LA PROMOCIÓN, ENTRE EL AUGE Y EL INICIO DE LA DECADENCIA (1690-1810)

SALAS 5, 6 Y 7

En estas salas se agrupan las obras correspondientes al dilatado período que ocupa el "extenso" siglo XVIII. En esta etapa España asiste a un resurgimiento económico que revierte en la continuación de las principales empresas arquitectónicas, fundamentalmente la catedralicia (reanudada en 1719 y cesada en 1782), y sobre todo en la renovación, redecoración y equipamiento de mobiliario y ajuar litúrgico de los templos de la diócesis, incluida la Catedral. La profusión decorativa a base de yeserías, retablos e imágenes, reviste a los templos del lenguaje barroco más exuberante y del rococó. Cabildo, obispos y particulares, como los Condes de Buenavista en Málaga, continuarán siendo los principales promotores de la época.

Sin embargo, en esta etapa también se produce el expolio, debido a la ocupación francesa de la ciudad (1810-1812), cuando los edificios fueron sometidos a un gravísimo saqueo que supone la primera gran pérdida del patrimonio histórico de la diócesis.

Entre las numerosas piezas expuestas en estas salas habría que destacar Santa Catalina de Pedro Roldán, dos tallas de finísima factura napolitana Santa María Magdalena y Santa Teresa de Jesús, un óleo de Luca Giordano, Santa Teresa doctora, así como las obras de Fernando Ortiz, Juan Correa y esculturas y piezas de platería de los conventos antequeranos.