Traslado y Soledad

Para rezar delante de la imagen

De Cirilo de Jerusalén (Catequesis 33, 8).

Buscamos saber con certeza dónde fue enterrado Jesús. ¿Estaba el sepulcro construido por las manos del hombre? ¿Acaso sobresalía de la tierra al estilo de los mausoleos reales? ¿Estaba construido el monumento con piedras asentadas? […] ¿Cómo era la puerta de aquel lugar en el que fue colocado nuestro Señor?

Un profeta dice: «Me encerraron vivo en la fosa y echaron piedras sobre mí». La piedra angular, la escogida, la preciosa, está depositada dentro de la roca por poco tiempo; roca de escándalo para los judíos, piedra de salvación para los creyentes. Fue plantado en la tierra el Árbol de la Vida, para que la tierra maldecida alcanzara la bendición, para que los muertos fueran liberados.

De Juan Crisóstomo (Homilías sobre el Evangelio de Mateo, 88, 2-3).

¡Qué valor, qué amor el de estas santas mujeres, que se quedaron allí pegadas! ¡Qué magnificencia con su dinero hasta en la muerte del Señor! Imitemos nosotros a estas mujeres, y a María.

No abandonemos a Jesús en momentos de prueba. Ellas gastaron tanto con el que ya había muerto, y por Él expusieron sus vidas. Nosotros, empero – otra vez tengo que repetir lo mismo-, ni le damos de comer cuando tiene hambre, ni lo vestimos cuando está desnudo. Lo vemos que nos pide y pasamos de largo. En verdad, si lo vierais en persona, no habría quien no se desprendiese de lo que tiene.


¿Cómo surgió la Hermandad?

Hay ya indicios de la Hermandad en 1665. Lo que sí se conoce es que, en el siglo XVIII, se venera en la iglesia de San Juan del centro la ciudad a una Dolorosa de rodilla al pie de la cruz, con sus brazos abiertos y mirada de dolor perdida en el firmamento. Su iconografía es la de la Madre de Dios en el séptimo dolor en su soledad por la muerte de su hijo. Esta magnífica talla policromada y estofada se atribuía popularmente al escultor granadino, aunque afincado en Málaga, Pedro de Mena, ya que las hechuras barrocas de la Virgen tienen las características de la escuela granadina, que tanto influyó en nuestra ciudad. Estudios posteriores dan la autoría de la imagen al escultor local y gran maestro del barroco Fernando Ortiz, fiel seguidor de Mena.

Independientemente del creador de la escultura, ya que no se tiene documentación que demuestre quién la realizó, lo que queda claro es que la Dolorosa es una de las grandes tallas ejecutadas en el barroco en la ciudad de Málaga.

Posteriormente la Virgen recibe culto en el convento de la Trinidad. En el siglo XIX la trasladan a San Pablo, que por aquel entonces era una ermita perteneciente a la iglesia de los Santos Mártires y que estaba situada donde se encuentra el templo actual. En el año 1833 el obispado la convierte en parroquia, para facilitar a los vecinos del barrio todos los trámites de bodas, bautizos y defunciones.

No se sabe exactamente cuando llega la Dolorosa a la nueva parroquia, pero lo que sí está documentado en el Archivo Municipal, en la sección de hemeroteca, es que el 18 de abril, Viernes Santo del año 1851, Nuestra Señora de la Soledad sale por primera vez en procesión por las calles del barrio desde San Pablo (todavía no estaba el templo actual construido), hasta la iglesia de la Trinidad, donde se le reza el salmo del Viernes Santo, volviendo a su parroquia por calle Mármoles. Esta procesión se realiza durante tres años consecutivos.

A finales del siglo XIX se derriba la ermita para construir la actual iglesia, de amplias dimensiones, para poder cubrir las necesidades que trae consigo el gran crecimiento del barrio. Durante los años que duró la obra la imagen de Nuestra Señora, al igual que todo lo que había en la antigua ermita, pasó provisionalmente al convento de la Aurora María, hasta que en 1891 se finaliza el nuevo templo.

