“El día que lo iban a matar…” es la frase que utiliza Márquez para empezar esta novela fascinante, y no es por casualidad. La muerte de Santiago Nasar, el protagonista del libro, es el evento más importante de la trama y se menciona mucho a través del libro. Sin embargo, el libro no solamente se enfoca en esta muerte ficcional para entretener al lector. Todo el libro, y la muerte de Santiago específicamente, forman un dispositivo literario por lo cual Márquez critica a la sociedad por la pasividad e hipocresía que existen en cuanto a la justicia.
Sobre todo, el asesinato de Santiago Nasar se destaca de este libro porque el autor utiliza un estilo de escribir no lineal. El libro empieza al día del asesinato con una descripción detallada del protagonista y su vida, pero rápidamente salta a otros períodos. Por ejemplo, después de que se entera el lector de que mataron a Santiago en el primer capítulo, se vuelve al fondo para desarrollar más los motivos de los asesinos y explicar las condiciones que les permitían cometer su crimen. Luego se da más información sobre el tiempo después del homicidio y el libro sigue así. El uso de tiempo no lineal tiene dos propósitos. Primero, incide al lector de modo que haya más incertidumbre. Por otra parte, el efecto más sobresaliente es que la muerte de Santiago no solamente se centra en el libro como un tema, sino que se centra cronológicamente dentro del libro. Es decir, el autor da un punto de vista imposible que crea una vista panorámica del evento. Por ejemplo, cuando finalmente se describe el asesinato de Santiago, la descripción tiene tantas detalles que dura más de una página. La combinación de las emociones como los gritos y la sensación de adrenalina que mencionan los asesinos, y la duración de la descripción, hace que el lector se sienta como si fuera viendo el evento ocurriendo a cámara lenta. Así, el autor utiliza este método para reforzar todos los momentos en que la muchedumbre tuvo la oportunidad de parar el crimen.
Con los efectos mencionados, es claro que Márquez quiso hacer una declaración más amplia sobre la sociedad. Desde este punto de vista, la justicia es un punto focal. Por un lado, hay asesinos que le matan a Santiago para obtener venganza por lo que le hizo él a su hermana menor. Por otro lado, la justicia se considera en cuanto al sistema de justicia y lo que se hace para prevenir el crimen y castigar a los asesinos. Generalmente, se puede decir que Márquez explora la conexión entre el honor y la venganza, con tal de que los gemelos Vicario no sienten mucha culpabilidad por el crimen porque creen que el honor les absuelve, pero las otras personas que esperaban a la llegada del obispo en vez de prevenir el crimen se sienten responsables. Además, cuando los gemelos Vicario están en el cárcel, se discuten las condiciones miserables del calabozo. Una cuestión ética relevante es ¿qué debe ser el propósito de un sistema de justicia? En el pasado la justicia vigilante y los asesinatos para preservar el honor eran frecuentes, mientras hoy en día hay otras ideas y los sistemas suelen estar más enfocados en la rehabilitación, en lugar de castigo. Sin embargo, el propósito principal de los cárceles y el sistema de la justicia no es para castigar a los criminales, sino para proteger a las los ciudadanos y para asegurar que los criminales no pueden vivir en el mismo lugar que el resto de la gente, y el autor utiliza el contraste de esta imagen para satirizar al sistema de justicia.
Finalmente, un tema importante es la pasividad del mundo y la tendencia a la inacción cuando hay demasiada confusión. Así, Márquez tiene otro efecto en este libro en cuanto a su estilo de escribir porque se crea un sentido de desorden que simula lo que se sentiría en la situación de los personajes del libro. Coincidentemente, muchas veces el desorden del mundo afecta a la sociedad a condición que cuando hay caos la tendencia hacia la inacción y la pasividad pueden surgir. A lo largo de esta historia, muchos personajes revelan que eran conscientes de que los hermanos Vicario iban a matar a Santiago Nasar. Por ejemplo, se mencionan que hay muchas personas que saben y cuentan a otras sobre lo que va a pasar, pero en realidad nadie hace mucho para prevenirlo. Este aspecto demuestra que a veces la conciencia sola no basta para la moralidad y hay que tomar una acción para prevenir las injusticias.
En conclusión, Márquez utiliza una variedad de dispositivos literarios y una trama única para llamar la atención hacia algunos problemas que existen dentro de la sociedad en cuanto a la justicia. El libro se enfoca en la muerte de Nasar y ya que se sabe que nadie hace lo que es necesario para cambiar el destino de Nasar, Márquez muestra todos las oportunidades que la gente tiene para lograr el cambio positivo en el mundo. Además, él satiriza la hipocresía de una sociedad religiosa que está tan enfocada en la llegada del obispo que eviten de prevenir un asesino. Por lo tanto, aunque los eventos de “Crónica de una muerta anunciada” son sencillos, el libro en total tiene un mensaje complejo e importante sobre la sociedad que todavía mantiene su relevancia hoy en día.