El patio es donde el juego y la compañía se elige libremente. El alumnado se divierte, pero también entra en conflicto con otros, siendo una gran oportunidad de aprendizaje.
Esta propuesta nace de la escucha activa de los intereses del alumnado, de la experiencia y el compromiso del claustro.
En los recreos del centro Marie Curie se ofertan muchos espacios y recursos para jugar, cantar, bailar y disfrutar.