¿QUÉ PODEMOS HACER? 

¿Qué podemos hacer en nuestro día a día?

Ahora que sabemos mucho más sobre el cambio climático y sobre las causas y las graves consecuencias que conllevan el deshielo de los polos, indaguemos sobre qué podemos hacer nosotros en nuestro día a día para intentar paliar los daños. 

Es evidente que gran parte de la población aún no está concienciada de la importancia de los pequeños actos individuales que cada uno realizamos, ya que son estos los que juntos, marcan una gran diferencia. La unión de todas estas pequeñas acciones, que se convierten en rutinas una vez que las tenemos asimiladas,  harán que gran parte del daño que está sufriendo el planeta debido a nuestra presencia pueda ser paliado. 

A continuación os hablaremos un poco sobre algunas de las sencillas acciones que podemos realizar en nuestro día a día que pueden ayudar notablemente al planeta, siempre y cuando todos las llevemos a cabo. 

 NUESTRA HUELLA ECOLÓGICA

LA REGLA DE LAS "TRES ERRES" Y EL TRANSPORTE PÚBLICO

EL USO DE ENERGÍAS RENOVABLES

LA IMPORTANCIA DE LA EDUCACIÓN AMBIENTAL

NUESTRA HUELLA ECOLÓGICA

Seguramente este sea un concepto desconocido para gran parte de la población. Sin embargo, es muy importante ser conscientes del tamaño de nuestra huella ecológica ya que nos hace ver el gran impacto que tienen nuestras acciones en el planeta. Y os preguntaréis, ¿qué es la huella ecológica? Pues simplemente es la medida del impacto de las actividades del ser humano sobre la naturaleza y está representada por la superficie que sería necesaria para producir los recursos y absorber los impactos de dichas actividades. Es esencial que sepamos que la comida que comemos, la energía que consumimos, el modo de transportarnos y, en definitiva, la mayor parte de acciones de nuestra vida diaria conllevan emisiones de CO2. 

Por si os habéis quedado con la curiosidad sobre cuál es el tamaño de vuestra huella ecológica, os dejamos un enlace a continuación para que la calculéis...

https://footprint.wwf.org.uk/#/ 

LA REGLA DE LAS "TRES ERRES"

Seguramente todos hallamos escuchado alguna vez la famosa regla de las tres erres de la ecología. Estas provienen de tres palabras que constituyen los métodos más esenciales que debe seguir la población para proteger al planeta. Se trata de REDUCIR, RECICLAR Y REUTILIZAR, enclaves fundamentales para intentar remediar las acciones del ser humano. 

Cuando hablamos de reducir, nos referimos a moderar el consumo. Hoy en día nos encontramos en una sociedad que es plenamente consumista, lo que conlleva la producción de gran cantidad de contaminantes para llevar a cabo la elaboración de todos los productos que compramos. Además, al producir más, aumentan también los desperdicios que producimos. 

Al hablar de reciclar, nos referimos a separar la basura que generamos, para así facilitar la potencialidad de volver a utilizar esos materiales para la fabricación de productos que respetan al medio ambiente.

Por último, reutilizar se basa en usar los objetos el mayor número de veces posible, para reducir la compra de nuevos productos y así los residuos producidos. 

EL TRANSPORTE PÚBLICO

Como bien sabemos, el uso de transporte público es una de las principales medidas que podemos tomar que puede tener grandes repercusiones en el futuro del planeta ya que reducimos la gran cantidad de emisiones que se expulsan a la atmósfera. 

Para que podáis ser conscientes de la gran cantidad de energía necesaria para el transporte en la actualidad, pincha en el botón y accederás a los datos del IPPCC.

Claramente la aplicación es una gran vía de concienciación para este gran problema, aunque todo esto se compensa aún más con la educación ambiental y el conocimiento sobre las energías renovables.

LA EDUCACIÓN AMBIENTAL

Hoy día es fundamental una mínima educación ambiental, despertándonos esta un sentimiento de respeto hacia todo lo que nos rodea. En definitiva tener una buena educación ambiental va a ser decisivo para nuestro futuro, ya que nos proporcionará el suficiente conocimiento para saber que nuestras acciones pueden ir mucho más allá de lo que podemos llegar a pensar, ya que todo está conectado de algún modo.

Por confuso que parezca todo en el medio ambiente está intercomunicado. Esto es un claro reflejo del efecto mariposa, ya que un pequeño cambio en un ecosistema puede afectar a este y a los de su alrededor. 

Ejemplos de esta afirmación son que el deshielo de los polos no sólo afectaría a la subida del nivel del mar, si no también a la temperatura terrestre por la destrucción del efecto Albedo, el cuál reflejaba gran parte de la radiación solar, retroalimentándose.

Aunque la educación ambiental es una buena forma de educar a las nuevas generaciones sobre la importancia de sus actos, la única manera de parar el cambio climático a largo plazo son las fuentes de energías renovables.

ENERGÍAS RENOVABLES

Otro gran ejemplo, sobre el deshielo de los polos sería la destrucción de las corrientes oceánicas, algo que no está del todo asegurado pero que podría llegar a pasar, siendo esto una gran catástrofe.

Esto supondría el enfriamiento de los océanos, ya que las corrientes de calor colapsarían con el agua dulce de los polos, siendo menos densa esta que la marina. Las especies marinas también se verían afectadas, además de los países costeros.

Las energías renovables hoy en día están en un fuerte desarrollo, dándonos cuenta de la importancia que tienen, y con el monopolio de combustibles fósiles mundial. En el futuro la producción de energía (para 2040 en adelante) será en el 60% de energías renovables, aunque esto dependerá de la zona, ya que muchas zonas del planeta no tienen la capacidad de producirla por distintas causas, haciendo uso por ejemplo del gas natural.

Teniendo en cuenta todas la fuentes de energías renovables que se nos presentan, algunas de estas serán las predominantes en un futuro, como son la energía solar fotovoltaica, energía solar térmica, energía hidráulica o hidroeléctrica y eólica, sin contar la nuclear, la cuál ya está muy presente hoy día, con su gran problema de sus residuos radioactivos.