Parabólicos
El reflector parabólico se emplea tanto en aplicaciones de iluminación como de señalización.
Dependiendo de la posición relativa entre el foco y la fuente de luz tendremos tres tipos de proyección de los rayos luminosos:
Proyección paralela: la fuente se sitúa en el foco
Proyección convergente: la fuente se sitúa adelantada respecto al foco
Proyección divergente: la fuente se sitúa retrasada respecto al foco.
En la mayoría de los casos, para la función de cruce y carretera se utiliza una lámpara de doble filamento (H4 o C.E.)
Para la función carretera: La fuente luminosa se sitúa en el foco de la parábola, reflejando los rayos en su superficie y emitiendolos paralelamente respecto a la horizontal.
Para la función cruce: La fuente luminosa se sitúa delante del foco de la parábola. El tapaluz tiene la función de suprimir los rayos luminosos que producirían el deslumbramiento de los vehículos que circulan en sentido contrario. Esto supone desgraciadamente la perdida de la mitad del flujo luminoso emitido por la lampara. La fuente luminosa sitada delante del foco y con el tapaluz proporciona un haz de luz dirigido hacia abajo y limitado por un corte limpio, no deslumbrante.