Las estrategias se desarrollan a partir del CAME. Ante un negocio nuevo, lo lógico es crear una empresa con capacidad de hacer las cosas mejor que lo están haciendo las empresas actuales y que explota las oportunidades del entorno (potencialidades), y afronta las posibles amenazas (riesgos). En los sectores con grandes empresas, la estrategia está en corregir las debilidades con cambios (desafíos).
Las tácticas se elaboran a partir del CAME. El Análisis CAME (Corregir, Adaptar, Mantener y Explotar) es una herramienta complementaria al DAFO que permite definir las acciones y enfoques estratégicos a seguir.
Al iniciar un nuevo negocio, lo ideal es crear una empresa capaz de mejorar lo que hacen las compañías actuales, aprovechar las oportunidades del entorno y enfrentar los posibles riesgos. En sectores dominados por grandes empresas, la estrategia consiste en transformar las debilidades mediante ajustes y mejoras.
Esta será la estrategia que seguiremos para nuestra empresa. Las estrategias ofensivas, también conocidas como de ataque y posicionamiento en el mercado, se centran en explotar las fortalezas propias del negocio, y aprovechar las oportunidades que presente el mercado.
Debido a que nuestra empresa es nueva, este tipo de estrategia es ideal porque tenemos una gran flexibilidad y podemos aprovechar las nuevas oportunidades del mercado, ya que contamos con un elemento diferenciador o especialmente competitivo.
Nuestra reducida estructura y carencia de procesos nos permite poder llegar a posicionarnos rápidamente.
Una vez elegida la estrategia se analiza como se pueden afrontar las amenazas, corregir las debilidades, mantener las fortalezas y explotar las oportunidades.