¿Cuál es su historia?

En el año 1918 se reorganiza la Hermandad por don José Peña Munsuri, ayudado por un grupo de comerciantes en el que hay muchos panaderos, ya que por aquel entonces era la ocupación principal del barrio. La labor desarrollada por esos fervientes hermanos consigue los frutos deseados y en el año 1921 se convierte en una de las doce Hermandades que firman el acta de la fundación de la Agrupación de Cofradías de Semana Santa. En ese mismo año sale como Hermandad agrupada.

Llama la atención el magnífico y completo cortejo procesional, nazarenos con túnicas azules, bordadas en plata, capas blancas y sandalias sobre calcetas blancas; otra característica es la cruz-guía que recuerda la estética neogótica del templo donde la Hermandad tiene su sede. Tras ella, una escuadra romana, que cada Viernes Santo acompaña a la Hermandad.

Desde el año 1921 hasta el 1931 ininterrumpidamente la Virgen de la Soledad tiene su cita con Málaga, saliendo del convento de la Aurora María, puesto que el trono de esta época era más ancho que las rejas de la parroquia de San Pablo.

En 1928 S.A.R el infante D. Jaime presidió la procesión en la noche del Viernes Santo, concediéndole ese mismo año el título de Real, que ostenta la Hermandad.

En el año 1931, en la madrugada del 11 al 12 de mayo, un grupo de violentos derribó las puertas de la parroquia San Pablo arrasando y quemando todo lo que allí dentro se veneraba. Dicen que arrastraron la imagen la Virgen desde su camarín hasta la ribera del río Guadalmedina, donde la tiraron, a la altura la misma puerta de la Aurora María, para romperla y así poder quemarla con mayor facilidad. No pudieron salvarla. Con ella desaparece prácticamente todo, pudiéndose salvar tan solo la cruz-guía y dos mazas pequeñas.

La devoción y entusiasmo de esos cofrades no se pierde y se crea La Pía Unión de devotos de la Virgen de la Soledad, con autorización canónica, teniendo como titular una fotografía de gran tamaño de la desaparecida imagen. En el año 1934 se encarga al escultor granadino José Martín Simón una talla recreada en la antigua Virgen. Con el inicio de la Guerra Civil, en 1936, los hermanos ocultan la nueva imagen en el subterráneo de una casa del barrio. Cuando las turbas llegaron a San Pablo tan solo encontraron el altar de la imagen vacío. En 1937 se vuelve a reconstruir la Hermandad, rescatando la obra que realizó Martín Simón, escondida durante todo ese tiempo, pero el material con el que se había labrado la escultura no era madera noble y la humedad realizó los estragos que el fuego no pudo hacer, quedando totalmente destruida.

Una familia de la Hermandad, los señores de Ledesma y Ximénez de Enciso, ceden una Dolorosa particular, obra del escultor malagueño del siglo XIX Gutiérrez de León, apodado «el viejo». En el Viernes Santo de 1939 procesiona por primera vez hasta la Semana Santa de 1944. Actualmente dicha imagen se puede contemplar en el Museo Casa-Hermandad, en su salón de tronos. Sin embargo, se seguía añorando la iconografía de la desaparecida en 1931.

Eso hace que los hermanos en 1940 encarguen una nueva talla a un joven escultor local, Pedro Moreira López. Era devoto de la Soledad y guardaba en su mente cada pliego de su manto, sus brazos abiertos, las manos extendidas y esa mirada de madre desgarrada por la muerte de su hijo.

La Junta de Gobierno de la Hermandad aprueba el boceto que presenta Moreira, pero la falta de medios económicos imposibilita la realización de la obra. Hasta que en el año 1944 se da el visto bueno para que Moreira comience a trabajar.

El 19 de marzo de 1945, con gran expectación, se abren las puertas de San Pablo para poder ver a la Dolorosa presidir el altar mayor.

