Nota corta.
Equipo de manipulación de cargas en almacén.
Dr. Francisco Javier Silva Cobos.
En otras épocas, el movimiento de bienes dentro de los espacios donde se les custodiaba hasta que fueran utilizados, era realizado exclusivamente por humanos; quienes en ocasiones eran apoyados en ocasiones por animales de carga cuando las dimensiones o el peso de los productos o materiales superaba lo que la capacidad física de los trabajadores podría manejar.
Con el paso del tiempo, y al incrementarse la necesidad del flujo de bienes creado por los intercambios comerciales entre comunidades humanas, se han ido desarrollando múltiples dispositivos que permiten realizar la manipulación de objetos dentro de los espacios donde se les mantiene en espera de llevarlos a su destino o entregarlos a su usuario final.
Al ser ayudas artificiales no dependientes por completo de la fuerza humana, han contribuído significativamente a disminuír la ocurrencia de accidentes, preservando en primer lugar, la integridad física de la plantilla operadores encargados del movimiento físico de productos, en segunda instancia minimizando los daños que pudiesen ocurrirle a estos últimos y finalmente a minimizar el deterioro de las instalaciones mismas.
En la actualidad, estos dispositivos según Ronald H. Ballou (2004) pueden clasificarse en diversas categorías; en las cuales los podemos ubicar en función de su sencillez no solo de diseño, sinó también de operación; en lo cual se toma en cuenta su grado de dependencia de la actividad del operario con ellos, como también que tan especializados son.
La categoría básica es la de los equipos de manipulación manuales; son poco costosos, generalmente muy ligeros, fáciles de operar por parte de trabajadores con poco o nulo entrenamiento, ideales para instalaciones donde la altura de apilamiento de bienes es baja, permite flexibilidad en los desplazamientos con relativa rapidez y hay una múltiple variedad de objetos que se pueden desplazar con ellos, son dependientes en cierta medida de la fuerza física empleada por su operador; podemos mencionar como ejemplos:
· Las carretillas.
· Los diablitos.
· Los carritos con plataforma metálica.
· Los patines o transpaletas hidráulicas.
La siguiente categoría, correspondería a los dispositivos asistidos por motores ya sea eléctricos o de combustión interna, estos se caracterizan por brindar una mayor velocidad en la manipulación de los bienes, lo cual a su vez permite mejorar la tasa de aprovechamiento de las horas hombre de los trabajadores del almacén o bodega; ejemplos de ellos son:
· Transpaleta eléctrica.
· Apiladores eléctricos.
· Montacargas eléctricos.
· Montacargas de combustión interna.
· Grúas.
Y finalmente en la tercera categoría, se encuentran los dispositivos completamente automatizados; conocidos también como vehículos guiados automatizados (AGV’s- Automated Guided Vehicles) y también debemos añadir aquí al sistema AS/RS ya que aunque fue clasificado dentro del equipo de almacenamiento también, este por sí solo, es capaz de desplazar bienes entre diferentes secciones del almacén, hasta donde su estructura lo permita.
Estos dispositivos funcionan en base a algoritmos programados y controlados desde una estación de planificación, los sistemas que emplean, se complementan con el uso de códigos de barras, códigos QR y tarjetas de identificación de radio frecuencias RFID, con sus respectivos escáneres y antenas.
Funcionan mejor cuando los productos que se manejan en el almacén tienen cierto grado de homogeneidad; aportan gran rapidez a las operaciones del almacén y por regla general requieren grandes montos de inversión para su adquisición y mantenimiento, como también para su instalación en el caso de sistemas fijos.
Una desventaja que pueden presentar es que si algo falla mecánicamente, el sistema se detiene por completo o se interrumpen en el caso de los vehículos, los programas calendarizados tanto para estiba de producto como para integración de pedidos y su respectivo despacho.
Todos estos equipos deben seleccionarse de acuerdo con las características que habrá de tener la instalación, la cual debe estar apegada a un conjunto de normas en cuanto al manejo de espacios interiores y de seguridad; verificando en el proceso que los equipos sean compatibles con los requerimientos que establece dicha normatividad y que estos sean operados en base a tal normativa (Oregon OSHA, s.f).
Referencias consultadas.
Ballou Ronald H. (2004). Logística: Administración de la cadena de suministro. 5ta Edicion. México. Ed. Pearson Educación.
Oregon Osha (s.f). Forklift Safety. Instructor versión. Workbook. Public Education Section. Department of Customer and Business service.
Pau i Cos Jordi & De Navascués y Gasca Ricardo.(2001). Manual de logística integral. Buenos Aires, Argentina. Ed. Díaz de Santos.