Las máquinas simples son instrumentos o herramientas que nos ayudan a realizar trabajos de una manera más fácil, ya sea porque aumentan la fuerza que se aplica en un inicio o porque permiten cambiarla de dirección.
El funcionamiento de todas estas máquinas está explicado por la ley de las máquinas simples. Que en pocas palabras dice que para poder aplicar una menor fuerza, tiene que aumentar la distancia.
A pesar de que estas máquinas facilitan las tareas, no son capaces de disminuir los trabajos realizados, ya que a pesar de que pueden agregar una fuerza extra o cambiarla de dirección, siempre se tiene que sacrificar algo. En este caso es la relación fuerza-distancia que son inversamente proporcionales. Es decir cuándo se ejerce una fuerza menor se incrementa la distancia de aplicación y si la fuerza es mayor la distancia es menor.
Por ejemplo:
Para levantar un objeto a un piso con mayor altura es necesario aplicar la fuerza justa para levantarlo y subirlo “mayor fuerza – menor distancia“
Pero si en vez de levantarla directamente ponemos un plano inclinado utilizamos una fuerza menor pero en mayor distancia.