LeccióN 3. 

La mujer en Latinoamérica. la lucha por la vida

¿Cuáles son los problemas que enfrenta la mujer latina hoy en día? ¿Hay avances con respecto al pasado? ¿Cómo influye la situación social? ¿Qué gobiernos están tomando medidas de forma activa para avanzar en la igualdad de derechos? ¿Qué papel tiene la lucha social por parte de ONGs y otros grupos? ¿Cuál es la historia del feminismo en la región?

Sara Curruchich es la primera cantautora indígena guatemalteca en llevar sus cantos en kaqchikel -su idioma materno- y español a nivel internacional. Su producción musical dialoga con diversos géneros como el rock, el folk y la música tradicional maya kaqchikel. Se ha presentado en importantes escenarios de diferentes países del mundo.

Más información sobre la Siguanaba aquí.

ÍNDICE

Vocabulario básico

Matriarcado: organización social en la que el mando y liderazgo lo tienen las mujeres.Patriarcado: organización social en la que el mando y liderazgo lo tienen los hombres.Violencia doméstica: violencia ejercida en el ámbito familiar.Feminicidio: asesinato sistemático de mujeres que manifiesta la situación de inferioridad de esta en la sociedad.Feminismo: movimiento social que lucha por la igualdad entre hombres y mujeres. Brecha salarial: diferencia en el salario entre hombres y mujeres marcado por el género.  Techo de cristal: límite no visible en la sociedad al progreso de la mujer, especialmente en el terreno laboral. Sororidad: Solidaridad entre mujeres en un contexto de discriminación sexual y violencia patriarcal. Se usa en ámbitos de lucha feminista.Machismo: actitud en la que se considera a la mujer inferior al hombre por naturaleza.Hembrismo: actitud en la que se considera al hombre inferior a la mujer por naturaleza.Masculinidad: Conjunto de características físicas, psíquicas o morales que se consideran propias del varón o de lo masculino, en oposición a lo femenino.Feminidad: Conjunto de características físicas, psíquicas o morales que se consideran propias de la mujer o de lo femenino, en oposición a lo masculino.Masculinidad tóxica: imposición de un modelo estético y de comportamiento social de acuerdo a estereotipos de género al hombre (cis o no) y que favorece una sociedad patriarcal y machista.Feminidad tóxica: imposición de un modelo estético y de comportamiento social a la mujer (cis o no) y que favorece una sociedad patriarcal y machista.

Introducción

En América Latina y el Caribe se estima que viven más de 328 millones de mujeres, en comparación a los más de 318 millones de hombres (según datos de 2019). A pesar de esta estos datos tan igualitarios, la mujer, como en otras muchas regiones del mundo, se enfrenta a una situación de desigualdad por la que lucha cada día, ya sea de forma personal o colectiva. 

La mujer en las sociedades indígenas de Latinoamérica tuvieron diferente consideración, desde un papel de madre y atención del hogar, a cargos políticos y sociales importantes. En general, los pueblos originarios de América estaban organizados en patriarcados, salvo el caso conocido de los mapuches que, sin embargo, pasaron de un matriarcado a un patriarcado poco antes de la llegada de los españoles al continente.

A partir de 1492, las mujeres enfrentaron el nuevo desafío de luchar contra la violencia de la colonización europea, ya fueran mujeres indígenas, criollas, mulatas o negras. La mujer jugó un papel fundamental en el camino de la independencia, ya fuera con las armas y la dirección militar, o con apoyo logístico e intelectual. Latinoamérica tiene una rica tradición de organización y lucha feminista, que, como vemos, va más allá de la llegada de los españoles. Las mujeres latinoamericanas participaron activamente en la lucha política y social por sus derechos antes incluso que en Europa. El sufragio femenino fue una de las luchas constantes, que se consiguió por primera vez en Latinoamérica en Uruguay, en 1927. Ya fuera como revolucionarias en México, a comienzos del siglo XX, ya fuese como guerrilleras durante los años 60 y 70, o en la última década con la reivindicación de decisión sobre el aborto, la denuncia de la violencia de género y la transformación social, las mujeres son una de las fuerzas sociales más importantes de América Latina.

Basado en datos de 2014. Hacer clic para ampliar

A. De la América indígena hasta la independencia

Mujeres indígenas, criollas, mestizas, mulatas y negras destacaron por su lucha contra la desigualdad y contra los colonizadores.

Entre las primeras mujeres indígenas que ofrecieron resistencia contra los españoles destacan la cacique taína Anacaona, que se reveló en La Española contra el maltrato de los españoles, siendo ahorcada en 1504. Entre los mapuches destacó Anuqueupu a finales del siglo XVI, que combatió a los españoles junto a miles de guerreros para vengar la muerte de su esposo, el cacique Potaén. 

