Entrevista a Estela Quintero, doctora en ecología de bosques.
Para avanzar con el proyecto de CAS, enfocado en la construcción de la Sala de Colecciones Biológicas de La Estrella, durante el confinamiento y con el ánimo de recibir una perspectiva académicaacerca de los Bosques Andinos, los alumnos de Décimo y Undécimo del Gimnasio Internacional de Medellín consideramos pertinente convocar a una entrevista sobre la conservación de estos ecosistemas en Antioquia a la doctora en ecología de bosques, Estela Quintero.
La entrevista comenzó con una serie de preguntas relacionadas con el actual trabajo de la doctora, a lo que se ha dedicado en el pasado y algunas inquietudes sobre el libro en el que ella hizo parte del grupo editorial, Bosques Andinos de Antioquia.
Estela ha trabajado en los ecosistemas por fuera del país, porque quería comprender mejor cómo funcionaban estos; además hizo un proyecto sobre la relación de los nutrientes del suelo y las plantas. Sus trabajos en Colombia han estado encaminados a la docencia y justo en este momento es maestra en la Universidad CES. El proyecto más grande fue para su doctorado sobre los bosques de la amazonía boliviana, pues el estudio consistió en entender su suelo luego de que el bosque creciera sin los indígenas que lo habitaban, para así ver como se relacionan los nutrientes del suelo con el bosque.
Su nuevo proyecto del que no muchas personas tienen conocimiento, consiste en entender la respuesta a la sequía de varias especies de plantas del Bosque Andino, para luego ver cómo responden a estas condiciones y todo esto con el fin de ver si hay unas especies más resistentes a las sequías que otras y de esta forma prevenir algunos problemas futuros relacionados con el cambio climático.
Sobre el libro Bosques Andinos de Antioquia, el cual hemos trabajado a profundidad en el proyecto, hizo claridad en que fue una parte de un macro proyecto del Jardín Botánico. Para ella la experiencia de participar fue muy enriquecedora al interactuar con los demás escritores. La acogida del ejemplar fue buena, pero no tanto como hubieran querido; de todas formas, ella piensa que es necesario que todos los antioqueños lo leyeran, puesto que habitan un Bosque Andino.
Es muy interesante la siguiente cita del libro por las dudas que suscita:“[...] Ahora bien, sistemas montañosos existen en todos los continentes, pero ninguno evidencia la complejidad histórica, la diversidad biológica de los Andes y su biota de los Bosques Andinos.”
Estela esclarece que en los Bosques Andinos se puede hallar más diversidad de especies en un solo árbol, que en los árboles de la Amazonía, puede que por hectárea el conteo de árboles sea de un valor igual, pero si se entra a analizar las especies dentro de cada árbol se encuentra una incomparable variedad. Una posible causa para esto es que los Bosques Andinos tienen más humedad, entonces hay más hábitats para las especies diferentes. Algo que define a estos bosques en particular, es el ser un ecosistema que crece en las montañas y a medida que nos encontramos a mayor altitud, hay un cambio de temperatura y presión; son estos cambios los que dan pie a que haya mayor diversidad de especies.
La sociedad en pleno se ha mostrado algo más interesada por la naturaleza y esto ha llevado a despertar la curiosidad que es precisamente el medio para tener más información. Sin embargo, no todos han tenido la capacidad de sorprenderse ante la naturaleza y Estela propuso que por medio de las historias se puede despertar más el interés sobre los bosques.