La Hermandad vuelve poco a poco a recuperar su esplendor, y en 1949, tras solicitar el preceptivo permiso al obispo de la diócesis, don Balbino Santos Olivera, se incorpora la advocación del Santo Traslado de Cristo, encargando la obra del grupo escultórico otra vez a Pedro Moreira López. Este presenta una iconografía de Jesús llevado en un sudario camino del sepulcro por José de Arimatea, José de Nicodemus y un pastor sacado de los apócrifos, llamado Stefanus. El grupo es bendecido el 19 de marzo de 1951, saliendo en esa Semana Santa.

¿A qué escena del Evangelio hacen referencia sus imágenes titulares?

El grupo escultórico representa el momento del traslado de Nuestro Señor Jesucristo al sepulcro, sacado de los textos evangélicos de San Mateo 27, 59-61; San Marcos 15, 46; y San Juan 19, 38-42. Nuestra Señora de la Soledad representa a la Soledad de María al pie de la cruz, donde pende un sudario que hace referencia a la bajada del cuerpo de Cristo desde el madero.

Sus manos vacías y sus brazos abiertos imploran una súplica que se pierde en el firmamento. Representa el momento que hay entre el sexto y séptimo dolor de la Virgen María. A su vez, este es el intervalo de la pasión y muerte de Cristo entre las estaciones XIII y XIV del Viacrucis: Jesús, después de ser descendido de la cruz, es envuelto en una sábana limpia y trasladado al sepulcro.

La actual imagen de Nuestra Señora de la Soledad es obra de Pedro Moreira, y fue bendecida el 19 de marzo de 1945 en la parroquia San Pablo. Es de talla completa policromada en un verde azulón y ricamente estofada en oro, recordando la técnica utilizada en el Barroco en los siglos XVII y XVIII. La parte interior de su tallado manto es burdeos y, por todo el filo del manto, lleva un encaje de hilo en oro.

La imagen de Cristo en su Santo Traslado también es obra de Pedro Moreira, y fue bendecida el 19 de marzo de 1951 en la misma parroquia. Junto a Él, Moreira completó el grupo escultórico ya citado.

En el año 2011 la Hermandad acomete un cambio estético y encarga al imaginero Israel Cornejo la realización de un nuevo grupo escultórico que complete al mismo tiempo la escena del Santo Traslado de Jesús. Se incluyen las figuras de María Magdalena, María de Cleofás y María Salomé, que son de vestir.

¿Qué particularidades tiene?

  • Desde el año 1958 se ha venido realizando un piadoso Viacrucis por las calles del Barrio de la Trinidad, en la madrugada del Viernes Santo. En los últimos años se hace durante la noche del Viernes de Dolores. En el transcurso del mismo son leídas las catorce estaciones de la Pasión de Cristo, meditadas por miembros de la Junta de Gobierno y cofrades allegados a la Hermandad.

  • Es la única Hermandad en Málaga que incorpora escuadra romana, la cual está formada por Capitán, Teniente, “Senatus” y 9 Soldados de Tropa.

  • Los nazarenos de ambas secciones mantienen la vestimenta antigua de la Semana Santa malagueña, con sandalias negras, del mismo estilo que las que lleva Ntra. Señora de la Soledad.

  • Una particularidad del trono del Santo Traslado son los cuatro pebeteros que custodian al Señor. La función de dichos pebeteros es la de aromatizar con incienso el paso del Santo Traslado. Este trono tiene cuatro cartelas con las imágenes de San Pablo, la Santísima Trinidad, la resurrección del Señor y la ascensión a los cielos, y cada una de ellas está flanqueada por escenas de la pasión del Señor: el beso de Judas, el prendimiento, la flagelación, el Ecce Homo, Jesús despojado de sus vestiduras o la lanzada en la Cruz. El trono es, en definitiva, una catequesis profunda y rica en imágenes sobre el Misterio Pascual.

  • La cruz guía que encabeza la procesión cada Viernes Santo es de estilo neogótico y data de principios del siglo XIX, siendo una de las más antiguas de la ciudad de Málaga.

Para más información, aquí tienes la página web de la Hermandad: http://trasladoysoledad.es/