Itálica

EL TEATRO ROMANO

El teatro es al parecer la obra civil más antigua de Itálica, ya que se edificó en la antigua ciudad romana, la vetus urbs, y ahora se encuentra enclavado dentro del casco urbano de la actual ciudad de Santiponce. Se comenzó su construcción en tiempos del emperador Augusto (del año 30 al 37), más tarde se modificó y, posteriormente, Adriano lo adornó sustancialmente. Su uso se prolongó hasta el siglo III, cuando la decandencia de la ciudad hizo que quedara en desuso, y parte de sus terrenos se convirtieron en almacenes y corrales. El teatro fue redescubierto en 1970, y tras la reconstrucción de sus gradas, es utilizado en la actualidad para su propósito original. El teatro sigue las directrices básicas de este tipo de edificios romanos, ubicado en una zona de edificios públicos y en la ladera de un cerro para acomodar el graderio en él. Tenía un aforo para 3.000 espectadores.

ITÁLICA. EL ANFITEATRO

La zona abierta al público está formada por parte del barrio construido por Adriano en el primer tercio del siglo II, la Nova Urbs, un teatro situado en la Vetus Urbs y un parque moderno ubicado en torno al anfiteatro, construido también por Adriano. Las calles del barrio nuevo se caracterizan por su anchura y sus aceras porticadas.

Destaca por los edificios públicos, seis por lo que se conoce hasta ahora, y por las Domus, magníficas viviendas que forman un conjunto residencial lujoso repleto de mosaicos, estatuas y mármoles importados de Grecia y Mauritania. La ciudad se encuentra amurallada y se accede a través de una puerta flanqueada por dos torres rectangulares. Tanto el anfiteatro como el teatro están situados fuera del recinto amurallado.

LAS CASAS ROMANAS

En el esplendor de la Itálica de Adriano, se construyeron en la nova urbs casas espléndidas de importantes familias patricias del imperio, que forman un conjunto residencial lujoso repleto de mosaicos, estatuas y mármoles importados de Grecia y Mauritania. Además de seguir el esquema tradicional de la casa romana, con un patio interior del que luego derivarían los patios de las casas andaluzas, poseían la estética helenística predominante de la época con una rica decoración con pinturas sobre estuco o chapadas con ricos mármoles. No se han hallado huellas de insulae, sino sólo de la domus familiar romana. Las fachadas tenían soportales, para resguardar a los viandantes de las inclemencias del tiempo. La mayoría de las casas reciben su nombre por los mosaicos u ornamentaciones que aún se conservan.

COLLEGIUM DE LA EXEDRA

Las características de este edificio no nos aclaran la función concreta que tenía. Ha sido clasificado como vivienda (domus), ya que en parte tiene las características de éstas, pero su grandiosidad, ocupa todo un módulo de 4.000 m2, y la aparición de elementos indeterminados, hace que también se la identifique como un edificio semipúblico, posiblemente un colegio privado en el que además, vivían sus dueños. El edificio consta de dos espacios para hacer ejercicio: uno al aire libre y otro cerrado.

En su diseño interior podemos ver que tras el vestibulum de la entrada y las fauces se pasa al patio de distribución del edificio. Este peristilum es rectangular con una fuente curvilínea y alargada situada en su eje central. A sus lados se distribuyen numerosas habitaciones, cubicula, que conforman el conjunto de la domus en sí. Una de ellas tiene salida al exterior por la fachada derecha. Este edificio cuenta también con unas termas, unas letrinas y un gimnasio. Las termas cuentan con sus tres salas de agua caliente, templada y fría, más una sala para masajes. También podemos ver varios mosaicos.