El ecosistema del Bosque Andino en Antioquia se enfrenta de manera evidente a varias amenazas que atentan contra su existencia. Además de la deforestación y creación de obras de infraestructura, Estela hizo énfasis en dos asuntos cruciales: la apropiación del territorio y la producción de alimentos. Por un lado el crecimiento de la población y el poco conocimiento que se genera alrededor de la conservación de estos ecosistemas, va directamente relacionado con la precaria relación que los antioqueños mantiene con su territorio. Por otro lado, a propósito de la producción alimenticia y la problemática radicada alrededor de los monocultivos, cabe ampliar el panorama de soluciones con la opción de los policultivos que son mucho más diversos y en tanto aprovechan mejor la tierra, sostienen un poco más la biodiversidad. “Necesitamos un tipo de agricultura en el que crezcan simultáneamente varios alimentos. Podríamos así comer y al mismo tiempo tener ecosistemas más saludables” asegura la doctora. Cuestionarse la proveniencia de todos los alimentos que se consumen y si su proceso fue en pro de la conservación, es por supuesto, el factor más importante para un cambio.
Los proyectos de mitigación más efectivos de estas amenazas han sido algunos planteados por parte de la Secretaría de Medio Ambiente de Medellín, que consisten en la compra de tierras para conservar nacimientos de agua y las especies de fauna y flora, pues una característica principal de los bosques andinos es que son reservorios, casi productores de agua, pero no es un recurso inagotable; por tanto, si se tiene conciencia de esto una estrategia que puede ser viable para reducir este consumo es la recolecta de agua lluvia.
Nuestro proyecto ha buscado alentar la conservación y estudio de los Bosques Andinos por medio de las colecciones biológicas. La doctora Estela cita a una compañera en la afirmación de que las colecciones son un evento histórico, pues van a marcar la ecología del país, primero porque permiten entender qué hay en los bosques, y también son pieza fundamental para los procesos de restauración. Generar hipótesis investigativas a partir de las colecciones y características ambientales de las especies, para ella tiene una vital importancia, porque se genera el conocimiento científico a partir de información.
Respecto a la actualidad y estando atravesados como ciudad y departamento por la coyuntura de una pandemia, la doctora Estela plantea la hipótesis de que la explotación de estos ecosistemas va a ser más severa al inicio de la recuperación económica, lo que puede ser contraproducente con lo logrado mientras que estuvimos en cuarentena. Hace hincapié en que unos bosques sanos pueden hacer que las especies portadoras de virus y bacterias no tengan que salir de los bosques y no se generen más pandemias.
Su planta favorita
Árbol de algarrobo, Ceratonia siliqua, es de la familia de las leguminosas y por tanto resulta muy interesante. Se caracterizan por lidiar muy bien con el agua, la sequía, los suelos y muchas de ellas en la noche duermen.
Anécdota
En una de sus salidas hacia el bosque Estela se encontró un armadillo gigante en el momento en que se estaba alimentando de hormigas, afirmó que fue una experiencia muy particular, ya que nunca se lo hubiera esperado.
Luego de escuchar la entrevista, surgieron varias preguntas por parte del público. Una de ellas fue: ¿qué tipo de técnicas de divulgación son lo suficientemente efectivas desde la academia? A lo que Estela respondió: “hasta ahora no hay muchas técnicas. Pero a través de las historias se divulga el conocimiento, se puede abordar la ciencia saliéndose del esquema académico y simplificando la información científica, pues así se lograría que la sociedad conecte su vida diaria con el cuidado de las especies”. En ese sentido, afirma que hay proyectos de divulgación pero en los espacios académicos falta entender a cabalidad las interacciones ecológicas de supervivencia. Por último, se dijo que hay mucho por conocer aún, pues uno de los factores principales es que en Colombia no hay tantos investigadores de dicha área.
Su respuesta a la pregunta ¿Cuál es tu postura frente a las colecciones entomológicas de El Romeral? fue: “sacrificar una vida debe tener un significado muy importante, es decir, las colecciones biológicas necesitan que se les dé un sentido. Yo valido las colecciones mientras que no sean repositorios en donde el material no se va a conservar”.
Es la ética la que nos pone a colectar de la mejor manera posible, y a pensar si realmente estará bien representada y será útil históricamente; por lo que si se quiere un proyecto sostenible en el tiempo, debe perdurar.