Muchas mujeres participaron en la lucha contra los colonizadores durante siglos: en el Virreinato del Perú, destacaron Ana de Tarma, en 1700; Juana Moreno en 1777, que ayudó a los insurrectos contra los encomenderos; en 1781, Micaela Bastidas, ejecutada junto a su esposo Túpac Amaru, líder rebelde. En La Paz, fueron ejecutadas Bartolina Sisa, Gregoria Apaza y Marcela Castro, que lucharon en el sitio de la ciudad.

La independencia contó con el apoyo logístico de mujeres que ofrecían sus salones para conspirar contra los españoles: Rosa Campuzano, Gertrudis Coello, Carmen Noriega, Francisca Quiroga, Carmen Guzmán, Brígida Silva de Ochoa o Petronila Fernández de Paredes.

Micaela Bastidas (Virreinato del Perú)
Ana Monterrosso de Lavalleja (Uruguay)
Gregoria Apaza (Bolivia)

En el camino hacia la independencia junto al general José de San Martín (1778-1850), libertador de Argentina, Chile y Perú, destacaron las intelectuales peruanas Josefa Sánchez de Boquete, Josefa Riva Agüero de Gálvez y Josefa Messia de la Fuente. En Chile, Paula Jaraquemada Alquizar, armó un ejercito y lo dirigió hasta encontrarse con San Martín. En Ecuador, Baltazara Chuiza y Lorenza Abimañay dirigieron levantamientos contra los españoles. Y destaca Manuela Sáenz de Thorne quien, junto a Simón Bolívar, trabajó como espía, promotora de la independencia y guerrillera, además de estar junto a Bolívar en momentos políticos decisivos.  

En la lucha por la independencia, muchas mujeres destacaron por participar directamente en la lucha. En Bolivia, Juana Azurduy de Padilla encabezó un batallón de mujeres llamado "las leales", que participó en unas dieciséis batallas. En Colombia, destacaron Antonia Santos Plata, Josefa Palacios y Policarpa Salavarrieta, y en Venezuela, Juana Ramírez, que dirigió un batallón de mujeres. 

(En honor a Juana Azurduy, Mercedes Sosa interpretó esta canción).
Manuel Saénz de Thorne.
Paula Jaraquemada Alquizar 

Más al sur, en Uruguay, Ana Monterroso de Lavalleja luchó por la independencia del país bajo el dominio brasileño. 

México reconoce a Gertrudis Bocanegra, que dirigió un batallón. Otras mujeres se rebelaron contra sus propias familias a favor de la independencia, como Josefa Ortiz de Domínguez y Leonora Vicario

En Cuba, Candelaria Figueredo destacó como independentista. Y en el vecino Puerto Rico, Mariana Bracetti, "brazo de oro", destacó por el manejo de la espada. Lola Rodríguez de Tió, poeta y periodista, escribió una versión revolucionaria para el himno nacional de Puerto Rico. 

En la lucha contra la esclavitud destacaron Guiomar, que luchó en la rebelión en Venezuela en 1552; Juana Francisca, María Valentina y Juana Llanos que lucharon por la abolición de la esclavitud en Caracas entre 1771-74; y Trinidad, Polonia y Juana Antonia que lucharon en Venezuela en 1796.

Candelaria Figueredo
Mariana Bracetti
Monumento a Gertrudis Bocanegra en Pátzcuaro, Michoacán

Preguntas generales

B. El desarrollo del feminismo latinoamericano

La independencia de la mayoría de los países latinoamericanos en el siglo XIX incorporó además la lucha por la igualdad, los derechos civiles y el sufragio de la mujer, teniendo dos vertientes: el feminismo intelectual y el feminismo obrero.

El feminismo intelectual

El feminismo intelectual tiene su origen en mujeres profesionales pertenecientes a los sectores privilegiados de la sociedad. Su labor se refleja en revistas, periódicos y libros, donde discuten temas relacionados con el feminismo o traducen obras procedentes de otros países. Reivindican la participación en la vida política, el derecho a la educación pública y laica, la educación sexual y el sufragio. Algunos de estos periódicos y revistas y sus fundadoras entre 1830 y 1893 son: La Aljaba (Argentina, 1830, Petrona Rosende de Sierra), La Mujer (Chile, 1893, Ana Roqué de Duprey), Vesper: Justicia y Libertad (México, 1901, Juana B. Gutiérrez de Mendoza), Femeninas (Colombia, 1916, María Rojas Tejada). Con respecto a las traducciones de importantes obras, destaca Martina Barros Borgoño que, en 1873, tradujo The Subjection of Women (Sobre la esclavitud de las mujeres) de Stuart Mill. Barros consideraba la educación como el camino para la libertad femenina.

