Cómo empezamos...

Aquí explicamos como hacer una silueta para su posterior pintado. La técnica es la que empezamos a utilizar (aun válida) cuando comenzamos. La experiencia nos indicó que se podía abaratar y simplificar la ejecución, tal y como lo narramos más adelante."...Para empezar, hay que convencerse de que no es necesario ser un artista para abordar con éxito la fabricación de una silueta..."

Hemos observado que existen varios clubes interesados en comprobar si las bondades qué hemos expresado en la exposición de las dianas de siluetas son o no ciertas. Ya apuntamos, someramente, como se hacen pero aquí vamos a detallar el sistema y dar unos consejos para que no se caiga en los mismos errores que cometimos nosotros. Para empezar hay que convencerse de que no es necesario ser un artista para abordar con éxito la fabricación de una silueta. Evidentemente si uno tiene ese don divino pues… miel sobre hojuelas

Podemos comenzar con una silueta de tamaño medio; por ejemplo: un lobo.

Lo primero que vamos a hacer es buscar una lámina, mejor dibujo que fotografía, en la que aparezca un lobo, preferentemente de perfil, y que la silueta de la lámina defina al animal inconfundiblemente -como primera diana, para probar, podéis imprimir y usar este mismo dibujo de la página Web- Fotocopiamos la imagen y la cuadriculamos.

Calculamos la relación entre nuestra cuadrícula y la verdadera o sea: para pasar de escala contamos los cuadros que tiene el lobo en el dibujo desde las manos hasta la cruz. En este caso 7.5 => 8 cuadrículas. Si la alzada de un lobo grande ibérico es de, pongamos por caso 70 cm, cada cuadricula en verdadera magnitud debe medir 70/8=8.75 cm.

En un tablero de contrachapado (pané), o algo similar, se dibuja el cuadriculado a escala (8.75x8.75) y se pasa el dibujo siguiendo los cuadros. Es muy fácil. Se recorta la silueta en el tablero (si la chapa es fina con un formón, si es gruesa con una sierra de calar). Este va a ser nuestro patrón para hacer tantas copias como necesitemos en el futuro.

Hay que tener en cuenta que si las patas, como en este caso las traseras, no tienen grosor suficiente para poderles pegar el refuerzo de piquetas con comodidad es necesario simular algo de hierba, o una roca, entre ellas; con objeto de tener la superficie necesaria para que se adhiera de manera firme el refuerzo a la silueta.

Recortado el contorno y debidamente lijado para quitar rebabas y asperezas lo pasamos, con un rotulador, a una chapa de 150x135x5 de foam azul o negro. La recortamos con una sierra de calar. Se trazan, con rotulador, los plenos -pulmón, corazón y corazón poleas (optativo)- siguiendo, lo más fielmente posible, las dimensiones y ubicación reales de estos órganos (ni un corazón como el de Teresa de Calcuta ni como el de un colibrí). Se graban en la diana con un soldador de estaño.

el reverso por la zona de los plenos con dos o tres capas de foam, de tamaño algo mayor que los pulmones, adheridas con cola de contacto y pegamos igualmente los refuerzos para las piquetas. Cuanto más grosor de foam halla entre el taladro para la pica y el anverso menos posibilidades habrá de romper la flecha si diese en esa zona. Tened la precaución de que el foam esté limpio, sobre todo de grasa (la de las manos incluida).

La fase de pintura se comienza con un limpiado de la silueta con objeto de que se agarre bien la imprimación (esencial) que va a ser de caucho blanco por el anverso. Esta capa previa da luz y brillo a los colores y se adhiere muy bien a la lámina de foam. Una vez seco (24 horas mínimo) se empieza a pintar el animal: La primera capa debe ser el color dominante (ocre, por ejemplo) y se va aclarando u oscureciendo por zonas para darle volumen. Esta es la única fase donde el que hace la silueta debe echarle un poco de chispa al tema. Si se es un garrazas consumado hay que pedir ayuda a alguien que pinte medio bien. La parte trasera se pinta con manchas mimetizadas para que la silueta no de “cante” en medio del campo vista por detrás. Y ya está, amigo mío. Ahora te vas a tu campo y la plantas con dos piquetas –finitas, del 8 o así, que no es la cimentación de las Petronas- Si eres el representante en tu ciudad de “Easton” busca una buena roca, disimulada a poder ser, y colocas la silueta delante. Si eres de los que, cada vez que haces cisco una flecha, se te coge un dolor de estómago que tardas en soltarlo tres días busca un lugar acolchadito, de forma que si fallas, todo se quede en el disgusto de no puntuar

Si haces alguna, comunícanoslo en nuestro foro y nos cuentas que tal te ha salido y que opinas de ellas.

Nota: El lobo del ejemplo y el que está andando no es el mismo. Las hacemos con realismo, pero no tanto