Seleccionar imágenes y recursos audiovisuales de calidad (que no se vean pixelados o borrosos), que resulten atractivos y sean una alternativa a lo que se encuentra rápidamente en Google.
Sostener el criterio que compartimos dentro de las escuelas, elegir imágenes interesantes y no estereotipadas que inviten a la apertura de sentidos.
Por último, es muy importante poder tomar decisiones y sostener criterios con el objetivo de construir una estética potente y permitir una más fácil y cómoda lectura en la construcción de un “espacio digital amable”.