Fundamentos legales

Rd. 126/2014 de 28 de Febrero Ley Organización y Mejora de la Calidad de la Educación

Anexo I

Asignaturas troncales

a) Ciencias de la Naturaleza.

Las Ciencias de la Naturaleza nos ayudan a conocer el mundo en que vivimos, a

comprender nuestro entorno y las aportaciones de los avances científicos y tecnológicos a

nuestra vida diaria. A través de las ciencias de la naturaleza nos acercamos al trabajo científico y

a su contribución al desarrollo, por lo que es necesario proporcionar a todos los alumnos y

alumnas las bases de una formación científica que les ayude a desarrollar las competencias

necesarias para desenvolverse en una realidad cambiante cada vez más científica y tecnológica.

El desarrollo de la ciencia y la actividad científica es una de las claves esenciales para

entender la evolución de la Humanidad. En la actualidad, la ciencia es un instrumento

indispensable para comprender el mundo que nos rodea y sus cambios, así como para desarrollar

actitudes responsables sobre aspectos relacionados con los seres vivos, los recursos y el

medioambiente. Por todo ello los conocimientos científicos se integran en el currículo básico de la

Educación Primaria y deben formar parte de la educación de todos los alumnos y alumnas.

A través del área de Ciencias de la Naturaleza los alumnos y alumnas se inician en el

desarrollo de las principales estrategias de la metodología científica, tales como la capacidad de

formular preguntas, identificar el problema, formular hipótesis, planificar y realizar actividades,

observar, recoger y organizar la información relevante, sistematizar y analizar los resultados,

sacar conclusiones y comunicarlas, trabajando de forma cooperativa y haciendo uso de forma

adecuada de los materiales y herramientas.

El área incluye conceptos, procedimientos y actitudes que ayuden a los alumnos y alumnas

a interpretar la realidad para poder abordar la solución a los diferentes problemas que en ella se

plantean, así como a explicar y predecir fenómenos naturales y a afrontar la necesidad de

desarrollar actitudes críticas ante las consecuencias que resultan de los avances científicos. El

trabajo en el área de las Ciencias de la Naturaleza pretende desarrollar una actitud de toma de

conciencia, participación y toma de decisiones argumentadas ante los grandes problemas a los

que nos enfrentamos en la actualidad, ayudándonos a valorar las consecuencias.

Por otra parte, los contenidos de las Ciencias de la Naturaleza están conectados con los

propuestos en otras áreas, por lo que es preciso trabajar las relaciones existentes entre ellas.

El currículo básico se ha formulado partiendo del desarrollo cognitivo y emocional en el que

se encuentra el alumnado de esta etapa, de la concreción de su pensamiento, de sus

posibilidades cognitivas, de su interés por aprender y relacionarse con sus iguales y con el

entorno y de su paso hacia un pensamiento abstracto hacia el final de la etapa.

En el área de Ciencias de la Naturaleza, los contenidos se han organizado alrededor de

algunos conceptos fundamentales; iniciación a la actividad científica, los seres vivos, el ser

humano y la salud, la materia y la energía, la tecnología, los objetos y las máquinas, conceptos

que facilitan el establecimiento de relaciones entre los diferentes contenidos seleccionados. Su

tratamiento debe permitir que los alumnos y alumnas avancen en la adquisición de las ideas del

conocimiento científico, en su organización y estructuración, como un todo articulado y coherente.

En lo que se refiere a los contenidos procedimentales, los relacionados con el «saber hacer»

teórico y práctico, los alumnos y alumnas han de iniciarse en conocer y utilizar algunas de las

estrategias y técnicas habituales en la actividad científica, tal como la observación, la

identificación y análisis de problemas, la recogida, organización y tratamiento de datos, la emisión

de hipótesis, el diseño y desarrollo de la experimentación, la búsqueda de soluciones, y la

utilización de fuentes de información, incluyendo en lo posible las proporcionadas por medios

tecnológicos y la comunicación de los resultados obtenidos.

Por último, para el desarrollo de actitudes y valores, los contenidos seleccionados han de

promover la curiosidad, el interés y el respeto hacia sí mismo y hacia los demás, hacia la

naturaleza, hacia el trabajo propio de las ciencias experimentales y su carácter social, y la

adopción de una actitud de colaboración en el trabajo en grupo.

Se presenta un bloque de contenidos comunes, Iniciación a la actividad científica, en el que

se incluyen los procedimientos, actitudes y valores relacionados con el resto de los bloques que,

dado su carácter transversal, deben desarrollarse de una manera integrada.

Debido al carácter del área, los contenidos conceptuales, procedimentales y actitudinales

formulados, y teniendo en cuenta los diferentes estilos de aprendizaje, la actividad del aula girará

en torno a la realización de actividades en las que el alumnado debe tener participación.

De igual forma, dada su creciente importancia, se debe iniciar a los alumnos y alumnas en el

uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación, para buscar información y para

tratarla y presentarla, así como para realizar simulaciones interactivas y representar fenómenos

de difícil realización experimental.

Los criterios y estándares de evaluación que se establecen en el currículo básico suponen

una formulación evaluable de las capacidades expresadas en los objetivos generales de la

Educación Primaria, asociadas a los contenidos fundamentales de esta área, y muestran las

competencias que el alumnado debe adquirir.