Middle Stone Age / Paleolítico Medio

Alrededor de hace 300.000 años la tecnología lítica cambia en su concepción y los grupos humanos abandonan las estrategias de talla de conformado para usar de manera masiva los métodos de lascado. Los utensilios se van a realizar sobre lascas, siendo por tanto más pequeños y versátiles. Estos conjuntos industriales conformarán el Paleolítico Medio en Eurasia y la Middle Stone Age en el continente africano. Los yacimientos clave de estos momentos son numerosos: El Castillo (España) o Le Moustier (Francia) para los primeros o Nasera (Tanzania), Blombos, Sibudu (Sudáfrica) o Jebel Irhoud (Marruecos), para los segundos.

La Middle Stone Age en África y el Paleolítico Medio en Eurasia supone un periodo de innovaciones técnicas y simbólicas. Es durante este periodo cuando empezamos a ver las primeras evidencias de comportamiento simbólico con ocre y huevo de avestruz grabado, uso de cuentas de collar por parte de Homo sapiens en África o el empleo de colgantes con garras de rapaces, uso de ocre o adecuación de espacios para posible usos simbólicos por parte de los neandertales en Europa.

Este fenómeno cultural se da en África y Europa de manera casi simultánea con dos protagonistas humanos cada vez menos diferentes. Mientras que en Europa los autores de estas nuevas estrategias de talla serán los neandertales, en África seremos nosotros, Homo sapiens, los artífices de las mismas. Una de las grandes preguntas de este periodo es saber si este proceso es causado por una convergencia cultural o, por el contrario, depende de que un ancestro común a ambas especies abandonase África, realizando este tipo de tecnología y fuese el “legado” cultural para ambas poblaciones humanas.

Las industrias sobre lasca reposan en numerosos métodos de talla, pero los principales son los métodos Levallois que, junto con los métodos de talla discoide, conforman los “núcleos preparados”. ¿Qué supone esta denominación? Pues que para tallar según estos métodos hay que preparar los núcleos mediante talla previa para adecuarlos a una serie de criterios necesarios para llevar a cabo dicho método y así obtener una serie de lascas de morfología y tamaño predeterminadas.

Las lascas resultantes van a ser retocadas en numerosos utensilios: raederas, denticulados, cuchillos o puntas son algunos de los ejemplos más comunes. Además, muchos de estas piezas se empiezan a usar de manera novedosa ya que se enmangarán, lo que para algunos investigadores se trataría de la primera revolución industrial. Entre estas piezas destacan las puntas enmangadas, mejorando las herramientas de uso cinegético. Para el enmangue, los grupos humanos usaban resinas o alquitrán y tendones para hacer cuerdas para sujetar las puntas líticas en los astiles de madera.