TEORÍAS:
En la década de 1920, el profesor Alex Hrdlicka propuso la hipótesis de que todas las poblaciones americanas descienden de un único grupo de gentes que vino desde el continente asiático a través del Estrecho de Bering, el corto tramo que separa a Siberia, en el Asia de Alaska, en América.
A partir de 1940, nuevos datos permitieron que otros investigadores defendieran la hipótesis del origen múltiple de las poblaciones americanas. A partir de principios arqueológicos, lingüísticos y antropológicos el investigador francés Paul Rivet estableció una teoría migratoria que explicaba el origen del hombre americano por la llegada de cuatro oleadas de grupos étnicos diferentes procedentes de Asia, Australia y de las islas de Oceanía, Melanesia y Polinesia.
El investigador Antonio Méndez Correa sostuvo que los primeros pobladores llegaron de Australia.
Otros investigadores consideran que llegaron desde Europa a América del Norte.
Recordamos cómo vivían los seres humanos en el PALEOLÍTICO
MESOLÍTICO
El MESOLÍTICO es el periodo intermedio, que se halla entre el Paleolítico y el Neolítico, y es por ello que en ocasiones se le llama la Edad Media de Piedra.
La delimitación temporal del Mesolítico no es del todo fija, ya que estamos hablando de periodos bastante irregulares de tiempo, debido a que no existen grandes fuentes que nos permitan fijar unos años concretos. Más o menos las fechas deben ser entre hace 12.000 años, y su final puede variar entre los 9000 a. C. o incluso algo más tarde en determinadas zonas.
La importancia del Mesolítico es mucho mayor de lo que se piensa, ya que en esta etapa comenzaron la agricultura y la ganadería, sustituyendo poco a poco a la caza y recolección.
Los cambios del Mesolítico fueron muy variados, aunque la mayoría están relacionados con el fin de las glaciaciones y la extinción de los grandes mamíferos. Los hombres del Mesolítico gradualmente comenzaron a ser sedentarios y a buscar otras actividades alejadas de la caza y la recolección.
Las principales características del Periodo Mesolítico son las siguientes.
El Mesolítico estuvo marcado por el fin de una era de glaciación, por lo que durante estos siglos los hielos se derritieron y aumentó el nivel del mar, causando un clima muy diferente.
La inundaciones causadas por el deshielo, unido al nuevo clima cálido y seco provocó que los humanos tuvieran que cambiar muchas de sus costumbres.
Los hombres del Mesolítico se dedicaban a la pesca, caza y recolección, pero la llegada de las nuevas temperaturas hizo que ya no tuvieran que migrar dependiendo del clima, y pudieran quedarse en un mismo lugar durante años.
Al igual que en el resto de la Edad de Piedra se usaba una gran cantidad de herramientas de piedra, siendo las de este periodo de mayor calidad que las usadas en el Paleolítico.
El clima hizo que una serie de mamíferos y aves de pequeño tamaño pasaran a ser las especies más numerosas en el planeta, causando que la dieta de los hombres del Mesolítico cambiara.
El nuevo clima y la aparición de la agricultura aumentó el número de frutas y vegetales de la dieta de los humanos, convirtiéndose en el gran protagonista de su dieta junto a la carne de los animales pequeños.
Se podría decir que aparecieron las primeras ciudades, ya que los pequeños grupos de seres humanos comenzaron a agruparse en un único lugar, cambiando la idea de que los grupos debían moverse continuamente de un lugar a otro.
El arte, que hasta ese momento había sido rupestre, paso a uno más abstracto, apareciendo las primeras diferencias artísticas entre los grupos. Poseemos muchos restos del arte de la época, gracias a lo cual podemos dividir a la población de la época en una serie de culturas.
Se podría decir que la sociedad paso de un estado cazadores-recolectores a uno más productor, donde se realizaba la producción mediante la agricultura y la ganadería.
Aparecieron los primeros cementerios, donde los pobladores enterraban a su muertos ya fuera de forma individual o colectiva. No estamos seguros de las razones por las que se realizaban estos actos, aunque la corriente predominante habla de la creencia de los hombres del Mesolítico de una vida tras la muerte, o de la existencia de dioses.
NEOLÍTICO
Algunas de las características principales del período neolítico fueron las siguientes:
Es un período relativamente corto dentro de la Prehistoria
Cuando se divide en etapas, estas son tres: inicial, media y final
Se estableció el uso de la agricultura y la ganadería, puesto que se empezaron a cultivar distintos alimentos en diversas partes del mundo y a domesticar algunas especies animales
Debido a esto, aparecieron los primeros asentamientos humanos, es decir que los hombre de entonces dejaron de ser nómadas para convertirse en sedentarios
Se perfeccionaron algunas técnicas, entre estas la fabricación de herramientas y armas con piedra pulida en vez de tallada
Se crearon hornos tanto para cocinar como para mejorar la cerámica, por lo que se empezaron a almacenar y transportar alimentos
Mejoró mucho el arte tanto en las propias herramientas como en las paredes y los tapices que se decoraban
Todo esto llevó a que los poblados crecieran rápidamente y prosperaran
ARTE
El arte en esta etapa mejoró considerablemente. Las decoraciones que representaban escenas de la vida cotidiana pasaron a ser formas geométricas mejor detalladas y se decoraron no solo paredes, sino también cerámicas y telares.
Además, los monumento megalíticos también fueron muy frecuentes, pudiendo diferenciarse tres tipos según la distribución y la colocación de las piedras: los menhires, los dólmenes y los crómlechs
¿CÓMO VIVÍAN?
