El nuevo boletín semestral del Ministerio del Interior revela un aumento preocupante de estafas y extorsiones, que según Diego Sanjurjo, gerente del AECA, representan una “criminalidad distinta” que el país debe aprender a enfrentar. Las estafas pasaron de 1.333 denuncias en 2013 a más de 31.000 en 2024, aunque se estima que solo una de cada diez se denuncia. Además, apenas una de cada 100 termina en imputación.
El impacto económico de estas estafas ya supera al de otros delitos, pero su carácter no violento y digital dificulta la respuesta del sistema. Sanjurjo abogó por nuevas campañas de prevención, fortalecimiento de la unidad de cibercrimen y reformas en la forma de denuncia e investigación.
También alertó sobre la extorsión como fenómeno emergente y “puerta de entrada del crimen organizado”, y adelantó que se incorporarán indicadores sobre lavado de activos, corrupción y trata en próximos informes. Según Sanjurjo, Uruguay necesita “aggiornarse” para no quedar atrás frente a un crimen que evoluciona más rápido que el Estado.
Fuente: Montevideo Portal