Sostener situaciones de lectura por entregas.
Se trata de garantizar aquellas situaciones didácticas en las que el docente lee para sus alumnos. El docente actúa como “modelo de lector” y tutor de un recorrido de lecturas, proponiendo las que se relacionan con los intereses, las preocupaciones, los temores o expectativas de los alumnos de acuerdo con su edad sin que la imposibilidad actual de los jóvenes de acceder a estos textos por sí mismos los prive de su conocimiento.
Se propone, para estas situaciones, leer aquellos textos por los que “valga la pena” aprender a leer. Este espacio tiene como propósito conquistar lectores, incidir en la formación de futuros lectores.
Cada semana, un rato de clase, se abrirá con una lectura que resulte cautivante para el auditorio. La lectura se interrumpirá en el momento en que el docente esté seguro de generar expectativas para el siguiente encuentro.
Sugerimos la elección de:
una novela de algún autor contemporáneo. Por ejemplo: El espejo africano de Liliana Bodoc, Los vecinos mueren en las novelas de Sergio Aguirre, Como si no existiera el mar de Cecilia Pisos, El viaje de Héctor Tizón, Momo de Michael Ende, El buscador de finales de Pablo de Santis, El mar y la serpiente de Paula Bombara, entre otras. Pueden sultar:
http://planlectura.educ.ar/pdf/bicentenario/00_pdf_alija_total_1-128web.pdf
cuentos o relatos que conformen una serie o saga (Mitos griegos; El Rey Arturo y los caballeros de la mesa redonda);
varios cuentos de un mismo autor –Edgar Allan Poe ( “El corazón delator”, “El gato negro”, “El retrato oval”); Horacio Quiroga (“El espectro”, “El almohadón de plumas”, Cuentos de amor, de locura y de muerte); Ray Bradbury (“El cohete”, “El ruido del trueno”, Capítulo de Crónicas Marcianas, “El lago”), Olga Drenen (cuentos de Sombras y Temblores o La trama del miedo).
varios cuentos de un subgénero, por ejemplo, fantásticos o de ciencia ficción o policiales de enigma, relatos históricos o de recreación histórica, microrrelatos.
recorridos de obras de distintos géneros en torno a tópicos variados: relatos de iniciación, las ciudades, poder y libertad, los viajes, las transformaciones, cine y literatura, etc.
El docente lee y abre un espacio de opinión
Leer es también hacerlo a través de los que ya saben.
El docente lee:
-Para familiarizar a sus alumnos con el lenguaje que se escribe.
-Para mostrarles su propio comportamiento lector.
-Para compartir con ellos un texto que le gusta o le interesa.
-Para ponerlos en contacto con los textos a los que solos no pueden acceder.
*El docente lee con los alumnos cuando estos tienen el texto o no.
Condiciones generales para proponer situaciones de lectura del maestro
–Explicitar los propósitos de la lectura.
–Leer textos seleccionados por su propio valor (esto es sumamente importante en el caso de la lectura literaria).
–Aportar elementos contextuales que otorgan sentido a la lectura del docente y favorezcan las anticipaciones:
-Dónde y cómo encontró el texto.
-Compartir el portador y el paratexto (título, autor, editorial, ilustraciones).
-Información complementaria (partes del prólogo, fragmentos de la biografía del autor).
–Poner en juego en el acto de lectura el propio comportamiento lector: compartir sensaciones sobre la lectura (interés, sorpresa, emoción, entusiasmo, diversión), opiniones y comentarios con los chicos.
–Permitir que los chicos realicen su propio trabajo de lectura: que formulen y confronten hipótesis (por ejemplo: no explica las “palabras difíciles”, sino que ayuda a descubrir su significado a partir de su contexto).
Extracto del libro de Delia Lerner, Leer y escribir en la escuela. Lo real, lo posible, lo necesario, Capítulo 4: “¿Es posible leer en la escuela?”. Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica, Colección espacios para la lectura, 2001.
Propósitos de la situación:
• Comunicativo:
Disfrutar del mundo creado en los textos e intercambiar impactos y reflexiones con otros lectores
• Didáctico:
Formarse como lectores de literatura poniendo en juego prácticas que favorecen la construcción de sentidos cada vez más elaborados acerca de las obras.
Organización de la situación
• Organización de la clase: Situación colectiva. Disposición habitual para la escucha de cuentos: sentados en semicírculo alrededor del docente.
• Tiempo previsto: Depende del texto elegido y del año en que se desarrolla la situación -puede dedicarse hasta una hora de clase (50 minutos aproximadamente).
Secuencia e intervenciones del docente
Antes de leer
• ¿Qué leer? ¿con qué propósito? ¿Qué saben los alumnos? Considerar texto, alumnos y tiempo didáctico
• Generar un clima propicio para la lectura
• Informar dónde y cómo encontró el texto. Motivos de selección.
• Presentar datos paratextuales y contextuales
Durante la lectura
• Leer el cuento completo
• Procurar transmitir el efecto que el cuento produce al lector
• No saltear párrafos ni sustituir palabras
• Exponer o no las imágenes
• Prestar atención al interés y otras reacciones de los niños durante la lectura.
Después de leer
• Respetar silencios
• Habilitar expresiones, reacciones espontáneas de los niños
• Abrir un espacio de opinión partiendo de una contribución de un niño, si la hubiese, en la medida que suponga un desafío para todos. O bien, comenzar desde las emociones, efectos, impactos que ha causado la historia, algún pasaje, diálogo o personaje en particular.
• Sostener y profundizar el intercambio de comentarios sobre:
• La historia contada y la forma en que está contada
• Ciertas relaciones con otros cuentos, hechos de la realidad
• El por qué del título
• Tiempo de la historia y de la narración
• Motivación de los personajes
• Descripción de ambientes
• Posición del enunciador
• Planos de ficción....
• Releer párrafos con diversos propósitos. Volver al texto con motivos justificados: cuando surge interpretaciones diferentes, notar la belleza de una expresión…
• Establecer relaciones no explícitas en el texto
• Descubrir nuevos sentidos
• Proponer contraejemplos
• Devolver un problema
• Sistematizar conocimientos
Se trata de “comentar entre lectores” más que de evaluar si los niños han comprendido; es decir, de brindar oportunidades para que los alumnos progresen ampliando sus gustos como lectores y sus posibilidades de interpretación.
¿Qué mirar en los alumnos cuando el docente lee?
ü Si siguen la lectura del docente.
ü Si preguntan cuando no comprendieron algo. ¿Qué preguntas hacen?
ü Si se animan a participar en el comentario posterior.
ü Si, a medida que participa de distintas situaciones de escucha, puede fundamentar más sus comentarios y retomar los comentarios de los compañeros.
ü Si intentan establecer relaciones con otros textos que leyeron.
ü Si se ubican en el devenir de la historia o en los actos o escenas.
ü Si pueden retomar el hilo de historia en la lectura de una novela o cuento largo.