Movimiento que no utiliza la perspectiva convencional ni los colores de la realidad, ni tampoco un punto de vista único. Tenían un sentido más austero del arte que inclinaba a los artistas por tonos neutros: grises, blancos, verdes claros.
Referente a los ángulos de observación del objeto, cabe destacar que se multiplican para obtener de esta manera la cuarta dimensión a partir de la suma de todas las perspectivas.
En el cubismo los interiores son representados mediante transparencias, la luz desaparece definitivamente y la exaltación del plano se hace más intensa que en el fauvismo.
Con el cubismo se inició en la pintura un viaje apasionante por las realidades que el cerebro humano puede construir o destruir. Picasso y Braque fueron dos de las figuras inspiradoras; Juan Gris, Fernand Léger, Jean Metzinger y Albert Gleizes, algunos de los maestros más importantes.
Se ha observado que los cubistas no introducen en sus obras los nuevos objetos de la civilización técnica: automóviles o trenes, sino que se mantienen vinculados a los modelos tradicionales: jarras, vasos, figuras humanas o instrumentos musicales. En una fase posterior añaden letras o trozos de papel enganchados (papiers collés).
Sobre los retratos cubistas