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Este artículo lo publicamos hace cinco años.Creíamos que la idea de las siluetas iba a funcionar. Un lustro después el tiempo nos ha dado la razón.
Todas las dianas en el recorrido de bosque evolucionan hacia el mayor realismo posible. Las 3D con nuevas texturas y colores tienden a parecerse cada vez más a los animales que representan; apareciendo nuevos fabricantes que tienen que competir con los actuales más en la perfección del volumen y pintura que en el precio.
Una vez agotada la originalidad en la concepción del itinerario y colocación de los blancos donde ya queda poco por innovar, la tendencia de los clubes es proponer novedosas dianas; aquellas qué los arqueros hayan visto poco y, si es posible, nunca. Si esto no se consigue, estando hechos los recorridos de antemano generalmente, las competiciones son todas muy parecidas.
Con orografías similares dentro de un mismo área y con animales adquiridos a los mismos fabricantes, y además teniendo que estar homologados, un club que quiera distinguirse de otro, de una zona próxima, lo tiene francamente difícil (evidentemente puede contratar a unas animadoras con pompones que le darán un toque de originalidad, pero no variará la esencia de la competición). Las posibilidades de mejora se agotan. Superar el listón del Campeonato de España del año pasado es muy complicado y con los medios disponibles, en competición estricta, creemos que prácticamente imposible.
Cuando el club de tiro con arco “Alfacar” de Granada propuso a la Comisión de Recorrido de Bosque que se admitiese el uso de sus dianas artesanales -algunas de las cuales esta revista ha reproducido- en recorridos oficiales argumentábamos que, bien controlado el tema, sería un revulsivo para hacer los campeonatos más originales. Los que han asistido al Encuentro de arqueros que este club organiza, han tirado a veinte dianas que no habían visto nunca, ni siquiera en publicaciones. Un recorrido así, si las dianas están bien hechas, son unas agradables sorpresas. Además, con la magnifica idea de poner los plenos en la piqueta de espera que se inició en el TIM se solventa el problema de la ventaja entre los tiradores que conocen las dianas y los que no.
Dentro de esta búsqueda de la originalidad hemos hecho el primer recorrido, que sepamos, de dianas de siluetas. Aunque parezca mentira, estas dianas abren un campo inmenso para la creatividad, equiparable a cuando aparecieron las primeras láminas de 2D o los primeros volúmenes en 3D. Todo comenzó cuando se planteó la necesidad de colocar un circuito 3D para entrenar para el Campeonato de España del año pasado. Solo teníamos montado de forma permanente dos de 2D y guardábamos como oro en paño nuestro circuito 3D; así que ni se nos ocurrió colocarlo de forma permanente. Pensamos que podíamos salir del paso haciendo unas siluetas de animales que, sin ser 3D, se pareciesen. Se hicieron deprisa y corriendo ya que el Campeonato estaba encima y se colocaron. Nuestra sorpresa fue que, seis meses después, siluetas como una ardilla, por ejemplo, seguían admitiendo flechazos. De hecho vamos a tener que retirar siluetas, a las que se podría seguir tirando un año, por aburrimiento. Y no es que seamos un regimiento, como algunos clubes de Cataluña, pero somos noventa y siete arqueros. Así que tiros llevan unos cuantos. En definitiva: que perfeccionado el diseño, tanto de refuerzos para las fijaciones como de perímetro y pintura, hemos hecho dos recorridos completos con siluetas distintas, a tamaño natural y de fauna española. Se ha estrenado uno de ellos el mes de abril y la verdad es que merece la pena tener en cuenta estas dianas. A la distancia de tiro, el aspecto es prácticamente el mismo que una diana de 3D, pero mucho más colorista.
Podemos destacar las siguientes ventajas respecto a un recorrido de 2D:
- Si se hiciese una silueta del tamaño del bisonte Mckenzie, la más grande que tiene, pesaría menos de 3 Kg
- La duración de la diana es similar a la de un centro de los que usan los de tiro olímpico en sus parapetos, capaz de recibir miles de impactos.
- La pintura es resistente a la intemperie y los colores no degeneran de forma evidente por causa de las radiaciones ultravioletas. Así que no hay que cambiar láminas que se estropeen por uso o por degradación.
- El tamaño de los animales no está constreñido al parapeto, como ocurre en 2D. La libertad de diseño es ilimitada.
- Si alguna empresa las hiciese en serie, serigrafiando la silueta, el precio sería muy interesante e inferior, como es lógico, que el de un parapeto. De hecho, probablemente desaparecería el 2D tal y como lo concebimos hoy en día. Para un club que empieza es mucho más eficaz, rápido y económico montar un circuito de siluetas que poner parapetos, del material que sean.
- No es lo mismo montar un circuito acarreando parapetos, por muy ligeros que sean, que montarlo de siluetas en que una sola persona puede llevar sin esfuerzo, y de una vez, cinco o más dianas.
Tienen más ventajas pero la lista se haría demasiado prolija y con estas son más que suficientes. Hay desventajas, como en todo. Debido a su peso y atractivo, los aficionados a lo ajeno se lo pueden llevar con más facilidad que un parapeto. La Federación Andaluza de Tiro con Arco tiene intención de aprobar el uso de estas siluetas en la próxima reunión de su Junta Directiva y muy probablemente, este año, se organice el primer campeonato de Andalucía de recorrido de bosque en siluetas.
Proponemos desde esta tribuna a los clubes que elaboren o consigan alguna silueta y la prueben para uso cotidiano. Creemos que quedaran tan convencidos de sus bondades como lo estamos nosotros.
Si la Comisión de Recorrido de Bosque de la RFETA aprueba y reglamenta el uso de estos blancos, podemos afirmar, sin género de dudas, que los circuitos en 2D de láminas y parapetos han pasado a la historia.
Nosotros hacemos las siluetas de la siguiente manera: Partimos de una plancha de foam azul de 150x130x5 donde se recorta la silueta con una sierra de calar. Por el reverso se le pegan unos refuerzos para clavar con piquetas la silueta al suelo. Hay que tener en cuenta que el hierro debe quedar lo más alejado posible del anverso ya que una flecha que impacte en esa zona debe perder suficiente energía como para, aún dando en el hierro, la flecha no se rompa. Así que entre el taladro para la piqueta y la superficie del anverso debe haber de 15 a 20 cm de foam. En la parte del pleno se refuerza la silueta con dos capas más, teniendo en esa zona un grosor de 15 cm. De esta forma “los poleas” no atraviesan la diana y la zona más castigada se refuerza aumentando la duración de la misma. Antes de pintar, con una punta caliente (un soldador eléctrico) se marcan los plenos, calculando la verdadera dimensión de los pulmones y del corazón, así como su ubicación. Se pinta lo mejor posible dentro de un orden (no son cuadros para exposición) y tenemos una diana que, aunque parezca mentira por el trabajo que lleva, merece la pena.
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