¡Hola, este es el Newsletter de Usted está aquí! Impulsado por la artista visual, museóloga y educadora Daniela Rodi.
Ya casi llegamos, ¡mañana es el encuentro! El viaje nos ha adentrado en algunas ideas y con este movimiento hemos descubierto y también creado. Las actividades de Usted está aquí se centrarán sobre ciertos temas o nodos significantes que nos servirán como brújula para navegar el encuentro. En esta cuarta entrega conversaremos sobre uno de ellos: Geopoéticas/ edupoéticas situadas. El arte de habitar.
Transitemos los últimos pasos antes de llegar.
No todas las construcciones son moradas.
Nuestro trabajo nace en el marco de lo vital, en nuestros hábitos y hábitats, pues es en nuestro mundo sensible donde se halla el acontecimiento: la poesía. La geopoética se nos presenta como la práctica de hacer o de abrir mundos, entendiendo por mundo aquello que emerge del contacto entre los seres humanos y la Tierra.
Habitar entre las cosas no es una misión fácil: lo sepamos o no, lo queramos o no, nos guste o no, nuestro cuerpo implica a las cosas, y nuestro comportamiento las incluye; ellas son nuestras cómplices, están en nuestras costumbres. Los espacios nos habitan mucho antes de que lleguemos nosotros a habitarlos.
Así, la experiencia del habitar en el marco de la geopoética rompe con las pautas de la observación, porque los cuerpos dejan de ver el fenómeno en la distancia, para vivirlo.
¿Dónde estamos situados aquí y ahora, cuál es nuestro presente y cómo imaginamos nuestro futuro?
Ejercicio: Potenciar nuestra individualidad, nuestra mirada, para transformar junto a otres el presente. Buena parte de las cosas con las que convivimos ya han sido descritas, inventariadas, fotografiadas, explicadas o registradas. Describamos todo lo demás: todo lo que por lo general no se percibe, aquello de lo que no solemos darnos cuenta, lo que carece de importancia: lo que ocurre cuando no ocurre nada.