En enero de 2024 se dio inicio a la segunda fase de este interesante proyecto, en donde se busca aumentar el número de plantas, desarrollar nuevas obras de conservación de suelos, todo tendiente a la reparación de la estructura y funciones ecológicas de los ecosistemas que antiguamente existieron en el sector.
Sin duda, la continuidad de este tipo de proyectos es de extrema importancia ya que los procesos de restauración ecológica, particularmente en áreas donde el agua es escasa y el territorio está altamente degradado, requiere de tiempo (muchos años), evaluación continua y un manejo adaptativo. Por ejemplo, el monitoreo en el tiempo del crecimiento y sobrevivencia de las plantas, es clave para evaluar el éxito o el fracaso de las técnicas y metodologías empleadas en pos de restaurar la vegetación, y el resto de los componentes de la cadena trófica (animales, microorganismos). La evaluación de las prácticas y técnicas de conservación que muestren indicios de buenos resultados, así como el de aquellas en que no mostraron resultados adecuados, permite el tomar buenas decisiones al momento de implementar procesos de restauración en superficies de terreno más extensas. Afirmó el profesor de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza de la Universidad de Chile, Dr. Juan Pablo Fuentes, el cual está a cargo de esta iniciativa.
Esta segunda etapa etapa tiene como propósito en específico el dar continuidad a las acciones de restauración ecológica hasta ahora llevadas a cabo. Dentro de sus objetivos principales se encuentra el continuar con el monitoreo del piloto de restauración a través de la evaluación de diferentes variables biofísicas, incluido el contenido de agua del suelo (ahora a mayores profundidades), potenciar la superficie restaurada mediante el enriquecimiento con especies nativas de la zona; establecer una cortina cortaviento de manera de mejorar las condiciones de crecimiento de las plantas y la aplicación de distintos tratamientos que contribuyan a disminuir la pérdida de agua por evaporación. También se llevarán a cabo actividades de educación ambiental centradas en la restauración ecológica, utilizando el piloto de restauración como un espacio para generar esta instancia. La educación ambiental estará dirigida a establecimientos educacionales y a las comunidades del territorio.
Con la presencia del SEREMI del Medio Ambiente, Hernán Ramírez y el Director de Escuela de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza de la Universidad de Chile (FCFCN), Dr. Andrés Plaza, se llevó a cabo el cierre del proyecto que por dos años trabajó en el análisis y restauración de un área afectada por procesos de degradación históricos y la actividad del parque industrialcercano a la zona. El proyecto desarrollado por la FCFCN contó con financiamiento de Ministerio del Medio Ambiente.
Dentro de los principales resultados fueron la identificación de un área propicia para el establecimiento de un piloto de restauración ecológica dentro del área verde del PREMVAL, el análisis ecológico del sector seleccionado evaluando especies de plantas y estado de los suelos.
También se elaboró el diseño del piloto en cuanto a estructura de la vegetación, ubicación de las plantas, incorporación de sistemas de monitoreo ambiental avanzados y de riego tecnificado, y el desarrollo de obras de conservación de suelos con fines demostrativos. Lo anterior gracias al financiamiento del Ministerio del Medio Ambiente, contemplado dentro de las medidas del Programa para la Recuperación Ambiental y Social (PRAS).
Dentro de las actividades ejecutadas se realizó un levantamiento de información predial en el área verde del PREMVAL, la selección de un área propicia para la implementación del piloto, el diseño y construcción de dicho piloto de restauración para la superficie seleccionada y finalmente jornadas de educación ambiental relacionadas con la restauración ecológica.
Los principales resultados fueron el análisis ecológico del sector seleccionado evaluando especies de plantas y estado de los suelos, la localización y análisis de un ecosistema de referencia, el diseño del piloto en cuanto a estructura de la vegetación, ubicación de las plantas, incorporación de sistemas de monitoreo ambiental avanzados y de riego tecnificado, y el desarrollo de obras de conservación de suelos con fines demostrativos y educativos y cuya recomendación propone continuar con las labores de monitoreo para la apropiada mantención del piloto de restauración en el tiempo. De manera complementaria, el proyecto ha permitido la formación de nuevos profesionales, tanto ingenieros/as forestales como ingenieras en recursos naturales.
En la instancia el SEREMI Hernán Ramírez, señaló que gracias a los resultados de este proyecto “nos ha permitido identificar y comprender los suelos con potencial presencia de contaminantes para hacer frente la problemática ambiental asociado a los pasivos ambientales generados por el parque industrial en el territorio. Esperamos que este ejemplo contribuya a que sea replicado por otros actores. Si bien la calidad del aire nos ha demandado mayor atención, como ministerio también abordamos el componente suelo, con el fin de abarcar todas las matrices ambientales.”