Durante el siglo XIX surgieron un gran número de asociaciones y organizaciones feministas, como la Asociación Pro-Derechos de la Mujer (Argentina), el Comité Nacional de Mujeres (Chile), la Asociación Feminista Nacional (Colombia), la Alianza Femenina Ecuatoriana (Ecuador), la Evolución Femenina (Perú), la Sección Uruguaya de la Federación Femenina Panamericana (Uruguay) o la Agrupación Cultural Femenina (Venezuela).  

El primer país latinoamericano que consiguió el voto femenino fue Uruguay, en 1927. 

El feminismo obrero

Los grupos feministas intelectuales entendieron que la lucha no podía dejar de lado a las mujeres obreras, que también comenzaban a organizarse o se las ayudaba a hacerlo. Así, se fundaron escuelas para dar formación a las mujeres de clase obrera o se luchó para la defensa de los derechos de los menores de edad.

La lucha de la mujer trabajadora a través de asociaciones femeninas afines con el sindicalismo y la mujer obrera en las fábricas, el campo y otros ámbitos laborales estuvo marcada por la figura de Flora Tristán (1803-1844), nacida en París e hija de padre peruano. Tristán experimentó el abuso en el matrimonio y la explotación laboral lo que la avocó a la lucha por los derechos civiles y políticos de la mujer. Sus libros de denuncia, La situación de las mujeres extranjeras pobres en Francia y la emancipación de la mujer fueron exponentes de su pensamiento, donde unía el feminismo y el socialismo, es decir, la situación de la mujer se debía a la desigualdad social que sufría la clase obrera.

El feminismo obrero estaba asociado al sindicalismo a través de asociaciones como los Centros Femeninos en 1913 en la zona salitrera de Iquique, en el norte de Chile; o el grupo Rosa Luxemburgo de trabajadoras agrícolas, y la Alianza Femenina, fundados en Ecuador en 1920; o la Asociación Feminista Popular relacionada con la industria tabacalera en Puerto Rico, en 1920; la Federación Obrera Femnista de la Paz, en Bolivia, 1927; la Unión Laborista de Mujeres fundada en Cuba en 1928; el Centro Socialista Femenino; y la Alianza Uruguaya de Mujeres.  

Mención aparte, cabe destacar la presencia de numerosos partidos políticos femeninos de corta duración pero fundamentales, como Evolución Femenina (Perú, 1914), el Partido Feminista Nacional de Argentina (1918), o el Partido Cívico Femenino (Chile, 1922). Más recientemente, se fundó, dentro de una rica tradición de partidos femeninos en Chile, el Partido Alternativa Feminista (2019). 

"El violador eres tú"

En el contexto de las protestas en Chile contra el presidente Sebastián Piñera en 2019, y coincidiendo con el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, el colectivo Lastesis con base en Valparaíso protestó contra la violencia ejercida contra la mujer con el acto performativo "Un violador en tu camino". Rápidamente, la canción y el acto performativo llegó a otros países, convirtiéndose en un auténtico himno feminista. 

Un violador en tu camino, protesta del colectivo Lastesis. (Clica para ver.) 
"¿De dónde viene "El violador eres tú"?

Preguntas generales

C. Situación de la mujer en Latinoamérica hoy: retos y logros

Muchos estereotipos de género se han conseguido romper en los últimos tiempos, sin embargo, todavía no se ha garantizado la igualdad de derechos para las mujeres en muchos de los países latinoamericanos.

Retos

Los retos por enfrentar incluyen la brecha salarial, situada en el 19%, y en el 58% si se tienen en cuenta solo las profesiones mejor pagadas (ingeniería, arquitectura y el derecho). Se registran además, en la región, las tasas más altas de violencia de género y feminicidios, con una alta incidencia de embarazos adolescentes (entre 15 y 19 años). Tristemente, también destaca la región como mercado de explotación sexual y trata de mujeres y niñas.

Hoy en día, tanto en la casa como en la escuela, se establece una segregación ocupacional que divide los trabajos por géneros y los condiciona salarialmente. En muchos casos, las mujeres eligen carreras relacionadas con la salud (enfermería), la educación (alrededor del 80%) y las artes y humanidades (el 55%). Habiendo carreras como ciencias (68%) o ingeniería (100%) donde la presencia es escasa o nula. En el ámbito de lo doméstico, un estudio de OXFAM de 2018 reveló que una vez a la semana, las mujeres latinoamericanas realizan una jornada extra de trabajo no remunerado en tareas domésticas y cuidado familiar. Según un estudio del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile y Comunidad Mujer, es la mentalidad machista de la mujer y el concepto de la feminidad, lo que explica que la situación se resista a cambiar. La pandemia de Covid-19 en 2020 ha revelado que muchas mujeres que convivían con parejas abandonaron su trabajo remunerado para enfocarse en el trabajo doméstico y el cuidado de los hijos. Esto ha provocado un retroceso en los logros que la mujer había ganado con los años y que supondrá una dificultad volver a lo conseguido. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) la brecha salarial de la mujer en América Latina y el Caribe es del 17% por hora trabajada. En su Informe Mundial de Salarios 2018/2019, el Foro Económico Internacional (WEF en inglés) señalaba que los países con mayor brecha salarial eran Argentina (25%), Uruguay (23%), Chile (21.6%), México (20,2%), Paraguay (12,3%), Panamá (-0,7%), Ecuador (1,8%), El Salvador (4,6%), Costa Rica (7,8%) y Perú (9,2%).

