El proyecto MobileBE (Mobile Basic Education for Adults) fue aprobado por la agencia NABIBB (German National Agency for Erasmus Plus) en julio de 2017, con un presupuesto de 384.965€, la duración del mismo se extiendió desde 2017 hasta 2020 y lo formaron socios de Alemania, Austria, Bulgaria, Italia, Francia, Suecia y España.
El objetivo principal consistia en diseñar y desarrollar estrategias, métodos y modelos didácticos para ofrecer educación en competencias básicas de comunicación, matemáticas y TIC a personas adultas con dificultades para el acceso y/o seguimiento de métodos tradicionales, ya sea por razones físicas, motivacionales, de baja cualificación, desconocimiento de las oportunidades existentes, conciliación laboral o personal u otras.
Durante el primer año del proyecto se desarrolló una fase de debate que permitió identificar tres grupos de atención prioritaria: jóvenes sin formación ni empleo, mayores de 65 años y personas sin cualificación. A partir del segundo año, cada socio desarrolló sus proyectos piloto con nuevas metodologías aplicadas a los grupos seleccionados. El CPEPA Ricardo Sola desarrolló dos líneas, una basada en el uso de Tablet y un foro de comunicación docentes-alumnado, la segunda línea está basada en el portafolio como método de evaluación. En este tercer año se continuaron aplicando estas metodologías y rse recogieron datos para analizar los resultados una vez probados los proyectos piloto. De igual manera, el último año fue el momento de la difusión del proyecto a través de diferentes medios y eventos.
Cristina Mediel, directora del centro, indicó lo siguiente sobre el proyecto: "Trabajar en un proyecto de tal envergadura nos ha proporcionado una amplia visión de nuestro centro y la labor que venimos desarrollando diariamente. El claustro ha tenido que enfrentarse a ciertas dificultades, como la barrera que puede suponer tener que elaborar todos los documentos en lengua inglesa (en especial por la terminología técnica) o la burocracia que hubo en un primer momento, ya que supuso un trabajo extra a nuestras funciones habituales. Sin embargo, a pesar de estos pequeños handicaps el proyecto Erasmus ha influido positivamente en el equipo docente a quienes ha ayudado a salir de la cotidianeidad, compartir experiencias, adquirir una formación práctica y reflexiva, investigar en las aulas para obtener una visión crítica de la realidad diaria. También podemos afirmar que ha influido en el alumnado ya que ha favorecido la coparticipación y motivación con nuevas actividades, además de concienciar de la pertenencia a un único centro a pesar de la dispersión de las aulas locales"