C
Dibujo contemporáneo de Colombia y Cuba
En el vasto universo del arte, el dibujo se erige como una de las formas más versátiles de expresión. Definido como la técnica de crear figuras o imágenes a través de líneas, este medio ha trascendido su uso tradicional para convertirse en una plataforma de innovación y reflexión. En esta exploración, el Proyecto C se presenta como una iniciativa audaz que une a artistas de Colombia y Cuba, países con los que Montenegro Art Projects (MAP) ha trabajado por más de una década. Dos naciones con una rica tradición cultural y artística que, a pesar de su separación geográfica, encuentran un terreno común en el lenguaje del dibujo.
El grafito, cuya fórmula molecular es C, se convierte en un símbolo de conexión y creatividad. Este mineral, bautizado por el mineralogista alemán A.G. Werner en el siglo XVIII, proviene del término griego "graphein", que significa escribir. Así, el Proyecto C utiliza el grafito como un hilo conductor que entrelaza las obras de diversos artistas, quienes, mediante el uso de puntos, líneas, planos y texturas, reimaginan el potencial del dibujo en el contexto contemporáneo.
C presenta una variedad conceptual y formal que abarca desde el lenguaje figurativo hasta la abstracción. Este proyecto no solo redefine el dibujo como boceto, sino que lo emancipa hacia una diversidad estética característica de estos tiempos. C también busca conexiones entre los motivos artísticos de los participantes, demostrando que, más allá de las distancias geográficas, existen elementos conceptuales comunes que los unen.
Exploraciones de la Naturaleza y el Territorio.
Glenda Salazar (Cuba, 1982), Antonio Espinoza Fruto (Cuba, 1974), Frank Mujica (Cuba, 1985), Diego Mendoza Imbachí (Colombia, 1982), Lucas Gallego & Carolina Borrero (Colombia 1980-1988), Yuliana Miranda (Colombia 1994) comparten un interés en el arte ligado a la naturaleza, explorando temas medioambientales y sociales:
Glenda Salazar concibe el dibujo como una forma de absorber y recrear la realidad, evocando la labor de los primeros botánicos al preservar y difundir especies olvidadas.
Antonio Espinosa utiliza el claroscuro para llevarnos más allá del virtuosismo realista. En su serie Aguas territoriales, el mar por un lado en su condición de espacio infinito, está abierto a la posibilidad de explorar más allá del horizonte visible. Por otro lado, en la serie Fragmentos de una ciudad pintoresca, se advierte una versión contemporánea del álbum pintoresco de la isla de Cuba del grabador francés Federico Mialhe.
Frank Mujica, su obra gira en torno al paisaje, su investigación se plantea concientizar determinados fenómenos del entorno y estructurar una singular forma de interpretarlo. Con el uso del dibujo como medio, establece conexiones con la tradición, trabaja con la idea del pasado, con esos referentes encriptados en nuestras mentes que nos permiten entender mas cómodamente el mundo, para entonces encontrar nichos donde pueda colocar nueva información o solo trastocarla y ver como resulta. En sus obras, el paisaje queda suspendido en una narrativa onírica sin cronología alguna, transmutado, con la intención de crear una sensación que se superpone a la importancia de cualquier idea o significado.
Diego Mendoza, es un artista con raíces en la vereda del Cajibio-Cauca, encuentra inspiración en su entorno rural. La experiencia con la agricultura y la jardinería ha moldeado su estilo actual, que se caracteriza por una mirada analítica y reflexiva sobre el espacio rural y su destino en el mundo contemporáneo.
Lucas Gallego y Carolina Borrero, este colectivo a partir de sus experiencias y conocimientos que integran sus diversos saberes – Lucas desde la arquitectura y el trabajo con la madera, y Carolina desde el estudio de la materia y las plantas-, ofrecen una visión social y cultural del territorio como espacio de coexistencia y cocreación. Se trata entonces de una revisión desde una perspectiva global que cuestiona los lenguajes y manifestaciones de actores distintos a los humanos. Por esta razón trabajan con la transformación de lo material para plantearse preguntas sobre nuestro panorama, abordando problemáticas sociales, políticas, ambientales y culturales que a través del dibujo como potente herramienta lingüística nos invita a reconocer y reflexionar sobre los mundos posibles que existen más allá del nuestro.
Yuliana Miranda incorpora el dibujo en su obra como una manera de entrar a la intimidad de la naturaleza, realiza recorridos por los bosques y se fija en los matorrales, ramas, hojas secas, plantas, musgos y todas las formas que contiene, esa vegetación, paisaje, está en una constante dicotomía, esta muriendo y viviendo al tiempo. Todo ello es un misterio, un gran enigma, el dibujo le ayuda a desenmarañar un poco ese caos, la leva a un estado de observación profunda y detallada de ese nicho natural, cada trazo sobre papel es una forma de traducir lo inasible: es traer el afuera hacia adentro y devolverlo transformado en líneas.
Construcción de Realidades Alternativas
Otros artistas, como Frank Martínez (Cuba, 1972), Yornel Martínez Elías (Cuba 1981), Lia García (Colombia, 1982), Camilo Bojacá (Colombia, 1985), Carlos Alarcón (Bogotá 1979) y Wilmer Useche (Colombia, 1984), se unen en su interés por construir una realidad visual alternativa.
Frank Martínez, al apropiarse de referentes visuales de la cultura popular y la historia, genera un choque entre el presente y otras temporalidades, donde el absurdo y la ironía juegan un papel crucial en la apreciación del arte.
