Somos el 25% del PDI de la UPV y pese a tener capacidad para impartir el 30% del POD de la misma, representamos menos del 6% de la masa salarial.

La UPV reconoce a todo el PDI las horas de trabajo para la preparación de materiales, gestión docente, evaluación, etc menos al PDI asociado que solo tiene horas asignadas para hacer docencia y tutorías. Lo mismo sucede con la investigación, que tampoco se nos reconoce.

Además, cada año nos hace firmar un nuevo contrato, pese a que muchos de nosotros llevamos más de una década trabajando en esta Universidad, lo que nos impide poder participar en múltiples proyectos de investigación. La Universidad tampoco ofrece plazas para la estabilización del PDI asociado.

En definitiva, hemos pasado a ser mano de obra barata, elástica y flexible (profesionales de reconocido prestigio para impartir cualquier asignatura según las necesidades y en el horario que no quiere el resto del profesorado). Sin un salario digno y sin ninguna oportunidad de promoción.

No olvidemos que un trabajo mal pagado es un trabajo mal considerado y así es como nuestra UPV nos valora.

Las reivindicaciones que nuestro colectivo plantea se recogen a continuación: