Tras unos minutos pensando si seguirla o no, llegaron a la conclusión de seguirla. Vieron a la madre de Manuel entrando al cementerio y que se dirigía hacia la tumba del padre fallecido de Manuel. La madre de Manuel se plantó en frente de la tumba del padre, tiró de una palanca y la tumba se abrió. Antes de que entrara en la tumba los niños vieron que llevaba comida en la mano. A lo lejos vieron un vigilante, observaron que el vigilante se acercaba poco a poco, pero no le dieron importancia, ya que aún estaba muy lejos y se pusieron a hablar sobre lo que acaban de ver. De repente el vigilante los vio.