Brecha salarial en México. 

En Latinoamérica se encuentran 14 de los 25 países con las tasas más altas de feminicidios del mundo. Según un informe del CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe), en el año 2018 se produjeron 3529 feminicidios en la región, en aumento con respecto al año anterior. Las tasas más altas se encuentran en El Salvador, Honduras, Bolivia, Guatemala y República Dominicana. Chile y Colombia tienen las tasas más bajas. Tristemente, el 98% de los casaos de violencia no llegan a los tribunales.

Feminicidios en Latinoamérica y España en 2018 por cada 100.000 habitantes.  Fuente: OIG-CEPAL.

Logros

Uno de los logros más recientes ha sido el derecho de la mujer a decidir sobre el aborto en Argentina. Una lucha de largo recorrido que en 2021 ha conseguido ser reconocida por el gobierno de Alberto Fernández. La "Marea verde", como se ha conocido al movimiento por el uso de pañuelos de este color como señal de identificación, ha recibido el apoyo de multitud de grupos regionales e internacionales que esperan que otros países latinoamericanos sigan su camino.

En 2022 se unió Colombia a la lista de países donde se permite el aborto dentro de plazos establecidos. Más info aquí. 
Clica en la imagen para más información.

Con respecto a la violencia ejercida contra el cuerpo de la mujer, hay que destacar finalmente que, en febrero de 2021, tras una larga lucha, el Estado de Perú fue condenado a indemnizar a más de 270.000 mujeres que fueron esterilizadas sin su consentimiento durante el gobierno de Alberto Fujimori (1990-2000). La mayoría de las víctimas eran indígenas, de origen muy humilde y hablantes de quechua. Muchas de estas mujeres sufrieron secuelas físicas y psicológicas, fueron estigmatizadas, e incluso fallecieron. 

En el ámbito político, aunque aún queda mucho por hacer, sin embargo hay que recordar que nueve mujeres han presidido países latinoamericanos: Violeta Chamorro (Nicaragua, 1990-1997), Mireya Elisa Moscoso Rodríguez (Panamá, 1999-2004), Michelle Bachelet (Chile, 2006-2010, 2014-2018), Cristina Fernández (Argentina, 2007-2015),  Laura Chinchilla Miranda (Costa Rica, 2010-2014). Los casos de Isabel Perón (Argentina), Lidia Gueiler Tejada (Bolivia), Rosalía Arteaga Serrano (Ecuador), Wanda Vázquez Garced (Puerto Rico) y Jeanine Áñez (Bolivia) merecen una mención aparte pues a pesar de haber sido cabezas de los Poderes Ejecutivos de sus respectivos países, ocuparon la primera magistratura de sus países de forma interina o provisional. Destacan también en el poder local, mujeres alcaldesas de grandes ciudades, como la reciente intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, o la alcaldesa de Bogotá, Claudia López Hernández, además abiertamente homosexual. 

Latinoamérica ostenta dos premios Nobel femeninos: Gabriela Mistral de Literatura (1945) y Rigoberta Menchú de la Paz (1992).

Gabriela Mistral.
Rigoberta Menchú.
La lucha sociopolítica de las mujeres latinoamericanas en el continente desde la década de 1930 hasta los años 80. (Clica para ampliar)

En el ámbito científico y técnico, la llegada del rover Perseverance a Marte es una muestra más de la capacidad de las latinas para ocupar puestos de gran responsabilidad y de gran preparación técnica ya que Diana Trujillo, ingeniera aeroespacial, inmigrante de origen colombiano, es la directora de vuelo de la misión. Parecería que las mujeres latinas tienen que dejar sus propios países para lograr el éxito laboral.

En las siguientes imágenes clicables puedes ampliar información sobre mujeres líderes en la ciencia y el arte

Y por último, cabe resaltar en 2021 la importancia de la incorporación al mundo de los superhéroes de la borinqueña, la primera superheroína latina, creada por el puertorriqueño Edgardo Miranda-Rodríguez. 

Preguntas generales

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