Anna Coleman: la artista que utilizaba la escultura para ayudar a los soldados.
Anna Coleman fue una de las personas más exitosas dentro de la anaplastología, una rama dentro de la medicina, que aúna el arte, en concreto, la escultura y la ciencia. Se encarga de restaurar la anatomía ausente o malformada, a través de medios artificiales.
Nació en Filadelfia, Estados Unidos, pero se trasladó a Francia junto a su familia cuando ya era una reputada artista. Allí descubrió el trabajo del escultor británico Francis Derwent Wood en el Departamento de Máscaras para Desfiguración Facial en París.
Más tarde, ella creó su llamado "Estudio para máscaras de retrato" de la Cruz Roja Americana, para proporcionar el uso de estas para los soldados que había acabado profundamente desfigurados de la Primera Guerra Mundial.