Es un método de administración de medicamentos que consiste en la inyección de una sustancia directamente en el músculo, generalmente en el glúteo, el deltoides o el muslo.
Se utiliza comúnmente para administrar medicamentos como vacunas, analgésicos, antimicrobianos y algunos anticonceptivos.
Es la vía adecuada para algunas sustancias irritantes, sustancias oleosas y volúmenes moderados de líquidos.
La inyección en esta zona es menos dolorosa debido a que los músculos poseen menor número de terminaciones nerviosas.
No sufre perdida de efecto terapéutico por la actividad gástrica.
Es indiferente del estado del paciente, es decir, no impide su administración el hecho de que el paciente esté inconsciente o no sea colaborador
Dependiendo del lugar de administración la velocidad de absorción puede ser variable.
Existe riesgo de lesión de vasos sanguíneos y nervios.
Cada zona de inyección tiene unos limites en cuanto a la cantidad de volumen a administrar.