Decidí estudiar arte y español como mis majors el mismo semestre cuando regresé a Amherst. El proyecto final de Español 4 fue perfecto para unir mis dos pasiones nuevas, y me dio la oportunidad de pensar más profundamente sobre la vida que quise crear en Amherst. El tema de este proyecto fue reflexionar sobre una injusticia o fenómeno social después de estudiar artistas callejeros hispanohablantes quienes han dado voz a las preocupaciones en sus vidas. Otros compañeros hablaron sobre la crisis climática, la pobreza y desigualdad, los estreses de ser estudiante y mucho más. Para mi, dar atención a los problemas en mi vida con dos idiomas nuevos (Español y arte visual) fue una revelación enorme para subir mi interés de continuar en los majors.
lavanda - Español 4 - 12/2021
Mi obra es, en parte, inspirada por el arte de Bastardilla, quien es una artista grafitera de Colombia, que pinta obras muy tranquilizantes. Sus obras reflejan la violencia en el mundo, pero no son obras violentas. Tiene un estilo que ofrece un momento de paz para gente que ve el arte, con imágenes de protección y amistad.
Quiero crear un efecto muy similar con mi arte - un espacio para relajarse, y un espacio donde uno no se siente culpable por la necesidad de relajarse. Originalmente, iba a pintar flores y el mensaje de la obra en mi lugar favorito en campus que es muy privado con una vista espectacular, pero hacía mucho frío toda la semana y no pude. La idea con el grafiti afuera era que está en un lugar usado principalmente por fumadores, así que es solo un lugar de descanso. Uno no hace trabajos o tareas allá.
En sustitución de grafiti afuera, creé esta obra, lavanda. Es un collage de pinturas de lavanda, con capas de acuarela, acrílico, y el mensaje “el descanso es revolucionario”. La lavanda es un símbolo para el descanso, y el aceite de lavanda es usado frecuentemente para ayudar y mejorar la calidad de sueño.
El mensaje es la parte más importante de la obra: “El descanso es revolucionario”. Hay una cultura en los EE.UU. que uno tiene que trabajar sin cesar, una cultura que dice si tu tiempo no es productivo, no es tiempo legitimo. Esta cultura está concentrada en Amherst, una institución súper élite, donde los estudiantes no saben cómo relajarse o tomar tiempo libre. Para muchos estudiantes aquí, hay una sensación de tener que demostrar el valor cada día para evitar el síndrome del impostor.
De la misma manera, como estudiantes y jóvenes en el mundo, podemos ver la injusticia y la lucha contra la injusticia alrededor del mundo con la red y nuestros celulares. Hay una lluvia de información en cada momento. Hay literalmente miles de causas importantes que necesitan ayuda, tiempo y dinero, y provocan mucha culpa cuando no podemos ayudar. Creo que esta culpa es la raíz del “activismo de Instagram”, o activismo performativo, que es cuando la gente graba publicaciones de justicia social a sus perfiles a fin de tener una imagen de una activista sin ayudar las causas en realidad.
Existen muchas ideas importantes para tener más impacto real contra la injusticia. Creo que si quisiera resistir y oponerse a la supremacía blanca y sus efectos en el capitalismo, tendría que resistir los efectos en su vida diaria. La meritocracia pide trabajar sin cesar, y la resistencia es el descanso. Amherst pide trabajar sin cesar, y la resistencia es el descanso. Gran actos de justicia social son revolucionarios sin duda, pero también, el descanso es revolucionario.