Los humanos de esta época crearon los primeros asentamientos humanos, ya que gracias al descubrimiento de la agricultura y de la ganadería comenzaron a ser sedentarios. Es decir, se establecían en una zona y allí formaban un poblado, puesto que ya no necesitaban salir a cazar tan a menudo, entre otras cosas necesarias en la etapa anterior.
Bastante al principio del Neolítico, hacia el año 7.000 a.C., aparecieron las primeras comunidades fijas de Homo Sapiens basadas en la agricultura y la ganadería. Estas se dieron más o menos en el mismo período de tiempo en Oriente Medio, el área de Creta, la península de Anatolia, Grecia y la parte occidental del valle del río Indo y en América.
Así, comenzó a haber una estratificación social más marcada, ya no era importante solo quien tenía más edad, el mayor del grupo, o el más fuerte, sino también el que tenía más conocimientos o lograba mejor obtención de alimentos y otros bienes, puesto que el intercambio comercial paulatinamente comenzó a ganar mucha importancia.
En la zona llamada tradicionalmente "Creciente Fértil", por su forma de media luna en su forma de cuarto creciente, la civilización surgió gracias a los fértiles valles de tres ríos principales: el valle del Nilo, en Egipto, el valle del río Orontes, en Palestina y, por último, el valle de los ríos Tigris y Éufrates, en Mesopotamia. Fuera de estas zonas hay: desiertos al sur de Mesopotamia y al oeste de Egipto, así como tierras áridas y altas mesetas del noroeste al noreste.
FUENTES
“[…] Hice entrar en la nave toda simiente de vida; hice subir a toda mi familia y mi progiene, el ganado del campo, los animales del campo, los artesanos (luego) entré en la nave y cerré mi puerta, La dirección de la nave la confié a Puzur Enlil, el barquero…
[…] Cuando despunta el día, una nube negra subió desde el fondo de los cielos. Abad (dios del huracán) mugía en ella […] Nabon (heraldo de los dioses) y el Rey (Marduk, rey de los dioses) caminan delante. Van por la montaña y el país; Nergal (dios de los infiernos) arranca el palo […] Inurta (dios de la guerra) dirige el ataque […] El tumulto de Adad llega a los cielos. Todo lo que es brillante se transforma en tinieblas…
[…] Seis días y seis noches, marchaba el viento y el diluvio: el huracán domina el país. Cuando llega el séptimo día, el huracán ha sido abatido, así como el diluvio […] El mar descansa, el mal viento se apacigua, el diluvio cesa […]
Miré el mar…Toda voz se había callado. ¡Y toda la humanidad convertida en barro! La marejada llegaba hasta los techos. Abrí la ventada y la luz ilumino mi mejilla. Lloré… Miré el mundo y el horizonte del mar […] A doce (medidas) se levantaba una isla… (esta) retuvo la nave y ya no la dejó mover […]
[…] Cuando llegó el séptimo día, hice salir una paloma y la solté […] Fue […] volvió […] Hice salir una golondrina y la solté […] Fue […] volvió […] Hice salir a un cuervo y lo solté […] Fue y vio la desaparición de las aguas; como, se empantana, croaja, no vuelve. Hice soltar varios a los cuatro vientos, esparcí una libación, coloqué una ofrenda sobre la cima de la montaña. Coloqué catorce vasijas y, debajo esparcí cedro y mirto. Los dioses aspiraron el aroma, los dioses, como moscas, se reunieron alrededor del sacrificador […]”.
Delaporte, L. La Mesopotamia. [S.l.], La renaissance du livre, 1923.
“[…] El Tigris y el Éufrates no son como el Nilo. Sus crecientes son caprichosas e imprevisibles, pueden romper los diques construidos por el hombre y arrasar sus cosechas. Soplan vientos […] que arrastran un polvo asfixiante y sofocan al hombre con lluvias torrenciales, que convierten el suelo firme en un mar de lodo e impiden al hombre moverse en libertad, bajo pena de hundirse en el fango. Así, en Mesopotamia, la naturaleza no se impuso límites, en la plenitud de su poderío interfiere y contrarresta la voluntad del hombre, haciéndole sentir claramente su escasa importancia”.
Frankfort, Henri. El pensamiento prefilosófico. México, F.C.E., 1954.
El Zigurat o templo
Los templos sumerios llamados zigurat fueron los centros organizadores de la vida económica de las ciudades-Estado sumerias. Poseían granjas para el cultivo y la cría de animales, talleres artesanales y depósitos para el almacenamiento de la producción. Los agricultores que vivían en las zonas rurales que rodeaban los centros urbanos tenían la obligación de entregar tributos en productos y en trabajo a los sacerdotes que dirigían los templos.
Desde el templo, se establecían relaciones comerciales con otras ciudades sumerias e inclusive con regiones más alejadas como Egipto y Asia Menor.
Los templos también organizaban diferentes tipos de trabajos que debían desempeñan hombres libres a los cuales se les entregaba tierras para cultivar y a los que, además, se les exigía el servicio militar en caso de guerra.
El palacio real
Los palacios eran las residencias de los reyes, a quienes consideraban representantes de un dios. La lucha ente las distintas ciudades sumerias por el dominio de las tierras cultivables llevó a los reyes a concentrar funciones militares y a competir con el poder de los sacerdotes.
Los reyes eran responsables de organizar la defensa de la ciudad, de administrar la distribución de las tierras y de la construcción de canales de riego.