Un vídeo está constituido por una sucesión de imágenes (frames) que, al pasarse con una determinada cadencia, reproducen movimientos. Estas imágenes pueden estar acompañadas por sonido. El ojo humano es capaz de distinguir aproximadamente 20 imágenes por segundo, por ello cuando se muestran más de 20 imágenes por segundo, es posible engañar al ojo y crear la ilusión de una imagen en movimiento.
Si se quiere manipular vídeo con un ordenador, este debe estar en formato digital (unos y ceros), por ello debemos tener en cuenta los siguientes parámetros que determinan la calidad del vídeo digital:
- RESOLUCIÓN DEL VÍDEO: determina el número de puntos (pixeles) horizontales y verticales que componen cada imagen. Por ejemplo, la resolución del formato DVD es de 720 * 576 pixeles. Actualmente el soporte HDV (alta resolución) es el más extendido y dispone de dos tipos: 720p (1080 * 720 píxeles de tipo progresivo) y 1080i (denominado full HD, entrelazado, 1920 * 1080 píxeles).
- FPS (FRAMES POR SEGUNDO): es el número de imágenes que se suceden en un segundo. En la zona Europea es de 25 imágenes por segundo (PAL) mientras que en la zona Americana y Asiática es de 30 imágenes por segundo (NTSC). En el mundo del cine se utilizan 24 imágenes por segundo. Podemos utilizar cualquier FPS para nuestros vídeos, pero con un número bajo notaremos que el vídeo va a tirones. También hay que decir que a mayor FPS más ocupará el archivo correspondiente al vídeo.
- BITRATE: indica la cantidad de información digital (normalmente en Megabits) que se utiliza para almacenar un segundo de vídeo. Por ejemplo, un bitrate de 9 Mbit/s indica que cada segundo de ese vídeo ocupa 9 millones de bits, aproximadamente 1,1 Mbytes. Un bitrate más pequeño que otro da lugar a un vídeo de peor calidad al tener que eliminar información.