Cerró los ojos e intentó imaginar, imaginar lo que le transmitía aquel precioso mensaje. ¡Si! Ese mensaje le transmitía algo, algo sobre el mar, el que tanto le apasionaba y en el que sucedían todos aquellos entrañables recuerdos. Como aquel que sucedió el año anterior, cuando se dio cuenta de que algo ocurría, lejos en el mar, y vio una enorme nube producida por los bombardeos, fue realmente ahí cuando despertó a la cruda realidad.