La educación física es aquella disciplina que abarca todo lo relacionado con el uso del cuerpo humano, ayudando a la formación integral de cada ser humano.
Actualmente, la Educación Física se considera como área obligatoria según el Ministerio de Educación y Cultura dentro del sistema educativo. Se ha constituido como disciplina fundamental para la educación y formación integral del ser humano, especialmente si es trabajada en edades tempranas, ya que permite a los alumnos desarrollar destrezas motoras, cognitivas y afectivas, esenciales para su vida diaria y como proceso para su proyecto de vida.
A través de la Educación Física, los alumnos expresan su espontaneidad, fomentan su creatividad y sobretodo permite que se conozcan, se respeten y se valoren a sí mismos y a los demás. Por ello, es indispensable la variedad y vivencia de las diferentes actividades en el juego, lúdica, recreación y deporte para implementarlas continuamente, sea en clase o mediante proyectos lúdico-pedagógicos.
Vértebras torácicas
Vértebras cervicales
Vértebras lumbares
Los músculos más relevantes son aquellos que necesitamos para movernos y realizar las acciones básicas de la vida diaria, como pueden ser andar, cargar peso o mantenernos erguidos.
Una de las necesidades que el hombre tiene, para el mantenimiento de una buena salud, tanto física, como mental y espiritual, es la práctica del ejercicio físico. Así que vamos a darnos un paseo, por la Historia de la Educación Física, a fin de entender y conocer su evolución a través del tiempo
El sistema óseo es el conjunto de huesos que conforman el armazón del esqueleto de un animal. El sistema óseo humano, también llamado esqueleto humano, es la estructura viva de huesos duros cuya función principal es la protección y apoyo a los órganos vitales y la generación de movimiento o no en un el cuerpo.
El esqueleto humano realiza varias funciones importantes. Protege los órganos internos, soporta y da forma al cuerpo, y permite el movimiento. Además, la médula de algunos huesos es el sitio de producción de las células sanguíneas.
El esqueleto humano se divide en dos partes: el esqueleto axial y el esqueleto apendicular.
El esqueleto axial está compuesto por:
el cráneo, que protege el cerebro y da soporte a la estructura de la cara
la columna vertebral (espina dorsal), que rodea y protege la médula espinal y da soporte a la cabeza
la caja torácica (costillas), que rodea y protege los órganos dentro del pecho (incluyendo corazón y pulmones)
El esqueleto apendicular está compuesto por:
la cintura pectoral (hombros)
los miembros superiores e inferiores (brazos y piernas)
la cintura pélvica (huesos de la cadera)