Yornel Martínez, el dibujo dentro de su proceso creativo funciona como una especie de interface, le permite conectar con la figuración de una idea en otra matriz material o medio diferente. Es un vehículo muy cómodo para migrar ideas desde la inmaterialidad del pensamiento hasta la comprensión final en su materialidad.
Lia García, por su parte, reflexiona sobre paisajes que no aparecen en las postales, ofreciendo una visión que a menudo es ignorada o reemplazada por representaciones más idealizadas.
Camilo Bojacá es un artista fascinado por la interacción entre la arquitectura, la naturaleza y la ciudad. Su obra, caracterizada por trazos precisos, fusiona elementos de la arquitectura clásica y contemporánea. A través de su trabajo, cuestiona cómo la construcción urbana impacta el entorno natural.
Carlos Alarcón, esta serie de dibujos nace del deseo de compartir lo que usualmente permanece oculto: El contenido de las libretas de bocetos no hay técnica ni temática única, al contrario, en estas páginas se despliega un universo diverso y espontaneo, donde conviven ideas, trazos, ensayos y búsquedas que rara vez se muestran al público. Las libretas de bocetos son cofres personales, allí los artistas guardan sus pensamientos más libres, sus exploraciones más crudas, sus proyectos aun por nacer, son territorios donde no existen las series ordenadas, ni las obras terminadas, sino el germen de lo que podría ser. Sketchbooks es una serie en constante crecimiento, miles de dibujos que por primera vez salieron a la luz en el 2018 y que hoy siguen revelando, página tras página los secretos y tesoros que el artista lleva en el bolsillo.
Wilmer Useche ha encontrado en las artes visuales, procesos de creación y conceptualización utilizados en el campo de la arquitectura de donde proviene ( Pamplona, 2007), el dibujo es una herramienta principal de comunicación. Su obra es resultado de toda una complicación y deconstrucción de elementos y saberes que ha acumulado a lo largo del tiempo, el gusto claramente por la serialidad del minimalismo de los años 70, el arte concreto y cinético latinoamericano, la fotografía abstracta, la arquitectura constructivista soviética, procesos que mutan y se transforman, se construyen y de-construyen de manera continua, siempre buscando una nueva forma de ver y entender la realidad que le rodea.
El Papel del Artista en la Sociedad
José Vincench (Cuba, 1973), Suamy Hernández Romero (Cuba, 2004), Osley Ponce Yznaga Cuba, 1976), Jorge Vaca (Colombia, 1985), Adriana Ramírez (Colombia, 1972), se erige sobre la base de una inquietud compartida: el rol del artista en una sociedad en constante transformación. Sus creaciones, con un sello estético conceptual y analítico, no temen adentrarse en las complejidades del contexto sociopolítico, explorando la intrincada relación entre la vida y el arte.
José Vincench, en su trabajo, establece un diálogo complejo entre el lenguaje abstracto y el contexto sociopolítico. Su característica técnica de desconstruir la palabra en un patrón de líneas, no solo crea una estética geométrica abstracta, sino que convierte la palabra en un símbolo de la ausencia de libertad de expresión de su contexto. Sus obras, creadas con grafito, son a la vez un resumen de ideologías y conceptos universales, que rompe el silencio de lo abstracto y nos invita a pensar estos conceptos.
Suamy Hernández Incorpora el dibujo en la animación, tanto en stop motion como en tradicional, es su medio para fusionar y desatar ideas con el simple trazo de líneas. Le impulsa la transformación constante de espacios, objetos e ideas. En “Carta de un emigrante”, esto se manifiesta al representar la separación de una de las tres hermanas, empleando carboncillo, línea, objetos e iluminación para construir la que entendemos como mundo con espacios oníricos.
Osley Ponce en su propuesta reflexiona a partir del auge de las tecnologías en la vida actual, lo que trae consigo la escasa utilización de las bibliotecas, la deficiente lectura de obras literarias, reflexiona sobre el modo en que accedemos a los conocimientos, por esa estrecha dependencia del mundo digital y sobre los depositarios de la memoria individual y colectiva de la humanidad, el lápiz en su obra es un protagonista, morfológicamente relacionado con la escritura, para potenciar y subrayar la idea, sin limitar su significado.
Jorge Vaca en cambio, genera metáforas que permitan construir reflexiones en torno a la narrativa de nación que define Colombia, tratando de articular ese relato con su pasado. Su obra se centra en el cómo entender el pasado desde el presente a partir de metáforas que cuestionan elementos ligados a la identidad nacional e individual del público.
Adriana Ramírez, inspirada en el concepto del dibujo expandido, no solo conceptualmente sino también lingüísticamente, considera que para generar una historia o un dialogo es necesario tener dos conceptos o dos eventos, y algo real o imaginario que los conecte. La artista establece así puentes para el espectador se convierta en co-creador de la obra de arte.
Artistas: Carlos Alarcón / Camilo Bojacá / Antonio Espinoza Fruto / Lucas Gallego & Carolina Borrero / Lia García / Suamy Hernández / Diego Mendoza Imbachí / Yornel Martínez / Frank Martínez / Yuliana Miranda / Frank Mujica / Osley Ponce Yznaga / Adriana Ramírez / Glenda Salazar / Wilmer Useche / Jorge Vaca / José Ángel Vincench
Curaduría: José Ángel Vincench & MAP
Fecha: Noviembre (2025) / Febrero (2026)
Ubicación: San José 114 / Industria y Consulado. Centro Habana, La Habana, Cuba.