Las edificaciones de Chichén Itzá muestran un gran número de elementos arquitectónicos e iconográficos que algunos historiadores han querido llamar mexicanizados. Lo cierto es que es visible la influencia de las culturas provenientes del altiplano mexicano, y la mezcla con el estilo Puuc, proveniente de la zona alta de la península, de la arquitectura clásica maya. La presencia de estos elementos procedentes de las culturas del altiplano fueron concebidas hasta hace algunos años como producto de una migración masiva o conquista de la ciudad maya por parte de grupos toltecas. Sin embargo, estudios más recientes sugieren que pudieron haber sido la expresión cultural de un sistema político muy extendido y prestigioso durante el posclásico temprano en toda Mesoamérica.
Chichén Itzá estaba dividida en dos areas muy importantes, también las ruinas están divididas en dos grupos (Chichén viejo y Chichén nuevo).
Chichén Viejo, fue fundado durante el año 400 A.D. por los mayas y gobernado por los sacerdotes, la arquitectura de este periodo es caracterizada por varias presentaciones de su dios Chaac (dios maya de la lluvia) La parte antigua de la ciudad posee varios ejemplos de la arquitectura y decoración Puuc.
Chichén Nuevo, empezó durante el año 850 A.D. con la llegada de los Itzá del centro de México. Fue reconstruido por los Itzá y caracterizado por su dios Kukulcán. (La serpiente emplumada) Tradicionalmente los Mayas poseían sus propios dioses, sin embrago cuando los Itzá invadieron Chichén Itzá ellos introdujeron otro dios de los toltecas. Los toltecas lo llamaban Quetzalcóatl (La serpiente emplumada) El nombre Kukulcán fue dado por los Mayas. Durante 1150 A.D. otro grupo Itzá tomo control de la ciudad y gobernó por 150 años hasta que la ciudad fue conquistada por los habitantes de la ciudad de Mayapan.