones.